Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Profesor | Matemáticas | Lecciones | Amigos | Consejo
Vive en mí

​Mi profesor de matemáticas

|

Tuve un profesor de matemáticas durante la primaria al que admiré como ser humano más que como profesor. Fue él quien me dio la mejor lección de vida, esa a la que recurres cada vez que hablas con tus conocidos, compañeros de trabajos, familiares lejanos o vecinos. Esa lección es muy sencilla: "no hay amigos, sino cómplices".


Él, que nos quería como a sus hijos nos lo repetía todos los días, y como repitiendo se aprende, ahora yo no hago más que recordarlo. "No hay amigos, sino cómplices".


Entonces sé que en todos los rostros de mis amigos y en sus almas, no habrá una total entrega, salvo que yo también les ofrezca algo a cambio. La vida es un negocio y un intercambio de favores y objetos. En eso consiste tener relaciones con el resto del mundo, en el yo te doy ahora y tú me das más tarde, o como te di me tienes que devolver.


Eso es así y creo que nadie podrá cambiarlo ya. Es una forma de ser aprendida y memorizada a fondo como lo es en mí la lección que mi querido profesor nos repetía todos los días y que ya conocéis. El intercambio es algo que se lleva haciendo ya desde hace muchos años y que dice mucho de nosotros pues es muy gratificante dar sin recibir.


"Sólo si das, recibirás de tus amigos", luego yo creo que no tengo amigos, tengo cómplices.

Él fue una persona muy especial para mí y me ha dado el mejor consejo de vida que se pude dar en medio de números, cuentas y raíces cuadradas que explicaba como nadie. 


Él era un profesor filósofo que me enseñó a vivir en sociedad, por muchos llamada suciedad y puesto que me ha dado eso yo le recuerdo ahora.


Gracias por tu lección día a día repetida.

​Mi profesor de matemáticas

Vive en mí
Aurora Peregrina Varela Rodriguez
miércoles, 12 de enero de 2022, 08:27 h (CET)

Tuve un profesor de matemáticas durante la primaria al que admiré como ser humano más que como profesor. Fue él quien me dio la mejor lección de vida, esa a la que recurres cada vez que hablas con tus conocidos, compañeros de trabajos, familiares lejanos o vecinos. Esa lección es muy sencilla: "no hay amigos, sino cómplices".


Él, que nos quería como a sus hijos nos lo repetía todos los días, y como repitiendo se aprende, ahora yo no hago más que recordarlo. "No hay amigos, sino cómplices".


Entonces sé que en todos los rostros de mis amigos y en sus almas, no habrá una total entrega, salvo que yo también les ofrezca algo a cambio. La vida es un negocio y un intercambio de favores y objetos. En eso consiste tener relaciones con el resto del mundo, en el yo te doy ahora y tú me das más tarde, o como te di me tienes que devolver.


Eso es así y creo que nadie podrá cambiarlo ya. Es una forma de ser aprendida y memorizada a fondo como lo es en mí la lección que mi querido profesor nos repetía todos los días y que ya conocéis. El intercambio es algo que se lleva haciendo ya desde hace muchos años y que dice mucho de nosotros pues es muy gratificante dar sin recibir.


"Sólo si das, recibirás de tus amigos", luego yo creo que no tengo amigos, tengo cómplices.

Él fue una persona muy especial para mí y me ha dado el mejor consejo de vida que se pude dar en medio de números, cuentas y raíces cuadradas que explicaba como nadie. 


Él era un profesor filósofo que me enseñó a vivir en sociedad, por muchos llamada suciedad y puesto que me ha dado eso yo le recuerdo ahora.


Gracias por tu lección día a día repetida.

Noticias relacionadas

La vida, por sí misma, es una sinfín de espacios y una pluralidad de latidos. La uniformidad es la propia muerte, que nos deja sin palabras y sin búsqueda. Ciertamente, cada cual somos únicos, pero al mismo tiempo requerimos de un profundo espíritu de comunión, que es en realidad lo que nos hace crecer, para poder alcanzar la ansiada meta de lo armónico.

El pueblo palestino y los que apoyan su causa conmemoraron el aniversario número 76 de la Nakba este 15 de mayo, fecha que referencia el día después de que, en 1948, se estableciera formalmente el Estado de Israel. El término “Nakba”, que en árabe significa “catástrofe”, se utiliza para describir las masacres y el desplazamiento forzado que sufrió el pueblo palestino en el período previo y a lo largo de 1948. Unos 900.000 palestinos fueron expulsados de sus hogares.

"Delenda est Educatio". Era la consigna socialista hace unos 36 años, allá por cuando se trabajaba la LOGSE y “la gran política sanchista” ha concluido la tarea. Jamás se pudo hacer tanto mal en tan poco tiempo, con tan poco sentido común, con tal carencia de humanidad y de sentido social.


 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto