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Trabajada victoria del Eibar en Vallecas (2-3) | ||||||||||
| El Rayo logró remontar un 0-2 pero sucumbió en los minutos finales | ||||||||||
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Increíble lo que está haciendo el Eibar en su debut en la máxima categoría del fútbol español. Sin estrellas, pero con una red perfectamente estructurada, los de Gaizka Garitano saben dominar al rival incluso sin la posesión del balón. Esto mismo ha vuelto a suceder en esta noche lluviosa vallecana. Penalti más que dudoso En la primera media hora del partido el Rayo buscó el balón, pero apenas logró acercarse a la meta de Irureta en un par de lanzamientos de Léo Baptistão y Nacho desde fuera del área. El Eibar no quería el balón y esperaba su momento. Y ese momento llegaría a los 36 minutos con un penalti a favor. El primero en Primera División, pero más que discutible en una acción entre Nacho y Eneko Bóveda que terminó con el lateral vizcaíno en el césped. Arruabarrena engañó completamente a Cobeño –sustituto del lesionado Toño– para poner el 0-1 en el marcador. Pero el mayor mazazo para el Rayo Vallecano llegaría con el 0-2 al poco de reanudarse el encuentro. Medio gol habría que dárselo a Saúl por su genial asistencia con el exterior para que el italiano Piovaccari se colara entre los dos centrales y batiera a Cobeño en el uno contra uno. Jémez, a la desesperada Con el partido perdido, el técnico andaluz no vio nada que perder y quitó a Zé Castro para acabar jugando de nuevo con una defensa de tres hombres. El Rayo iba a buscar marcar por lo civil o por lo criminal, mientras el Eibar se agazaparía buscando contraataques. Dicho y hecho. Al poco Léo y Aquino desaprovecharon una doble ocasión para los locales y más tarde Piovaccari haría lo propio perdonando el 0-3 solo ante Cobeño. En las dos jugadas inmediatamente posteriores al fallo del italiano llegarían los dos goles que harían temblar las gradas de Vallecas. Los dos de Baptistão, con apenas 57 segundos de separación entre ellos. El primero, en un buen cabezazo del brasileño tras un centro de Licá desde la izquierda. El segundo, aprovechando el pase de la muerte de Gaël Kakuta desde la derecha. Los tres puntos se fueron para Eibar El empate hizo mucho daño al conjunto guipuzcoano, que logró aguantar las embestidas locales en busca de la victoria. Sin embargo, Garitano se sacó su as de la chistera con un doble cambio para los últimos minutos. El Eibar acabaría el partido con defensa de cinco y sin delantero centro fijo. Y le salió bien la jugada al de Derio, pues desde entonces su equipo apenas sufrió y pudo salir varias veces en velocidad con un fresco Manu del Moral. De las botas del jienense saldría el centro que acabaría rematando Arruabarrena en las postrimerías del partido para llevarse tres puntos muy importantes de Vallecas. Con el triunfo de esta noche, el Eibar suma ya 13 puntos en un arranque histórico para los azulgranas, que visitarán La Rosaleda el próximo sábado (22:00). El Rayo Vallecano encadena su segunda derrota consecutiva antes de visitar a un Real Madrid que se encuentra en su mejor momento de forma. El partido se disputará también el sábado (20:00).
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