Dijo Orson Welles que el avión es un aparato que sólo puede generar dos tipos de emociones: el aburrimiento y el terror. En el caso de un Hércules C 130 de la Fuerza Aérea venezolana que realizó una breve escala técnica en Paraguay, podríamos hablar de la segunda de las opciones, dado que tras un gran revuelo periodístico terminó desatando una verdadera paranoia anti-bolivariana.
No se supo quiénes venían en el avión y para qué lo hacían, no se supo qué carga traía el avión, que maletines había traído con dinero para los gobiernos argentino y boliviano.
En la misma semana, un avión de carga presuntamente venezolano que cayó en las cercanías de Gao, en Mali, fue acusado de haber arrojado previamente unas diez toneladas de cocaína en el desierto del Sahara, Las acusaciones fueron realizadas el martes 17 de noviembre por un portavoz de la agencia de la ONU para la lucha contra la droga, y fueron difundidas por la emisora británica BBC. El avión cayó por motivos desconocidos sobre el Sahara, no lejos de la frontera con Niger.
Hace tiempo que se conoce del tráfico de cocaína desde Sudamérica hacia Europa a través de Africa. En Guinea Bissau una serie de capos de la droga colombianos construyeron mansiones y se convirtieron en “inversionistas” en la economía del pequeño estado. Hace apenas un par de semanas, el hijo del fallecido presidente de este país Lansana Conte fue acusado por tráfico de drogas.
LOS MALETINES FANTASMAS
El vicepresidente de Paraguay, Federico Franco, solicitó al presidente Fernando Lugo el inicio de un sumario para aclarar las circunstancias en las que un avión Hércules C-130 de la Fuerza Armada Nacional hizo "escala técnica" en el aeropuerto Silvio Pettirossi.
En un informe que consignó al mandatario, Franco expuso las contradicciones en las que incurrieron tres organismos del Estado en torno al hecho. Tanto las Fuerzas Armadas de Paraguay como la Dirección Nacional de Migraciones informaron que el motivo del aterrizaje fue abastecimiento de combustible, mientras que la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil aseguró que no hubo tal solicitud.
Según la prensa paraguaya, el manifiesto de vuelo del avión venezolano revela que de de Ezeiza (Argentina) salieron 14 tripulantes, pero dos "desaparecieron" tras hacer escala en Paraguay. Los militares Rafael Polo y José Gélvez no figuran en la nómina de pasajeros que partió a Caracas.
En este sentido, algunos recordaron la historia salida de un guión de Quentin Tarantino que se creó a partir del caso del maletín de Antonini Wilson y la denuncia de supuestos aviones cargados con armas que llegaron a Bolivia.
SIN CONTROLES
“Un avión sin controles puede traer cualquier cosa y llevarla” opinó el analista y editorialista de La Nación Alberto Vargas Peña, quien reconoce que “aviones militares de los Estados Unidos que traen carga para la embajada, tienen, desde hace tiempo, un sistema especial”
El avión venezolano, el Hércules C 130 que aterrizó el jueves antepasado, debió informar a la FA paraguaya de su arribo, su lista de pasajeros y la razón de su aterrizaje.
“El dictador de Venezuela hace de su FAV lo que quiere, y el dictador ha hablado de sus deseos guerreristas”, por lo cual “el caso del avión venezolano es bastante grave”.
“Como el gobierno paraguayo está acusado de sostener la política “bolivariana” no sería raro que algún maletín hubiera llegado” afirma también Vargas Peña, quien concluye que “La abierta inacción de los principales miembros del gobierno en lo relacionado con el avión venezolano parece demostrar que el dictador de Venezuela tiene grandes espacios propios en el Paraguay”.
ALGO IMPORTANTE
“Estos personajes han traído algo importante. Pudo ser dinero”, manifestó a una emisora radial el legislador López Chávez, vicepresidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de Diputados.
El miembro de la Cámara Baja manifestó que se quedó más inquieto tras la explicación brindada por el Ministerio de Defensa y la Cancillería sobre el descenso de la aeronave venezolana.
El Hércules C-130 arribó al país en una “escala técnica”, descendiendo en el aeropuerto internacional “Silvio Pettirossi”, transportando entre ocho y 12 pasajeros, según algunas de las dispares y contradictorias versiones brindadas por las autoridades.
EL HIJO BOBO DE HUGO CHAVEZ
Sea cual haya sido el motivo por el cual el avión venezolano realizó una escala técnica en Paraguay: descargar armas, drogas, maletines, lo cierto y concreto es que el episodio sirvió para volver a desnudar las contradicciones y debilidades dentro del gobierno del hijo bobo de Hugo Chavez, el clérigo-presidente Fernando Lugo.
También dio letra a los clientes del imperio en Paraguay para volver a cargar contra el supuesto compromiso “bolivariano” de Lugo, quien paradójicamente no cesa de recibir asesoramiento, dinero y directivas de la representante de Washington en Paraguay, la embajadora de Barack Obama y ex operadora del Plan Colombia, Liliana Ayalde.
Mientras la prensa mediática vinculada a la embajada norteamericana se ocupa del “avión venezolano” con tapas y titulares tamaño catástrofe, un “batallón anti-terrorista” equipado, entrenado y dirigido por la embajada norteamericana en Paraguay siembra el terror en el norte del país, con la coartada de combatir los secuestros.
El célebre escritor francés Antoine de Saint Exupery escribió que “el avión es solamente una maquina, pero qué invento tan maravilloso, qué magnífico instrumento de análisis: nos descubre la verdadera faz de la Tierra”.
En el caso de los aviones de Hugo Chávez, se puede ir mucho más allá, y afirmar que permiten hacer todo un diagnóstico sobre la sociedad paraguaya, sus paranoias, fantasmas y confrontaciones, apenas con una insignificante escala técnica.
|