Los de Joan Carles Oliva tuvieron que dar la vuelta al marcador
Tarde mágica en Tarragona, donde el Nàstic se impuso al Albacete por 2-1 y el Barcelona B goleaba sin paliativos al Salamanca. Una carambola que supone la permanencia de los tarraconenses en la Liga Adelante y que condena a los charros al pozo de Segunda B. A falta de una jornada para la conclusión, los grana certificaron un sueño que parecía imposible lograr hace sólo unos meses.