El fondo europeo de rescate (MEdE) y los países de la eurozona han acordado este viernes autorizar el inicio de las negociaciones con Atenas para un tercer programa de rescate de tres años, el mismo día en que los Veintiocho han aceptado también conceder un préstamo urgente de 7.160 millones de euros que permita al Gobierno de Alexis Tsipras cumplir el próximo lunes con los pagos al Banco Central Europeo y al Fondo Monetario Internacional (FMI).
El consejo de gobernadores del MEdE ha aprobado "la decisión de conceder, en principio, un apoyo estable a Grecia en forma de un programa de ayuda", dice el comunicado del fondo europeo, que explica que ello "abre la vía" para que la troika negocie el Memorando de Entendimiento (MoU) que debe detallar las reformas macroeconómicas o la condicionalidad ligados al rescate.
Los líderes de la zona euro acordaron el pasado lunes negociar un tercer rescate con Atenas, a condición de que las autoridades helenas aplicaran reformas inmediatas y a que los siete parlamentos que debían dar su visto bueno (el griego y el de otros seis países del euro) dieran su consentimiento.
El presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, ha confiado en que lo logrado en los últimos días sirva para recuperar "gradualmente" la confianza entre las autoridades helenas y sus socios del euro. "No va a ser fácil, estamos seguros de que encontraremos problemas en los próximos años, pero creo que seremos capaces de resolverlos", ha asegurado.
El ministro de Finanzas de Finlandia, Alexander Stubb, también se ha expresado al poco de anunciarse el acuerdo para negociar la ayuda y, a través de su cuenta de Twitter, ha apuntado que "se pasa página y avanzamos".
Con la aprobación este viernes del parlamento alemán se ha cumplido el último paso de este trámite, lo que ha permitido al MEdE formalizar su autorización.
De acuerdo a las estimaciones realizadas por las instituciones que forman la troika (BCE, FMI y Comisión Europea), las necesidades de Grecia de aquí a 2018 sumarán entre 82.000 y 86.000 millones de euros. Sólo el lunes, 20 de julio, Atenas debe hacer frente a 7.000 millones de euros en vencimientos, incluidos 4.200 millones al BCE, y a mediados de agosto deberá cumplir con pagos por valor de 5.000 millones.
En paralelo a las negociaciones del MoU, el fondo de rescate debe preparar una propuesta para el "contrato" de la ayuda con Grecia, el 'Acuerdo del Mecanismo de Asistencia Financiera' (FFA, por sus siglas en inglés).
Con este paso se eliminan todas las barreras para comenzar las negociaciones de Atenas con las instituciones, pero una vez se finalice el memorando, el consejo de gobernadores del MEdE -que integran los miembros del eurogrupo-- deberán dar "un paso más, que afecta a algunos parlamentos nacionales", para aprobar tanto el MoU como el FFA.
Tras la firma del MoU por la Comisión Europea, de nuevo el fondo de rescate tendrá que decidir sobre el pago del primer tramo de la ayuda.
RÁPIDA NEGOCIACIÓN
Los ministros de Economía y Finanzas de la eurozona han emitido un comunicado para celebrar tanto la aprobación en el parlamento griego del acuerdo de la cumbre del euro y las reformas inmediatas, como el visto bueno del fondo de rescate a empezar las negociaciones del tercer rescate.
"Este acuerdo ofrece una oportunidad para devolver la economía griega a la senda", ha indicado Dijsselbloem.
En su declaración, el Eurogrupo explica que las instituciones tienen ahora la tarea de "negociar rápidamente" el MoU que detalle la condicionalidad ligara al tercer rescate. Fuentes europeas confían en que las negociaciones puedan concluir a mediados del mes de agosto.
Mientras se concreta el tercer rescate, los Veintiocho han acordado conceder una ayuda urgente de 7.160 millones de euros para que Atenas evite el impago al BCE el próximo lunes, cuando tendrá que entregar 4.200 millones de euros a la entidad europea.
Los fondos de este préstamo puente proceden del Mecanismo europeo de estabilidad financiera (EFSM, por sus siglas en inglés), que cuenta con aval con el presupuesto de la UE y fue creado con 60.000 millones de euros. Tras utilizado en los rescates de Portugal e Irlanda restan 13.200 millones de euros disponibles, según cuentas de Bruselas.
Los Estados miembros han dado su visto bueno a esta operación después de que se ofreciera a los países que no forman parte del euro "garantías" suficientes, en caso de que Grecia no devuelva el dinero una vez que reciba fondos del tercer rescate. Dichas garantías procederán de los beneficios obtenidos por el BCE en 2014 de las operaciones con deuda griega (unos 1.850 millones de euros) y volverán a manos de los países del euro si no es necesario utilizarlos como "compensación".
|