El Rey Felipe VI mantiene libre de actos públicos su agenda para la semana que viene, con la única excepción del desfile militar con motivo de la Fiesta Nacional y la posterior recepción en el Palacio Real, el jueves 12 de octubre, según consta en la agenda difundida por Zarzuela. Desde que el pasado domingo tuvo lugar en Cataluña el referéndum independentista --pese a que había sido suspendido por el Tribunal Constitucional--, el jefe del Estado solo ha tenido una aparición pública: su mensaje televisado del martes por la noche, en el que dejó claro que los poderes del Estado tienen la responsabilidad de "asegurar el orden constitucional". El Rey admitió en ese mensaje que la situación es "de extrema gravedad" por la "deslealtad" de las autoridades catalanas que han intentado "quebrar la unidad de España y la soberanía nacional. Además, trató de lanzar un mensaje de tranquilidad a los españoles en su conjunto y especialmente a los catalanes que viven "con preocupación la conducta de las autoridades autonómicas". "Les digo que no están solos ni lo estarán, que tienen todo el apoyo y la solidaridad del resto de los españoles y la garantía absoluta de nuestro Estado de Derecho en la defensa de su libertad y de sus derechos", afirmó. Desde que el Parlament aprobó las leyes de ruptura los días 6 y 7 de septiembre --leyes suspendidas por el Tribunal Constitucional-- Zarzuela señala que el jefe de Estado está en contacto permanente con el presidente del Gobierno. Ningún miembro de la Familia Real ha tenido agenda pública esta semana y lo mismo sucederá la próxima, con la excepción de los actos del 12 de octubre. A las 11.00 horas, los Reyes presidirán en Madrid el acto de homenaje a la bandera nacional y el desfile militar acompañados por sus hijas, la Princesa de Asturias y lnfanta Sofía. Después, los Reyes ofrecerán la tradicional recepción en el Palacio Real. No obstante, en ambos casos se trata de actos en los que no suele haber palabras del jefe de Estado. Hubo una excepción, en 2013, cuando Don Felipe presidió el desfile no como Rey, sino como Príncipe de Asturias en sustitución de su padre, Juan Carlos I, que se recuperaba de una operación de cadera. En esa ocasión, hizo un brindis dedicado a reafirmar la unidad el "compromiso" de todos con un "futuro compartido de concordia y progreso para todos". "Hoy es un día para celebrar lo que nos une, recordar nuestra historia milenaria y lo conseguido juntos", dijo en esa ocasión, y añadió: "Si lo que nos une es mucho, mucho más es lo que cada día seguirá estrechando nuestros vínculos con la comunidad internacional".
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