La falta de sueño o el insomnio son más habituales de lo que muchos podrían creer. Es un problema que ha sido adjudicado al estilo de vida moderno, en el que el estrés y el vértigo del día a día han puesto en jaque la salud de millones de personas.

El 60% de los españoles no busca ayuda para dormir bien durante los meses de verano, a pesar del calor, según el Centro de Investigación sobre Fitoterapia (INFITO) que ha realizado una encuesta entre 2.400 personas.

El sueño es un factor de riesgo modificable y tratable para la salud y calidad de vida de la población.

La importancia de un descanso efectivo y reparador tiene su reflejo en algunos de los síntomas que experimentan los insomnes.

Pediatras de toda España se han reunido en el simposio ‘Falsos mitos en pediatría’, organizado por Johnson’s® en el marco del Congreso Nacional de la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP).

La revista de la Sociedad Española del Dolor analiza en un artículo la necesidad de utilizar la calidad del sueño como indicador de calidad en el manejo del dolor con analgésicos.

La llegada de las nuevas tecnologías a la vida cotidiana ha hecho que los dispositivos electrónicos y las pantallas intervengan de forma cada vez más activa en la rutina de las personas.

Aún queda mucho por descubrir sobre por qué necesitamos un 30% de nuestro tiempo para dormir.

Este aumento de las horas en vigilia "es característico del mundo moderno, que invierte más tiempo en su actividad social", según el sociólogo Francesc Núñez.

Los médicos recomiendan "mantener los mismos hábitos y acostarse a la misma hora, ya que el sueño requiere de rutina y monotonía".

El 90% de los casos de enuresis están causados por un trastorno fisiológico, de los cuales alrededor de un 85% se debe a causas hereditarias.

El último domingo de octubre entra en vigor el horario invernal, por lo que en la noche del sábado al domingo hay que retrasar el reloj una hora.

La enuresis nocturna es un problema de alta prevalencia que causa problemas de ansiedad, autoestima, bajo rendimiento escolar y problemas de socialización.

Especialistas en el cuidado de la audición han elaborado un estudio para conocer cómo toleran estos ruidos los españoles y cuáles son considerados los más molestos de vivir en compañía.