El expresidente surcoreano Moon Jae In tilda de "injusta" la imputación por corrupción

Acusa a la Fiscalía de "buscar y perseguir" el caso en su contra
El expresidente de Corea del Sur Moon Jae In ha tildado este viernes de "injusta" su imputación por corrupción en relación con el nombramiento del que fuera su yerno como director ejecutivo de la aerolínea Thai Eastar Jet en 2018.

Moon, que estuvo al frente de la Presidencia del país asiático entre los años 2017 y 2022, ha acusado a la Fiscalía de "buscar y perseguir" el caso en su contra. "Se trata de un claro ejemplo de abuso de poder", ha dicho.

Así se ha pronunciado durante un encuentro con el presidente de la Asamblea Nacional, Woo Won Sik, un día después de que la Fiscalía presentar años cargos por haber recibido presuntamente sobornos, según informaciones de la agencia surcoreana de noticias Yonhap.

"La imputación en sí misma es injusta y da la sensación de que los fiscales están dirigiendo el caso hacia algo predeterminado", ha puntualizado, al tiempo que ha alertado de que estos cargos han llegado "de forma abrupta". "Estoy verificando estos datos con las autoridades", ha añadido.

En este sentido, ha lamentado que la Fiscalía se haya "politizado". "Es un claro ejemplo de como este poder está siendo utilizado", ha sostenido.

Moon ha sido imputado varios días después de ser citado para declarar en el marco de la investigación sobre las circunstancias que rodearon al nombramiento de su exyerno, Seo, como director ejecutivo de la aerolínea en 2018.

Seo fue nombrado después de que el fundador de la compañía fuera designado como presidente de la junta directiva de la empresa Ssangyong Heavy Industries. La Fiscalía sospecha que el nombramiento de este último se realizó a cambio de la contratación de Seo, debido a su falta de experiencia en el sector aéreo, puesto que previamente había trabajado en una empresa de videojuegos.

Además, la Fiscalía está investigando los 223 millones de wones (unos 140.160 euros) que recibió de Thai Eastar Jet, incluyendo su salario y gastos de mudanza, los cuales podrían haber constituido un soborno, puesto que el expresidente suspendió su apoyo financiero a su hija después de que Seo fuera contratado.