Escribió Bernard Shaw que el dinero no es nada, pero mucho dinero, eso ya es otra cosa. Tal vez un razonamiento similar fue el que llevó a los autodenominados líderes políticos paraguayos a pisotear todos los principios éticos imaginables durante la reciente campaña electoral, concluida con la victoria de Horacio Cartes.
Por si fueran pocos los escándalos que envuelven al senador Oviedo Matto, a quien Hugo Chávez denunció por pedirle 12 millones de dólares para votar en el Congreso Paraguayo por el ingreso de Venezuela al Mercosur, ahora lo acusan de quedarse con dinero de su partido y sus adherentes.
Se habla de entre tres y seis millones de dólares que habrían sido malversados por Matto, a los que habría que sumarle los dos millones que una cotizante pagó a cambio del lugar tres en la lista de senadores, además del millón y medio que UNACE recibió como subsidio electoral. En total serían entre siete y diez millones de dólares los que desaparecieron como por arte de magia
El líder del partido, General Lino César Oviedo, falleció en un extraño accidente de aviación en el mes de febrero, en plena campaña electoral, por lo cual sus seguidores buscaron una alianza con el Partido Liberal. Ahora los militantes de la agrupación denuncian que no recibieron el dinero que se había recaudado para la campaña, dado que de los tres giros que UNACE se había comprometido mandar, recibieron solo uno.
“El día de las elecciones nosotros teníamos apenas 270 mil guaraníes para repartir entre 12 miembros mientras que los Colorados pagaban ¡200 mil por voto!” señaló a la prensa un destacado dirigente del partido de Oviedo Matto.
La falta de veedores denunciada al comenzar la jornada electoral tenía una sola razón. “Los colorados pagaron 500 mil a cada veedor para que cambiara de bando”, explican.
Aparentemente UNACE invirtió en la elección apenas 2 millones de dólares, menos de la tercera parte del dinero que había acopiado en aportes.
¿Qué pasó con los fondos que el PLRA entregó a UNACE a cambio del apoyo a su candidato presidencial?.
Los liberales apuntaron como negociador a Jorge Oviedo Matto, quien entregó su partido a cambio de fuertes sumas, que engrosaron el monto desaparecido. Carmelo Benítez, presidente de UNACE, confesó que la familia Oviedo le hizo firmar 35 cheques en blanco a nombre de la nucleación política días antes de la elección, condimentando el escándalo con nuevas revelaciones. Oviedo Matto es el mismo senador a quien Hugo Chávez e Itamaraty responsabilizaron de pedir soborno para votar por el ingreso de Venezuela al MERCOSUR. Posteriormente debió renunciar a la presidencia del Senado Paraguayo debido a los escándalos por corrupción que protagonizó.
Posteriormente protagonizó innumerables escándalos por corrupción, como los vinculados a la estafa perpetrada con tierras al INDERT y al INDI de Paraguay. Por si todo ello fuera poco, hoy Domingo sale a la luz que pagó G. 500 millones (alrededor de 100 mil dólares) a una serie de obras que, finalmente, además de quedar paralizadas, fueron desmontadas.
Una de ellas fue la colocación de mamparas divisorias en el edificio antiguo de la Cámara de Diputados en marzo pasado. La innovación que se realizó pasó por encima de las leyes que protegen a los edificios históricos, además de resultar anti-estética e inútil.
Otra obra que finalmente resultó inservible y tuvo que desarmarse fue una tarima que se montó en el cuarto piso de la Cámara Alta, con la intención de mejorar el espacio destinado a la prensa. Sin embargo, los periodistas acreditados ante el parlamente denunciaron que las innovaciones de Oviedo Matto dificultarían todavía más su ya difícil labor.
El parlamentario se negó a responder a la prensa sobre estas acusaciones. En las últimas semanas fueron apareciendo un sinfín de denuncias de particulares contra el citado senador, que incluso engaño a sus colegas para ceder tierras a sus amigos, con el pretexto que se trataba de un grupo de indigentes.
En tanto sigue la interminable lista de ilícitos perpetrados por Oviedo Matto, queda cada vez más claro que el personaje de marras resultó beneficiado con todos los negocios habidos y por haber.
Oviedo Matto volvió a aparecer en la prensa en estos días, defendiendo el derrocamiento del gobierno que a mediados del año pasado, llevó al aislamiento del Paraguay en la región, al ser excluido del Mercosur y la UNASUR. Luego de aquellos sucesos, Oviedo Matto perdió su investidura de presidente del Congreso, de la que fue despojado en medio del bochorno en el que envolvió al Parlamento con sus negociados e inconducta.
A pesar de todos estos hechos que hoy son de público conocimiento, estos prohombres del Paraguay siguen pretendiendo ser considerados como “honorables”. Es que como se dijo alguna vez, cuando la estafa es enorme acostumbra tomar un nombre decente. Oviedo Matto es otro caso de prueba.
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