| ||||||||||||||||||||||
Nos encontramos en la portería. Yo salía a comprar pan y ella iba a buscar cobertura. Nos saludamos con la mascarilla y los dos metros de distancia reglamentarios. Horas más tarde gritaba y reía al mismo tiempo como si estuviera en mi habitación. Al principio me asusté, pero cuando escuché su conversación telefónica y al poco después un 'Viva España' y a continuación la cadena del baño entendi que se encontraba bien.
|