Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Los trabajos y los días

Dramatizaciones

Y al cabo de ciento diecisiete años, seguimos casi igual, o incluso peor
Francisco Morales Lomas
viernes, 18 de julio de 2014, 05:17 h (CET)
Dar forma y condiciones dramáticas o exagerar con apariencias afectadas es el juego del gato y el ratón en el que les gusta entrar a Mas y Rajoy. Sobre su encuentro o entrevista, todo son habladurías y suposiciones. Hasta la misma vicepresidenta entra en liza y dice que Mas no ha solicitado entrevista alguna.

Lo evidente es el desencuentro. Está claro que el mayor sordo es el que no quiere oír. Y ambos se han puesto unas orejeras colosales, no sé si en razón a sus atributos, que son muchos.

El último capítulo del independentismo catalán y el enrocamiento del nacionalismo español suenan a juego de tronos y espasmos veraniegos según la canícula, mientras los empresarios catalanes apuestan decididamente por una tercera vía, que, en realidad, es un paso antes de hasta luego Lucas.

¿Hasta dónde quiere llegar Rajoy? ¿Hasta dónde quiere llegar Artur Mas? Está claro que Mas hasta donde le diga Oriol Junqueras. Y Rajoy a ningún sitio. Nihil novum sub sole. No hay nada nuevo bajo este sol que nos alumbra después de años de desencuentros. Gay de Montellà, el jefe de la patronal catalana, ha recordado que su bisabuelo Ferrer-Vidal fue uno de los encargados de llevar a la reina regente María Cristina la petición del concierto económico para Cataluña en 1897.

Y al cabo de ciento diecisiete años, seguimos casi igual, o incluso peor: él está pidiendo que se reconozca a Cataluña como una nación con plenas competencias en lengua y cultura, que Cataluña gestione y recaude los tributos mediante su Agencia Tributaria propia y plena capacidad para la organización local. Un paso desde luego en la línea de una ruptura progresiva con el estado español y la consolidación de facto del estado catalán que ya en su día declaró Companys.


Lo evidente a estas alturas es que en Cataluña existen tantos defensores de la independencia como de su mantenimiento en España con toda la autonomía posible. Pero se evidencia que la calle ha sido ganada por los independistas y el resto de los ciudadanos están a la defensiva.

Tarde han surgido colectivos ciudadanos como Societat Civil Catalana o la Asociación Libres e Iguales, encabezada por Vargas Llosa, Albert Boadella, Jon Juaristi o Arcadi España, que alzan su voz contra la independencia. Y otros, como la plataforma que propone una solución federal, con intelectuales como Nicolás Sartorius, Ángel Gabilondo, Baltasar Garzón, José Luis Cuerda…

Un capítulo más en esta larga historia sobre la que se propone un continuo diálogo. Algo bueno siempre. El día que este se rompa habremos pasado el Rubicón.

Noticias relacionadas

En el argot madrileño hay una palabra para designar a aquellos que hacen el “primo”, y el “panoli”; pues bien, no quisiera que por un exceso de caballerosidad, de fairplay o de condescendencia con el adversario político, el PP de Núñez Feijóo deje contar las atrocidades que comete el Gobierno de Pedro Sánchez. Vox tiene claro que va a contar y a denunciar cada barbaridad, cada atrocidad, cada charlotada de Sánchez.

La mezquindad y la mediocridad no son simples defectos morales individuales, sino que son fuerzas corrosivas que pueden fragmentar severamente el tejido social, minar el potencial colectivo y fomentar la alienación de las personas. Estas actitudes, al arraigarse en las relaciones humanas, bloquean todo tipo de cooperación puesto que desconfían del mérito de quienes puedan llegar a tener algún talento real que no sea chupar medias.

El Parlamento australiano ha aprobado la primera ley mundial que prohíbe el acceso a redes sociales a los menores de 16 años. Con la finalidad de hacer realidad la protección digital de los adolescentes y niños. Es una medida polémica, ya que puede parecer excesivo tomar una medida tan radical. La ley contempla multas de hasta unos 30,5 millones de euros para las plataformas que la incumplan.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto