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Habla alto y claro en Sálvame Deluxe

Romina descubre la otra cara de Al Bano

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Romina Power, hija de los fallecidos actores Tyrone Power y Linda Christian, apareció la noche del viernes en el programa “Sálvame Deluxe” donde se la esperaba como la gran estrella que es, como un gran personaje que también lo es y como esa madre que durante 17 años ha estado creyendo siempre que su hija mayor, Ylenia, supuestamente desaparecida en 1994 en las aguas del río Mississipi en New Orleans, sigue viva en algún lugar de la tierra.


Romina Power con Al Bano, su hija Cristel y Teresa Berengueras

Jorge Javier Vázquez vistió la chaqueta de esmoquin de las grandes ocasiones y los directores del programa dispusieron tres puntos álgidos en el programa, una zona en la que estaban los colaboradores habituales del programa estrella de los viernes en Telecinco, una mesa de debate con periodistas de toda la vida que iban a comentar lo que dijera Romina, en la misma, que tenía forma semicircular, estaban de izquierda a derecha Antonio Montero,Paloma García Pelayo, en el centro J.J. Vázquez y a su ladoPilar Eyre, Jimmy Jiménez Arnau y una psicóloga y el tercer punto estaba centrado en la periodista Lydia Lozano que tanto ha llorado por haber dicho hace años que, después de una investigación periodística, sabía que la hija de Romina y Al Bano, seguía con vida.

Jorge Javier a lo largo de las tres horas y media que duró la entrevista con Romina, cambió de set a medida que iban pasando los blocs informativos y las declaraciones de Romina. Todo el mundo desde sus puntos opinaba sobre lo que acababa de decir la invitada estrella de la noche.

La entrevista estuvo arropada por otra realizada anteriormente por el equipo del programa hecha en la casa de Malibú donde ahora reside Romina.

Romina siempre con Jorge Javier
Romina siempre habló con Jorge Javier, fue su interlocutor, el que la pinchó, el que le preguntó, siempre al margen de periodistas y colaboradores. Jorge Javier hincó el diente a su personaje al margen de sus invitados, colaboradores y también de Lydia Lozano aunque ésta muy hacia el final del programa se convirtió en un pieza importante más de esa noche en la que no hubo ni estridencias, ni chillidos, sólo una conversación entre el presentador y Romina.

La pérdida de un hijo-hija para unos padres siempre supone un drama, no es de ley, parece que no esté escrito en el libro de la vida que las personas tengamos que pasar por este calvario, lo natural es la pérdida de los padres por parte de los hijos y no al revés, pero si esta hija, como sucede con Ylenia no sólo no se sabe si ha muerto o está desaparecida ya que su cuerpo no ha aparecido, es un drama inconmensurable.

Romina explica sin dramas la verdad de su relación con Al Bano

Muy a pesar de las circunstancias dramáticas que vive Romina explicó claramente su postura ante los hechos, su forma de pensar y en ningún momento montó ningún lloroso dramón al respecto. Romina, conocedora de la escena y del plató, domina correctamente la posición de las cámaras y conoce perfectamente los vericuetos de un show televisivo, habló con simpatía, se mostró serena, y fue muy hábil cuando habló de los tiempos en que su vida con Al Bano eran mas espinas que rosas.

Esta mujer que a los cincuenta y tantos años conserva toda la elegancia y las facciones que nos recuerdan a su padre, Tyrone Power, explicó que se casó enamorada, tuvo momentos de mucho humor al hacer juego de palabras cuando hablando de su matrimonio le dijo a Jorge Javier: ¿Qué no me tenía que haber casado?”, o cuando habló de que se había casado en estado: “No, no, los padres de Al Bano nunca lo supieron, les dije sencillamente que la niña se había adelantado aunque me casé embarazada de cuatro meses”.

Los malos tratos difuminados
A las penas puñaladas supongo que imaginó Romina y quiso librar de una “muerte súbita” a su ex marido cuando reconoció que éste le había dado una patada y algún que otro cachete, obviaba la palabra “malos tratos” al afirmar: “siempre creí que todos los hombres latinos actuaban así” o “hay mujeres en Cellino San Marco (pueblo donde nació Al Bano y vivió Romina con sus hijos) que no pueden salir a abrir la puerta de la casa porque sus maridos no las dejan”

Esto es incomprensible en una mujer de estos tiempos y en los suyos en que a los trece años hacia lo que le daba la real gana, siendo muy independiente también después de haber trabajado en películas que algunos han considerado de alto voltaje.

Siempre con una sonrisa y de buen humor

Romina sorprendió con estas afirmaciones. Una mala sorpresa para el público en general que había visto en la pareja formada por ella y Al Bano a la pareja más feliz del mundo. Al Bano no era dulce, ni pacífico, ni buen marido, todo lo contrario, así lo dijo esa noche en que iba desgranando su vida al lado del cantante. Explicó que con Al Bano no se podía dialogar, le mostró como un hombre sin sentimientos, con maltratos difusos según manifestó y lo redondeó diciendo que Al Bano nunca le pidió perdón por ello. Toda una papeleta pero Romina explicó todos estos avatares, indignos de vivir para cualquier humano, sin echar más leña al fuego, en ningún momento levantó la voz y la sonrisa siempre anidó en sus labios.

Fue terrible cuando dijo que Ylenia un día le había comentado que no la veía feliz: “Escapa, haz tú vida” le dijo más o menos, pero también eso lo dijo con tranquilidad como si el karma de su vida fuera el haber tenido la familia que quería aún a pesar de tener que pasar por tanta desgracia: “Quería una familia, para mi era lo más importante, yo veía feliz a todos ellos, a mi eso me parecía bien a pesar de que yo no lo estuviera ”

Periodistas y colaboradores viven una catarsis

Para los colaboradores habituales del programa y para los periodistas invitados la realidad de Romina era una catarsis, algo duro que expresaban como mayor énfasis que la invitada, es natural, todos ellos están habituados a darle mucho empaque a todo lo que suena a malo, a lo que suena a escándalo, aún a pesar de que Romina no le diera el énfasis de lo terrible se encargaron de marcar la diferencia, ¿qué seria de Sálvame Deluxe sin un escándalo aunque éste sea chiquito?, en esta ocasión era de grandes dimensiones y repercusión internacional, tenían que poner toda la carne en el asador.

Aseguró Romina que cree que su hija está viva, que nunca creyó lo que les explicó la policía de New Orleans: “¿Sabes cuantas chicas al año caen en ese río?, cientos de chicas que nunca aparecen. Y sus padres acuden allí para recoger sus cadáveres. Ylenia amaba la vida, jamás se hubiera suicidado, creo que la raptaron, le pusieron algo en la bebida y está en algún lugar del mundo y si quiere volver no sabe porque le han hecho un lavado de cerebro, quizá, eso lo pienso yo, está detrás de todo ello el Gobierno americano, yo estoy en contacto con ella, tengo sueños en que la veo, la percibo y sé que algún día, quizás, nos volveremos a encontrar”

Las videntes dicen que Ylenia vive

Dijo que ha visitado a muchas videntes y que todas le han dicho que Ylenia sigue viva pero ninguna le ha dicho ni dónde está ni cuándo volverán a verse, lo dijo convencida, además habló de dos organizaciones que están trabajando en este tema y que, desde hacia un año, practicaba el budismo y que estaba mucho más equilibrada y se sentía mejor, que era su mejor arma para superar esta separación y esta espera.

La versión de Al Bano respecto a la desaparición de su hija es totalmente opuesta a la de Romina, él cree que está muerta y quedó convencido de las afirmaciones y los datos que le dio la policía que investigó el caso. Dijo Jimmy Jiménez Arnau, amigo de Al Bano, que el cantante creía que su ex mujer estaba como una “chota”, en fin, dos que se amaron y que sus vidas se truncaron antes de la desaparición de su hija mayor.

Romina no entiende por qué Lydia le pide perdón

Vino el tema de Lydia Lozano, la periodista había afirmado que durante años había deseado encontrarse con Romina sólo para pedirle perdón en el caso de que ella se sintiera ofendida por algo que Lydia hubiera dicho en sus informaciones referentes a la desaparición de Ylenia. Lydia esperaba su turno, lo esperaba alejada de todos los colaboradores y periodistas, Jorge Javier le preguntó a Romina si conocía a Lydia y ella dijo que no sabía quién era, también le preguntó si quería hablar con ella y dijo que no tenía inconveniente, en la pantalla partida Lydia aparecía angustiada y apenas podía hablar, le dijo : “quiero pedirte perdón”, Romina le preguntó por qué, Lydia se explicó a medias, Romina no entendía las medias tintas de Lydia, ni tampoco lo que le decía Jorge Javier, parecía una conversación en la que cada uno iba por su lado.

La conversación incógnita de Romina con Lydia

En realidad nadie podía decir nada de nada pues Lydia hace años le prometió a Al Bano no hablar del tema con nadie ya que de lo contrario el cantante le pondría una demanda de dimensiones inconmensurables. Lydia ha hecho lo que prometió pero ante esta poca claridad Romina no podía comprenderla, Romina intuyó que el tema era duro y le dijo: “Hablamos al finalizar del programa” y quedó el tema en qué por qué Romina tenía que perdonar a Lydia si ella primero no conocía a Lydia y no sabía las causas del perdón que se le solicitaba, por lo tanto no hacia falta perdón.

La crueldad de “Sálvame Deluxe”

Sin embargo lo sencillo no es fácil en “Sálvame Deluxe” y a mi manera de entender y para clavarle la puntilla a Lydia y dejar que el “pavo real “ de Matamoros tuviera también aquella noche su minuto de gloria se anunció que Romina pedía hablar con él antes de que lo hiciera Lydia, lo disfrazaron bonito, y perdonen, pero yo no me lo creo, el “león que más ruge” en el plató de “Sálvame”salió del plató para conversar en privado con Romina. Ya habían llegado de su set los colaboradores habituales y los periodistas invitados seguían en su mesa de media luna, todos hablaban de la entrevista, Kiko Hernández se enfadó con J.J. porque no le daba turno, al poco rato regresó Kiko para explicar su conversación con la invitada de la noche, enfrente tenía a una Lydia Lozano seria, sin ningún rictus, impávida, Kiko explicó que Romina le había querido agradecer que por la tarde dijera de ella que como madre era normal lo que estaba haciendo, así como también el sentido familiar con el que había tratado el tema.

Dijeron que Romina esa tarde había visto “Sálvame”, estoy convencida que tan sólo lo vio a trozos porque precisamente Kiko Matamoros esa tarde se había despachado precisamente a favor de Al Bano y en contra de Romina, por lo tanto Romina sólo decidió tener en cuenta el trozo en el que hablaba bien de ella.

Romina dijo al principio de la entrevista que en su vida siempre había recordado las cosas buenas y que nunca recordaba las malas, por lo tanto con Kiko hizo lo mismo, le felicitó por lo bueno obviando lo malo.

A mi esta visita al camerino me pareció una crueldad para con Lydia, creo sinceramente que quién tenía pleno derecho a ir a ese camerino para después poder contarlo era ella y no Kiko Matamoros que para Lydia en ese tema de Ylenia, ha sido día si y otro también el dedo acusador, por la tarde de ese mismo día había amenazado con contar en directo las fuentes que había utilizado Lydia para dar las informaciones sobre Ylenia, un dedo acusador que siempre hurga en la llaga, inhumano, muy inhumano, pero eso es lo que funciona, azuzar, meter el dedo en el ojo ajeno para ver hasta donde resiste el otro, la cuestión allí está en enfrentar a unos con otros.

Una escalofriante vida sin dramas, otra forma de hacer tele

De todas formas creo que en “Sálvame Deluxe” de este viernes se habrán dado cuenta que cuando tienen invitados de altura, con carisma y que son capaces de explicar sus azarosas vidas hablando, dialogando, sin berridos estridentes la audiencia también les responde, incluso mejor que cuando los gritos se apropian del plató. Romina explicó una vida insatisfecha, sin faltar con sus palabras, usó el sujeto, verbo y predicado y además usó su humor innato, una gran clase de saber estar, aunque la vida sea un calvario no es menester caer en el pozo del estiércol. Felicidades, esa noche fuisteis los primeros, con un share alto y una audiencia que se quedó con la boca abierta al ser un programa tan elegante a pesar de lo mucho que se explicaba. Jorge Javier supo conducir la entrevista con clase, elegancia y profesionalidad.

Cuando Romina y Al Bano se amaban

Tengo la suerte de poder explicar la parte buena de la pareja, por mi trabajo, entonces redactora del desaparecido diario EL CORREO CATALÁN, conocí a Romina y Al Bano en el año 1976, habían llegado a Barcelona para promocionar un disco con una de sus canciones que habían estrenado en el festival de San Remo, con ellos iba Ylenia que era una niña muy pequeña y Yari, el único varón de la pareja, formaban un equipo espléndido, comimos en la Barceloneta y les hice una entrevista que estuvo arropada todo el rato por carantoñas entre los dos, Romina estaba pendiente de los dos niños que ya andaban y con ellos no viajaba nadie más, sí nos acompañaba la persona que se encargaba de la publicidad del nuevo disco.

Romina, fascinante siempre de hippie

Me fascinaron los dos, Romina era guapísima y vestía muy hippie pero de lujo, Al Bano era directo y entre los dos se gastaban bromas, las fotos las hicimos cerca del mar, allí mismo, en esos momentos los niños, a los medios de comunicación, les importaban poco y menos para un diario, posaron como si fueran grandes actores y el fotógrafo, de vuelta a la redacción, me dijo que había quedado fascinado del buen material que había podido obtener.

Después de ese primer día vinieron muchos más, en la Costa Brava, sus giras por ella eran muy apreciadas, vivían en el mejor hotel que entonces había en ese pedazo de litoral, “La Gavina de S’Agaró”, Romina entonces era una mujer que era preciso tratar en las distancias cortas, le gustaba hablar de libros, de poesía, de amor, de la naturaleza, de cómo educaba a sus hijos, de su diario, a mi me fascinaba como vestía, tenía mucha personalidad y además me gustaban los vestidos que lucía a los que nunca tuve acceso pues eran caros, muy caros, y muchos de ellos se los compraba en viajes. Romina y Al Bano iban de gira constantemente y la gente admiraba el chorro de voz de Al Bano y la prestancia de Romina.

Gustaba ver a Romina y escuchar a Al Bano

Muchos empresarios me llegaron a explicar: “Somos conscientes de que la pareja es única y la gente los quiere juntos, a todo el mundo le gusta como canta Al Bano pero también a todo el mundo le gusta ver los movimientos de Romina en el escenario, aprecian su belleza, es dulce y en sus actuaciones se muestran su amor sin reservas”.

En los ratos libres Romina hacia punto algo que agradaba a cualquier mujer que hubiese decidido ser independiente, cuando les conocí todos éramos muy jóvenes, el mayor era Al Bano pero aún así en aquellos momentos no tenía ni treinta y cinco años.

Amigos en Catalunya y sus juegos de amor

Conocía a sus amigos de verdad, a los Suqué, dueños del Castillo de Perelada, donde cada año actuaba la pareja, a la familia deJosep María Cullell, dirigente político de la era Pujol. Siempre que venían a Barcelona me llamaban, y a veces les esperaba en el Aeropuerto, ya fuera para trabajar con ellos, generalmente era eso, o bien para tomar algo juntos. Cuando estrenaron en 1981 la canción Sharazan hicimos un reportaje en la playa de Castelldefels, ellos iban cada uno en un corcel blanco, Romina solía peinar su melena larga hasta el coxis con raya al medio, una melena negra y lacia, muchas veces se adornaba con sombreros o fulares que ceñía en la frente, sus vestidos, una mayoría de veces dejaban al aire sus bien formados hombros, faldas largas y chalecos largos peludos en invierno, un estilo con mucha personalidad. Con Al Bano jugaban en la playa, se gastaban bromas y el que llevaba la voz cantante de las decisiones era él, cosa que a Romina ya le parecía bien.

Romina, leía, escribía, hacia punto, descubría zonas, casas, hoteles, puntos de la geografía, le gustaba conocer todo lo que vivía en sus viajes profesionales, sabía aprovechar el tiempo que tenía, divertida y buena conversadora, le daba mucha importancia a la llamada del interior, era una mujer que hablaba de presentimientos, de amores, de la vida y de las malas relaciones de su madre con Al Bano. A sus hijos Ylenia y Yari les vi en dos ocasiones, cuando su agenda se intensificó los niños se quedaban en Italia.

Vivir mucho en su felicidad
Pude observar los avances que hicieron en poco tiempo para pasar del italiano al castellano con rapidez, más Romina, que creo que ya conocía el idioma, que Al Bano, y viví las presentaciones de sus grandes éxitos como Felicitá, Ci Sará, Canzone Blu, Sempre Sempre, Che Angelo, Aria Pura y muchísimas más que fueron grandes éxitos, cantaban y convencían sobre el escenario, bailando y mostrando en cada instante su amor, incluso en algunos momentos hubo personas que me comentaron que se veían demasiado “enganchados” y que su amor incondicional era demasiado dulce, lo que veía me pareció auténtico, pasé días con ellos, muchas promociones, viajes y en algunos momentos de haber habido problemas era difícil esconderlos por muy buenos actores que fueran.

Llegan Cristel y Romina junior
Llegaron a Barcelona en otra de sus muchas visitas y me avisaron que tenían una buena sorpresa para darme, me citaron en el Hotel Princesa Sofía, con ellos viajaba un hermoso bebé llamado Cristel, una niña hermosa, con los ojos vivos y el escaso cabello rubio intenso, en aquellos años la gente no acostumbraba a hacerse fotos con los personajes, nunca he sido mitómana, mi trabajo forma parte de mi vida, nada más, pero ese día alguien tomó una imagen con la pareja y aquel sonriente bebé. Al poco tiempo Romina me dijo que estaba esperando de nuevo otro bebé, nos reímos mucho las dos pues para ellos era como algo que no esperaban y que la vida les había dado: “Estamos muy contentos”, también me aseguraron que los mayores ya querían ver la cara de ese nuevo miembro de la familia que había pasado a ser múltiple, Romina me dijo: “A lo mejor ahora, por ser tantos, en Italia nos dan un premio” reía, estaba perfecta, Al Bano exultante: “Ahora tendremos que trabajar más para mantener a tantos” aseguraba.

Prima notte d’amore
Todo divertido, buen rollo. La última vez que les vi y estuve con ellos fue a finales de los ochenta, yo había cambiado de trabajo y ya no me dedicaba a hacer entrevistas a nadie, por lo tanto no había lugar a seguir viéndolos, además las giras les hacían desaparecer por mucho tiempo. De su repertorio había una canción que me gustaba mucho, un día recibí en casa una casette con una nota de ellos, era la canción “Prima notte d’amore”, y para dejar este tema con buen sabor de boca os dejo un trozo de la canción, es dulce, romántica y la cantaban a dúo, Romina decía: “Nuestra primera noche, un balcón bajo el cielo las estrellas y tú…..piano, piano, amore mío, el silencio es amor…..” Al Bano en algún otro trozo decía: “…..tu mirada inocente….el silencio es amor, piano, piano amore miooooooooooo”

Romina descubre la otra cara de Al Bano

Habla alto y claro en Sálvame Deluxe
Teresa Berengueras
domingo, 6 de noviembre de 2011, 10:46 h (CET)
Romina Power, hija de los fallecidos actores Tyrone Power y Linda Christian, apareció la noche del viernes en el programa “Sálvame Deluxe” donde se la esperaba como la gran estrella que es, como un gran personaje que también lo es y como esa madre que durante 17 años ha estado creyendo siempre que su hija mayor, Ylenia, supuestamente desaparecida en 1994 en las aguas del río Mississipi en New Orleans, sigue viva en algún lugar de la tierra.


Romina Power con Al Bano, su hija Cristel y Teresa Berengueras

Jorge Javier Vázquez vistió la chaqueta de esmoquin de las grandes ocasiones y los directores del programa dispusieron tres puntos álgidos en el programa, una zona en la que estaban los colaboradores habituales del programa estrella de los viernes en Telecinco, una mesa de debate con periodistas de toda la vida que iban a comentar lo que dijera Romina, en la misma, que tenía forma semicircular, estaban de izquierda a derecha Antonio Montero,Paloma García Pelayo, en el centro J.J. Vázquez y a su ladoPilar Eyre, Jimmy Jiménez Arnau y una psicóloga y el tercer punto estaba centrado en la periodista Lydia Lozano que tanto ha llorado por haber dicho hace años que, después de una investigación periodística, sabía que la hija de Romina y Al Bano, seguía con vida.

Jorge Javier a lo largo de las tres horas y media que duró la entrevista con Romina, cambió de set a medida que iban pasando los blocs informativos y las declaraciones de Romina. Todo el mundo desde sus puntos opinaba sobre lo que acababa de decir la invitada estrella de la noche.

La entrevista estuvo arropada por otra realizada anteriormente por el equipo del programa hecha en la casa de Malibú donde ahora reside Romina.

Romina siempre con Jorge Javier
Romina siempre habló con Jorge Javier, fue su interlocutor, el que la pinchó, el que le preguntó, siempre al margen de periodistas y colaboradores. Jorge Javier hincó el diente a su personaje al margen de sus invitados, colaboradores y también de Lydia Lozano aunque ésta muy hacia el final del programa se convirtió en un pieza importante más de esa noche en la que no hubo ni estridencias, ni chillidos, sólo una conversación entre el presentador y Romina.

La pérdida de un hijo-hija para unos padres siempre supone un drama, no es de ley, parece que no esté escrito en el libro de la vida que las personas tengamos que pasar por este calvario, lo natural es la pérdida de los padres por parte de los hijos y no al revés, pero si esta hija, como sucede con Ylenia no sólo no se sabe si ha muerto o está desaparecida ya que su cuerpo no ha aparecido, es un drama inconmensurable.

Romina explica sin dramas la verdad de su relación con Al Bano

Muy a pesar de las circunstancias dramáticas que vive Romina explicó claramente su postura ante los hechos, su forma de pensar y en ningún momento montó ningún lloroso dramón al respecto. Romina, conocedora de la escena y del plató, domina correctamente la posición de las cámaras y conoce perfectamente los vericuetos de un show televisivo, habló con simpatía, se mostró serena, y fue muy hábil cuando habló de los tiempos en que su vida con Al Bano eran mas espinas que rosas.

Esta mujer que a los cincuenta y tantos años conserva toda la elegancia y las facciones que nos recuerdan a su padre, Tyrone Power, explicó que se casó enamorada, tuvo momentos de mucho humor al hacer juego de palabras cuando hablando de su matrimonio le dijo a Jorge Javier: ¿Qué no me tenía que haber casado?”, o cuando habló de que se había casado en estado: “No, no, los padres de Al Bano nunca lo supieron, les dije sencillamente que la niña se había adelantado aunque me casé embarazada de cuatro meses”.

Los malos tratos difuminados
A las penas puñaladas supongo que imaginó Romina y quiso librar de una “muerte súbita” a su ex marido cuando reconoció que éste le había dado una patada y algún que otro cachete, obviaba la palabra “malos tratos” al afirmar: “siempre creí que todos los hombres latinos actuaban así” o “hay mujeres en Cellino San Marco (pueblo donde nació Al Bano y vivió Romina con sus hijos) que no pueden salir a abrir la puerta de la casa porque sus maridos no las dejan”

Esto es incomprensible en una mujer de estos tiempos y en los suyos en que a los trece años hacia lo que le daba la real gana, siendo muy independiente también después de haber trabajado en películas que algunos han considerado de alto voltaje.

Siempre con una sonrisa y de buen humor

Romina sorprendió con estas afirmaciones. Una mala sorpresa para el público en general que había visto en la pareja formada por ella y Al Bano a la pareja más feliz del mundo. Al Bano no era dulce, ni pacífico, ni buen marido, todo lo contrario, así lo dijo esa noche en que iba desgranando su vida al lado del cantante. Explicó que con Al Bano no se podía dialogar, le mostró como un hombre sin sentimientos, con maltratos difusos según manifestó y lo redondeó diciendo que Al Bano nunca le pidió perdón por ello. Toda una papeleta pero Romina explicó todos estos avatares, indignos de vivir para cualquier humano, sin echar más leña al fuego, en ningún momento levantó la voz y la sonrisa siempre anidó en sus labios.

Fue terrible cuando dijo que Ylenia un día le había comentado que no la veía feliz: “Escapa, haz tú vida” le dijo más o menos, pero también eso lo dijo con tranquilidad como si el karma de su vida fuera el haber tenido la familia que quería aún a pesar de tener que pasar por tanta desgracia: “Quería una familia, para mi era lo más importante, yo veía feliz a todos ellos, a mi eso me parecía bien a pesar de que yo no lo estuviera ”

Periodistas y colaboradores viven una catarsis

Para los colaboradores habituales del programa y para los periodistas invitados la realidad de Romina era una catarsis, algo duro que expresaban como mayor énfasis que la invitada, es natural, todos ellos están habituados a darle mucho empaque a todo lo que suena a malo, a lo que suena a escándalo, aún a pesar de que Romina no le diera el énfasis de lo terrible se encargaron de marcar la diferencia, ¿qué seria de Sálvame Deluxe sin un escándalo aunque éste sea chiquito?, en esta ocasión era de grandes dimensiones y repercusión internacional, tenían que poner toda la carne en el asador.

Aseguró Romina que cree que su hija está viva, que nunca creyó lo que les explicó la policía de New Orleans: “¿Sabes cuantas chicas al año caen en ese río?, cientos de chicas que nunca aparecen. Y sus padres acuden allí para recoger sus cadáveres. Ylenia amaba la vida, jamás se hubiera suicidado, creo que la raptaron, le pusieron algo en la bebida y está en algún lugar del mundo y si quiere volver no sabe porque le han hecho un lavado de cerebro, quizá, eso lo pienso yo, está detrás de todo ello el Gobierno americano, yo estoy en contacto con ella, tengo sueños en que la veo, la percibo y sé que algún día, quizás, nos volveremos a encontrar”

Las videntes dicen que Ylenia vive

Dijo que ha visitado a muchas videntes y que todas le han dicho que Ylenia sigue viva pero ninguna le ha dicho ni dónde está ni cuándo volverán a verse, lo dijo convencida, además habló de dos organizaciones que están trabajando en este tema y que, desde hacia un año, practicaba el budismo y que estaba mucho más equilibrada y se sentía mejor, que era su mejor arma para superar esta separación y esta espera.

La versión de Al Bano respecto a la desaparición de su hija es totalmente opuesta a la de Romina, él cree que está muerta y quedó convencido de las afirmaciones y los datos que le dio la policía que investigó el caso. Dijo Jimmy Jiménez Arnau, amigo de Al Bano, que el cantante creía que su ex mujer estaba como una “chota”, en fin, dos que se amaron y que sus vidas se truncaron antes de la desaparición de su hija mayor.

Romina no entiende por qué Lydia le pide perdón

Vino el tema de Lydia Lozano, la periodista había afirmado que durante años había deseado encontrarse con Romina sólo para pedirle perdón en el caso de que ella se sintiera ofendida por algo que Lydia hubiera dicho en sus informaciones referentes a la desaparición de Ylenia. Lydia esperaba su turno, lo esperaba alejada de todos los colaboradores y periodistas, Jorge Javier le preguntó a Romina si conocía a Lydia y ella dijo que no sabía quién era, también le preguntó si quería hablar con ella y dijo que no tenía inconveniente, en la pantalla partida Lydia aparecía angustiada y apenas podía hablar, le dijo : “quiero pedirte perdón”, Romina le preguntó por qué, Lydia se explicó a medias, Romina no entendía las medias tintas de Lydia, ni tampoco lo que le decía Jorge Javier, parecía una conversación en la que cada uno iba por su lado.

La conversación incógnita de Romina con Lydia

En realidad nadie podía decir nada de nada pues Lydia hace años le prometió a Al Bano no hablar del tema con nadie ya que de lo contrario el cantante le pondría una demanda de dimensiones inconmensurables. Lydia ha hecho lo que prometió pero ante esta poca claridad Romina no podía comprenderla, Romina intuyó que el tema era duro y le dijo: “Hablamos al finalizar del programa” y quedó el tema en qué por qué Romina tenía que perdonar a Lydia si ella primero no conocía a Lydia y no sabía las causas del perdón que se le solicitaba, por lo tanto no hacia falta perdón.

La crueldad de “Sálvame Deluxe”

Sin embargo lo sencillo no es fácil en “Sálvame Deluxe” y a mi manera de entender y para clavarle la puntilla a Lydia y dejar que el “pavo real “ de Matamoros tuviera también aquella noche su minuto de gloria se anunció que Romina pedía hablar con él antes de que lo hiciera Lydia, lo disfrazaron bonito, y perdonen, pero yo no me lo creo, el “león que más ruge” en el plató de “Sálvame”salió del plató para conversar en privado con Romina. Ya habían llegado de su set los colaboradores habituales y los periodistas invitados seguían en su mesa de media luna, todos hablaban de la entrevista, Kiko Hernández se enfadó con J.J. porque no le daba turno, al poco rato regresó Kiko para explicar su conversación con la invitada de la noche, enfrente tenía a una Lydia Lozano seria, sin ningún rictus, impávida, Kiko explicó que Romina le había querido agradecer que por la tarde dijera de ella que como madre era normal lo que estaba haciendo, así como también el sentido familiar con el que había tratado el tema.

Dijeron que Romina esa tarde había visto “Sálvame”, estoy convencida que tan sólo lo vio a trozos porque precisamente Kiko Matamoros esa tarde se había despachado precisamente a favor de Al Bano y en contra de Romina, por lo tanto Romina sólo decidió tener en cuenta el trozo en el que hablaba bien de ella.

Romina dijo al principio de la entrevista que en su vida siempre había recordado las cosas buenas y que nunca recordaba las malas, por lo tanto con Kiko hizo lo mismo, le felicitó por lo bueno obviando lo malo.

A mi esta visita al camerino me pareció una crueldad para con Lydia, creo sinceramente que quién tenía pleno derecho a ir a ese camerino para después poder contarlo era ella y no Kiko Matamoros que para Lydia en ese tema de Ylenia, ha sido día si y otro también el dedo acusador, por la tarde de ese mismo día había amenazado con contar en directo las fuentes que había utilizado Lydia para dar las informaciones sobre Ylenia, un dedo acusador que siempre hurga en la llaga, inhumano, muy inhumano, pero eso es lo que funciona, azuzar, meter el dedo en el ojo ajeno para ver hasta donde resiste el otro, la cuestión allí está en enfrentar a unos con otros.

Una escalofriante vida sin dramas, otra forma de hacer tele

De todas formas creo que en “Sálvame Deluxe” de este viernes se habrán dado cuenta que cuando tienen invitados de altura, con carisma y que son capaces de explicar sus azarosas vidas hablando, dialogando, sin berridos estridentes la audiencia también les responde, incluso mejor que cuando los gritos se apropian del plató. Romina explicó una vida insatisfecha, sin faltar con sus palabras, usó el sujeto, verbo y predicado y además usó su humor innato, una gran clase de saber estar, aunque la vida sea un calvario no es menester caer en el pozo del estiércol. Felicidades, esa noche fuisteis los primeros, con un share alto y una audiencia que se quedó con la boca abierta al ser un programa tan elegante a pesar de lo mucho que se explicaba. Jorge Javier supo conducir la entrevista con clase, elegancia y profesionalidad.

Cuando Romina y Al Bano se amaban

Tengo la suerte de poder explicar la parte buena de la pareja, por mi trabajo, entonces redactora del desaparecido diario EL CORREO CATALÁN, conocí a Romina y Al Bano en el año 1976, habían llegado a Barcelona para promocionar un disco con una de sus canciones que habían estrenado en el festival de San Remo, con ellos iba Ylenia que era una niña muy pequeña y Yari, el único varón de la pareja, formaban un equipo espléndido, comimos en la Barceloneta y les hice una entrevista que estuvo arropada todo el rato por carantoñas entre los dos, Romina estaba pendiente de los dos niños que ya andaban y con ellos no viajaba nadie más, sí nos acompañaba la persona que se encargaba de la publicidad del nuevo disco.

Romina, fascinante siempre de hippie

Me fascinaron los dos, Romina era guapísima y vestía muy hippie pero de lujo, Al Bano era directo y entre los dos se gastaban bromas, las fotos las hicimos cerca del mar, allí mismo, en esos momentos los niños, a los medios de comunicación, les importaban poco y menos para un diario, posaron como si fueran grandes actores y el fotógrafo, de vuelta a la redacción, me dijo que había quedado fascinado del buen material que había podido obtener.

Después de ese primer día vinieron muchos más, en la Costa Brava, sus giras por ella eran muy apreciadas, vivían en el mejor hotel que entonces había en ese pedazo de litoral, “La Gavina de S’Agaró”, Romina entonces era una mujer que era preciso tratar en las distancias cortas, le gustaba hablar de libros, de poesía, de amor, de la naturaleza, de cómo educaba a sus hijos, de su diario, a mi me fascinaba como vestía, tenía mucha personalidad y además me gustaban los vestidos que lucía a los que nunca tuve acceso pues eran caros, muy caros, y muchos de ellos se los compraba en viajes. Romina y Al Bano iban de gira constantemente y la gente admiraba el chorro de voz de Al Bano y la prestancia de Romina.

Gustaba ver a Romina y escuchar a Al Bano

Muchos empresarios me llegaron a explicar: “Somos conscientes de que la pareja es única y la gente los quiere juntos, a todo el mundo le gusta como canta Al Bano pero también a todo el mundo le gusta ver los movimientos de Romina en el escenario, aprecian su belleza, es dulce y en sus actuaciones se muestran su amor sin reservas”.

En los ratos libres Romina hacia punto algo que agradaba a cualquier mujer que hubiese decidido ser independiente, cuando les conocí todos éramos muy jóvenes, el mayor era Al Bano pero aún así en aquellos momentos no tenía ni treinta y cinco años.

Amigos en Catalunya y sus juegos de amor

Conocía a sus amigos de verdad, a los Suqué, dueños del Castillo de Perelada, donde cada año actuaba la pareja, a la familia deJosep María Cullell, dirigente político de la era Pujol. Siempre que venían a Barcelona me llamaban, y a veces les esperaba en el Aeropuerto, ya fuera para trabajar con ellos, generalmente era eso, o bien para tomar algo juntos. Cuando estrenaron en 1981 la canción Sharazan hicimos un reportaje en la playa de Castelldefels, ellos iban cada uno en un corcel blanco, Romina solía peinar su melena larga hasta el coxis con raya al medio, una melena negra y lacia, muchas veces se adornaba con sombreros o fulares que ceñía en la frente, sus vestidos, una mayoría de veces dejaban al aire sus bien formados hombros, faldas largas y chalecos largos peludos en invierno, un estilo con mucha personalidad. Con Al Bano jugaban en la playa, se gastaban bromas y el que llevaba la voz cantante de las decisiones era él, cosa que a Romina ya le parecía bien.

Romina, leía, escribía, hacia punto, descubría zonas, casas, hoteles, puntos de la geografía, le gustaba conocer todo lo que vivía en sus viajes profesionales, sabía aprovechar el tiempo que tenía, divertida y buena conversadora, le daba mucha importancia a la llamada del interior, era una mujer que hablaba de presentimientos, de amores, de la vida y de las malas relaciones de su madre con Al Bano. A sus hijos Ylenia y Yari les vi en dos ocasiones, cuando su agenda se intensificó los niños se quedaban en Italia.

Vivir mucho en su felicidad
Pude observar los avances que hicieron en poco tiempo para pasar del italiano al castellano con rapidez, más Romina, que creo que ya conocía el idioma, que Al Bano, y viví las presentaciones de sus grandes éxitos como Felicitá, Ci Sará, Canzone Blu, Sempre Sempre, Che Angelo, Aria Pura y muchísimas más que fueron grandes éxitos, cantaban y convencían sobre el escenario, bailando y mostrando en cada instante su amor, incluso en algunos momentos hubo personas que me comentaron que se veían demasiado “enganchados” y que su amor incondicional era demasiado dulce, lo que veía me pareció auténtico, pasé días con ellos, muchas promociones, viajes y en algunos momentos de haber habido problemas era difícil esconderlos por muy buenos actores que fueran.

Llegan Cristel y Romina junior
Llegaron a Barcelona en otra de sus muchas visitas y me avisaron que tenían una buena sorpresa para darme, me citaron en el Hotel Princesa Sofía, con ellos viajaba un hermoso bebé llamado Cristel, una niña hermosa, con los ojos vivos y el escaso cabello rubio intenso, en aquellos años la gente no acostumbraba a hacerse fotos con los personajes, nunca he sido mitómana, mi trabajo forma parte de mi vida, nada más, pero ese día alguien tomó una imagen con la pareja y aquel sonriente bebé. Al poco tiempo Romina me dijo que estaba esperando de nuevo otro bebé, nos reímos mucho las dos pues para ellos era como algo que no esperaban y que la vida les había dado: “Estamos muy contentos”, también me aseguraron que los mayores ya querían ver la cara de ese nuevo miembro de la familia que había pasado a ser múltiple, Romina me dijo: “A lo mejor ahora, por ser tantos, en Italia nos dan un premio” reía, estaba perfecta, Al Bano exultante: “Ahora tendremos que trabajar más para mantener a tantos” aseguraba.

Prima notte d’amore
Todo divertido, buen rollo. La última vez que les vi y estuve con ellos fue a finales de los ochenta, yo había cambiado de trabajo y ya no me dedicaba a hacer entrevistas a nadie, por lo tanto no había lugar a seguir viéndolos, además las giras les hacían desaparecer por mucho tiempo. De su repertorio había una canción que me gustaba mucho, un día recibí en casa una casette con una nota de ellos, era la canción “Prima notte d’amore”, y para dejar este tema con buen sabor de boca os dejo un trozo de la canción, es dulce, romántica y la cantaban a dúo, Romina decía: “Nuestra primera noche, un balcón bajo el cielo las estrellas y tú…..piano, piano, amore mío, el silencio es amor…..” Al Bano en algún otro trozo decía: “…..tu mirada inocente….el silencio es amor, piano, piano amore miooooooooooo”

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