- Admite que julio es un mes en el que suele haber “tensiones de liquidez” MADRID, 05 (SERVIMEDIA) El secretario de Estado de Seguridad Social, Tomás Burgos, admitió este martes que el Ejecutivo podría hacer uso del Fondo de Reserva de las pensiones si “eventualmente” se produce un desfase en la Tesorería. En declaraciones a los medios de comunicación tras su intervención en la comisión parlamentaria del Pacto de Toledo, Burgos apuntó que la utilización del Fondo sería “el último recurso”, pero agregó que “no habría que dramatizar” si finalmente es necesario. En este sentido, señaló que es en el mes de julio cuando se suelen producir “tensiones de liquidez” ya que es cuando “confluyen una paga ordinaria, una extraordinaria y el resto de pagas” a los pensionistas. Así, insistió en que el Ejecutivo sólo recurrirá al Fondo si es necesario pero adelantó que “está para eso”, es decir, para cubrir esas “tensiones de liquidez”. “Cómo descartar utilizarlo para lo que se creo”, respondió el secretario de Estado tras ser preguntado sobre si el Gobierno descartaba recurrir a la ‘hucha de las pensiones’. “Tenemos que pagar las pensiones mes a mes sin esperar a si hay recursos mes a mes”, sostuvo Burgos, quien reiteró que, dada esta situación, “eventualmente podríamos necesitar de algún apoyo de estas reservas”. El secretario de Estado explicó que en ocasiones anteriores estas tensiones de liquidez se cubrieron con el superávit del Sistema, pero en la actualidad eso no es posible ya que la Seguridad Social cerró el pasado ejercicio en negativo. De hecho, Burgos subrayó que “ya se cumplen los requisitos” establecidos para poder utilizar el Fondo, que fijan un mínimo de tres semestres en déficit. “Eso ya se da”, defendió. TENSIONES “COYUNTURALES” Anteriormente, en su intervención en la Comisión, el secretario de Estado admitió que el sistema de pensiones podría sufrir estas “tensiones importantes de liquidez en los próximos meses”, pero añadió que serían “coyunturales” y subrayó la “solidez” de la Seguridad Social. Así, apuntó que la Seguridad Social podría registrar “desajustes en los flujos financieros” provocados por las “insuficiencias” que pudieran sufrir otras entidades e instituciones que aportan al Sistema. El secretario de Estado explicó que la Seguridad Social “paga puntualmente mes a mes, pero no cobra por igual, mes a mes”. Por ejemplo, Burgos apuntó que los aplazamientos de las cuotas a la Seguridad Social otorgados a las empresas en dificultades, pese a que son necesarios, “también introducen un elemento de cierto desajuste”. También supone un riesgo la financiación del nivel no contributivo que debería asumir el Estado. En este sentido, recordó que la separación de fuentes de financiación del Sistema debería completarse durante el próximo año. Por último, el secretario de Estado agregó que hay “otros conceptos”, distintos de los aplazamientos y la separación de fuentes, que también introducen “desajustes” en la financiación del Sistema y podrían “producir desfases de tesorería en momentos puntuales”. SISTEMA VIABLE Sin embargo, advirtió de que no se debe “confundir” un “problema puntual y coyuntural con un riesgo para la viabilidad futura de la Seguridad Social”. “Sería confundir churras con merinas”, aseveró. Según Burgos, la viabilidad financiera de las pensiones “no está en riesgo”, aunque matizó que “dependerá de lo que hagamos con ellas en los próximos años, en los que nos enfrentaremos a importantes desafíos”. En concreto, advirtió de que el Sistema no será sostenible si “se le exige lo que no puede dar”, por lo que avanzó que el Gobierno tendrá una “especial prudencia” a la hora de vigilar los costes. Así, adelantó que no se incorporarán nuevos costes para el Sistema que no lleven “emparejados” una financiación que los hagan “asumibles”. De esta forma, reiteró que “no habrá concesiones al oportunismo o al aplauso fácil, no habrá gestos que no lleven emparejados una financiación que garantice que el sistema siga siendo viable”.
|