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Miguel Angel Valerón: "Puse la pierna, quizás ingenuamente". | |||
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Entre tanto bullicio levantado por el último derbi entre Barcelona y Real Madrid, la entrada de Marcelo a Cesc Fabregas, digna de un cuadrilátero de lucha libre que terminó con la expulsión del jugador madridista. Se me viene a la cabeza una entrada no menos agresiva y que truncó la carrera de un genio del fútbol. Poco, o muy poco se sabe de esta historia, y yo gracias a mi compañero de trabajo Jorge "El canario", os quiero hacer partícipe de ella. "un jugador explosivo, muy rápido, muy técnico y con esa elegancia innata en los Valerón, que de no haber sido por esa maldita lesión habría llegado muy lejos en el fútbol". Con esta definición mi compañero Jorge me abrió el gusanillo por conocer más de la historia de Miguel Angel Valerón. Si hablamos de Ferrer todos lo recordamos como el "Chapi" Ferrer, ese jugador bajito del Futbol Club Barcelona que corría la banda como un galgo, pero si hablamos de Miguel Angel Valerón, todo pensaremos que no es más que una errata de este diario digital, pero no es así, y paso a poneros un poco en situación. El veintitrés de marzo de mil novecientos noventa y siete, cuando corría el minuto sesenta y dos de la semifinal de Copa del Rey que enfrentaba a Las Palmas con el Barcelona, un balón dividido en la banda supuso el fin para Miguel Angel. Ferrer truncaría su carrera deportiva en una entrada brutal al lanzarse con las botas por delante, cayendo el bravo jugador canario fulminado con rotura de peroné, cápsula articular, ligamento tibio peroneo y ligamento deltoideo. "Fue una fractura abierta de tobillo, la tibia me rompió la piel". Ferrer recibió una pobre tarjeta amarilla, a pesar de ser la segunda entrada que hacía de similares características, ya que Miguel Ángel había entrado para suplir al lesionado Manuel Pablo. Meses más tarde el propio Miguel Ángel asentía a los medios de comunicación. "Puse la pierna, quizás ingenuamente". Desde ese día comenzó el calvario para Miguel Ángel "Me dieron nueve meses de recuperación", explica. "La mía fue una lesión parecida a la de Juninho, pero más grave, y si no se le dio la misma importancia fue porque somos la parte débil, y en principio se tapó todo porque no quisieron darle publicidad porque era el Barça, era Ferrer, y el pequeño siempre tiene las de perder". Miguel Ángel entró al quirófano en tres ocasiones, volviendo a jugar al fútbol años más tarde pero sin ser el que era. Angel Cappa describía al jugador como "un finísimo extremo diestro que era mucho mejor que un Juan Carlos que ya despuntaba de forma espectacular." Hoy en día su vida ya no está ligada al fútbol como la de su hermano pequeño, Miguel Ángel, que además es licenciado en Educación Física, colabora en las actividades y negocios familiares en el municipio, entre los que destacan una vaquería, una constructora y una finca, entre otras actividades, dirige el programa radiofónico que escúchanos en la emisora que lleva su apellido "Radio Valeron". |
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