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“El futuro de la pyme española pasa por diversificar productos y mercados” | ||||||
| Entrevista con el gerente de la empresa Hurtado Rivas | ||||||
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En un país acosado por la corrupción, los EREs, la constante quiebra de empresas, los recortes o la utopía de entrar, en condiciones dignas, en el mercado laboral, no deja de ser una buena noticia la historia de una pyme familiar valenciana, ubicada en la localidad de Picassent, que a pesar de los efectos de la crisis tiene entre ceja y ceja la creación de empleo y el crecimiento internacional.
Se trata de Hurtado Rivas, una compañía dedicada a la robótica industrial y a la venta de maquinaria para madera que ha visto cómo su plantilla en 2007 era de 30 trabajadores y en la actualidad ha pasado a ser de 35.
La clave en palabras de su gerente, Carlos Hurtado, ha sido la previsión: “Justo antes de la crisis lanzamos una serie de productos nuevos, diversificamos con la parte de robótica lanzándola al mercado internacional, porque si hubiéramos querido hacerlo ahora el margen de reacción sería nulo”, explicó. Mucho ha llovido desde que en 1945 su bisabuelo y creador de la empresa, Julio Hurtado, vendiera carros de madera en la plaza de San Agustín de Valencia. De la madera se pasó a vender maquinaria industrial y de ahí, sin olvidar el origen maderero, la expansión ha llegado hasta las áreas de la robótica industrial, la automatización de procesos industriales y la visión artificial. Internacionalización El trabajo fuera de nuestras fronteras se extiende por Latinoamérica (desde México, Colombia, Brasil, Perú, Argentina hasta Chile), El Salvador, Guatemala, Arabia Saudí, Emiratos Árabes, Turquía y países africanos como Marruecos, Argelia, Angola y Guinea. El objetivo a corto plazo es claro. “Pese a que el esfuerzo personal es alto, la intención es llegar a unos niveles de exportación que se sitúen en el 80 o 90% en 2016”, señaló Carlos Hurtado durante la visita en la fábrica de Picassent. Procesos automáticos La forma de trabajar comienza a raíz de la necesidad del cliente de automatizar un proceso, “generalmente con la finalidad de ahorrar mano de obra y tratar de que sea una máquina la que manipule los productos”, explicó. A partir de ahí el siguiente paso es poner en marcha un proyecto de ingeniería, es decir, diseñar una máquina o un robot, que más tarde se instala en la empresa.
La estrategia de diversificar ha llevado a esta mediana empresa a la creación de un departamento de ingeniería, actualmente compuesto por ocho trabajadores, el cual pasará a tener a finales de este año 12 empleados, además de los tres que está previsto que se incorporen en 2014. Proyectos inmediatos El futuro inmediato de la empresa pasa especialmente por Rusia, Brasil y Centroamérica. Un ejemplo que ilustra cómo la exportación es la piedra angular del crecimiento de Hurtado Rivas.
Además, en Perú se pondrán en marcha proyectos para la fabricación, envase y etiquetado de detergentes, mientas que en el Caribe se llevará cabo un proyecto para el sistema de llenado de sacos de harina. Proyectos por valor de 10 millones de euros, de los cuales “esperamos confirmar el 50%”, afirma Hurtado. Cifras que pese a todo suponen un coste más elevado para el exterior que para clientes españoles. En concreto la diferencia entre un proyecto internacional y otro nacional es de 100.000 euros. Recetas para salir de la crisis En todo este escenario de progreso económico, Carlos Hurtado advierte que tienen que ser las pymes las que lideren el crecimiento económico del país, un hecho que, a su juicio, tiene que llegar con “exportación, mentalidad proactiva, pero sobre todo polivalencia y flexibilidad de los trabajadores”. “La empresas no pueden tener miedo a salir a otros países porque es un camino para satisfacer a un mercado en constante cambio. En nuestro caso, la internacionalización nos obliga a viajar dos semanas al mes con todo el esfuerzo que esto conlleva”, advirtió. Soluciones y consejos que plasman una forma de concebir la cultura empresarial. |
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