Las lesiones y los jugadores "tocados" están siendo la tónica habitual del equipo de Paco Olmos. Con estas características, y a pesar de tener al NBA, Tiago Splitter, el equipo valenciano está teniendo graves problemas para jugar y ganar sus partidos, y como muestra, el último como locales contra el equipo catalán de Manresa

El Valencia Basket persiguió su sueño hasta última hora, y en el último cuarto fueron capaces de rozar la victoria con las puntas de los dedos, con una diferencia que habían logrado acortar de 16 a tan sólo 1 punto.

El Barça llega a la fonteta en un momento de baja forma física de los locales, ya que los jugadores valencianos por el desgaste de los partidos jugados, y la intensidad les ha pasado factura. Por otra parte, los jugadores de Olmos llegan con unas buenos números, ya que de las 6 jornadas, han perdido 2 y ganado los 4 últimos.