La Sociedad Española de Farmacéuticos de Atención Primaria (Sefap) ha recomendado que los medicamentos antidiarréicos se tomen solamente cuando sean prescritos por el médico, ya que, como destaca Sofía Villalón, farmacéutica de Atención Primaria Magdalena, "no son efectivos en algunos tipos de gastroenteritis". Esta especialista ha recordado también que los antibióticos "no son eficaces" en el tratamiento de las gastroenteritis causadas por virus, que son las más comunes, y se transmiten a través del agua por consumir alimentos contaminados o por contacto directo con una persona infectada. Tal y como detalla Villalón, la gastroenteritis es una inflamación de la membrana interna del intestino causada por un parásito, una bacteria o un virus. El parásito más conocido es giardia, que también puede contagiarse a través del agua en parques acuáticos, piscinas, arroyos y lagos. En cuanto a las bacterias, las más habituales son la shigela (muy contagiosa de persona a persona), la salmonella (principal causade intoxicación de alimentos) y el escherichia coli (por contacto directo o por alimentos contaminados). "El mayor problema es la deshidratación, entre cuyos síntomas se encuentran sed excesiva, fiebre, boca seca, debilidad fuerte o letargo, producción baja de orina o de color amarillo oscuro, así como mareos o aturdimiento. La deshidratación leve puede tratarse bebiendo más líquido. Sin embargo, la deshidratación moderada a grave puede requerir terapia intravenosa para reemplazar el líquido que se ha perdido. La deshidratación grave sin tratar puede ser un riesgo vital", indica esta farmacéutica de Atención Primaria. Sobre las recomendaciones ante los síntomas de gastroenteritis, Villalón explica que en las primeras horas no se debe tomar alimentos sólidos y sí "de forma muy necesaria" una buena rehidratación oral (limonada alcalina a sorbos pequeños de forma continuada). "Cuando haya pasado esta fase se introducirá gradualmente y, si se tolera, dieta sólida astringente en pequeñas cantidades de alimentos permitidos como arroz, pescado blanco cocido o plancha, pan blanco, carne de ave a la plancha y frutas como plátano o manzana. Se debe evitar tomar leche o derivados (salvo yogurt natural y queso fresco), verduras crudas, dulces, bebidas refrescantes y muy frías, y aguas con gas", expone. Sin embargo, como destaca Ángel Mataix, presidente de la Sefap, "las más importantes son las medidas preventivas como lavarse las manos después de usar el sanitario y antes de comer; no consumir alimentos en sitios poco higiénicos; evitar la proliferación de animales dañinos en las despensas; tomar agua hervida o esterilizada; tapar adecuadamente los depósitos de basura; lavar con agua y vinagre los alimentos a tomar crudos; evitar compartir comida, agua y utensilios de cocina; refrigerar bien los alimentos y evitar romper la cadena de frío". "Cuantas mayores medidas higiénicas se realicen menores serán los riesgos de padecer una gastroenteritis", concluye.
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