Decía un pensador que la política es el arte de lo posible, a lo que Francoise Sagan añadió la observación que el arte consiste en tomar a la realidad por sorpresa. Es lo que por estas fechas se da en Paraguay, donde un presidente que las corporaciones mediáticas se esforzaron en presentar como un heredero de arcaicas dictaduras anticomunistas, ha empezado a exteriorizar su modernismo y sensibilidad social inusitada.
“Avísenme si no se resuelve este caso”, dijo el presidente Horacio Cartes a sus colaboradores, ni bien recibió el pedido de una señora con impedimento físico, quien ni bien se le acercó el mandatario, le comentó que no tiene parientes, menos alguna asistencia del Estado, y que vive en la indigencia.
El Jefe de Estado participó en la mañana del viernes, 1 de noviembre, de la apertura de la implementación del Programa Nacional de Reducción de Pobreza Extrema, en 25 de Diciembre, departamento de San Pedro. Cuando se retiraba del tinglado municipal donde se realizó el acto, Cartes observó a una humilde señora sentada en el suelo, pues está imposibilitada de caminar.
Inmediatamente, el mandatario se le acercó, la saludó, momento en que la mujer le miró fijamente al gobernante y le dijo entre suspiros, que se encuentra muy sola, sin medios económicos y vive en extrema carencia. “Quiero nomas señor Presidente contarle que no tengo familia, padre ni madre, vivo sola y necesitada, no tengo ningún sueldo”, expresó en guaraní la mujer, mientras el Jefe de Estado, visiblemente emocionado, se inclinaba para abrazarla.
Con indumentaria de reminiscencias bolivarianas, el presidente paraguayo encabezó la semana pasada un acto de entrega de víveres en el departamento de San Pedro, durante el cual criticó duramente a los grupos que lucran invocando la pobreza del Paraguay y los indígenas. En Paraguay, la mayoría de estos grupos se encuentran vinculados a ONG del andamiaje NED USAID CIA, que han pretendido establecer una verdadera dictadura sobre los fondos del estado paraguayo.
Ya se han llevado demasiado dinero en nombre de los indígenas o la pobreza" puntualizó, en la misma línea crítica hacia las ONG que marcara el Papa Francisco.
Si algo está claro en Paraguay, es el hecho que no se puede subestimar la capacidad y efectividad de la ingerencia del imperio. Sobre todo porque su detección es difícil y su fachada impecable.
Usando un bien logrado camuflaje, fingen pretender ayudar a las comunidades pobres o indígenas, en favor del bienestar general del país, pero en realidad buscan ocasionalmente desestabilizar e implementar una agenda contraria a los intereses soberanos de la nación. En el mejor de los casos, exigen cupos en el gobierno y se instalan en ministerios y entes estatales, usurpando la representatividad que corresponde al partido político ganador en las elecciones.
Contrariando este esquema, Cartes también ha expresado a los medios que no tiene ningún recelo hacia el presidente Nicolás Maduro, con quien ya ha mantenido reuniones y conversaciones altamente fructíferas. El Canciller Eladio Loizaga confirmó que el presidente Horacio Cartes aceptó la invitación de su par venezolano Nicolás Maduro para visitar Caracas, y que el viaje se encuentra en agenda.
Debido a este fluido relacionamiento, voces afines a los medios reaccionarios se han levantado amenazando a Cartes con un juicio político similar al que sufrió Fernando Lugo, en un intento de evitar que asista a la cumbre del MERCOSUR en Venezuela.
El presidente Cartes ratificó varias veces que es un hecho confirmado que el Paraguay se reintegrará al MERCOSUR, y que Paraguay recibirá el honor de negociar en nombre del bloque con la Unión Europea.
La vocación integracionista de Cartes aún no puede ser asimilada por las voces reaccionarias, incapaces de encarar la sorpresa. Pecando de poco realistas, soñaban con el retiro del Paraguay del MERCOSUR y su acercamiento a bloques del Pacífico.
Dicen que el asombro es el punto de partida del pensamiento, y por allí deberían empezar los ojos ajenos que hoy se asoman a la realidad del Paraguay. Es evidente que olo así tendrán esperanzas de comprenderla.
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