| ||||||||||||||||||||||
A los que somos mayores, a los que vivimos gran parte del pasado siglo, nos sorprendía la presencia de “extranjeros” en nuestra incipiente Costa del Sol. Se trataba especialmente de turistas nórdicos en busca del maravilloso clima de nuestra tierra. Iban y venían.
Posteriormente, y dado el desarrollo de nuestro país, comenzaron a llegar emigrantes en busca de una mejor situación laboral y económica.
No hace falta haber estudiado Derecho para saber que estamos ante un asesinato en el que concurren, entre otras, las circunstancias de alevosía que contempla el artículo 139 del Código Penal. Si el agente tuviera que ser juzgado en España cabría añadirle a la acusación que su delito se vería agravado por haber actuado por motivos discriminatorios: raza, sexo, ideología, minusvalía, etc.
Me indignan las continuas historias de injusticia y crueldad que nos desbordan, el atropello de tantas vidas humanas que son explotadas a diario, los incesantes guiones despreciativos de la gente, la prepotencia de algunos líderes que se sirven de los más desvalidos, la de esos moradores convertidos en auténticos depredadores de las riquezas naturales, los asentamientos israelíes en territorio palestino que son una violación flagrante y que a pesar de haber sido condenados repetidamente por la comunidad internacional continúan activados, o esos países ricos como España, donde muchas gentes viven en la pobreza generalizada...
|