Apoteosis en San Pablo para finalizar el año baloncestístico en Sevilla. El Betis Energía Plus, tras un partidazo y un final agónico, ha derrotado al líder Real Madrid en lo que, sin duda, ha sido su mejor encuentro con diferencia de la presente temporada. Los verdiblancos, con un pabellón lleno, se han sobrepuesto al poderío de su rival y al nefasto arbitraje para sumar su quinta victoria del curso, que debería suponer un gran espaldarazo al proyecto bético de cara a la importantísima Junta Extraordinaria del Real Betis Balompié del próximo viernes, en la que podría decidirse, una vez más –y van…- el futuro de este equipo. Por su parte el Real Madrid, que sólo se despegó un poco cuando las muñecas de sus tiradores despertaban y cuando el trío arbitral les echaba una manita, suma su segunda derrota de la actual Liga Endesa; ésta ante un equipo que no ganaba ante los suyos desde el pasado 30 de octubre, y que no ha podido escoger mejor fecha para volverlo a hacer. Dos tiros libres de Triguero y una espectacular última defensa hicieron posible la gesta, después de un enorme trabajo de los hombres de Zan Tabak, culminado con un espectacular último cuarto que conllevó un parcial de 26-16. Ay, si este equipo hubiese competido igual la anterior jornada contra Montakit Fuenlabrada, o en el inicio de liga frente a ICL Manresa, por ejemplo... las cosas serían bien diferentes a como son hoy en día. A tope pese a Llull Los béticos, presentación al estilo NBA incluida, salieron con muchas ganas, ante un pabellón prácicamente lleno. Pese a las lecciones de baloncesto que desde el principio impartía Sergio Llull, el Betis respondía con efectividad en ataque, gracias principalmente a Lockett y Nachbar. Así, los verdiblancos llegaron a estar hasta cuatro puntos por delante durante los primeros instantes (8-4), y se mantuvieron pegados al Madrid hasta que un tirón final comandado por Llull (13 puntos en este cuarto, metiéndola de todos los colores) permitió a los hoy de morado (primera vez que el Madrid juega con su segunda equipación en Sevilla) irse por siete puntos, antes de que dos tiros libres postreros de Nachbar, con el reloj a cero, pusieran el 23-28. En el segundo cuarto Pablo Laso puso en cancha a su segunda unidad, sin Llull o Felipe Reyes durante casi todo el tiempo. El Betis EPlus lo aprovechó para salir más vivo y volver a ponerse por delante con un parcial inicial de 6-0 (29-28, min 12) culminado con una canasta de Alfonso Sánchez. “Ayuditas” arbitrales al más fuerte Pero entonces entraron en acción Anthony Randolph... y el trío arbitral. El primero tomó el liderazgo en ataque del Madrid, con 8 puntos que le convirtieron en su principal bastión ofensivo en este período. Y los segundos, los señores Pérez Pérez, Bultó y Mas, se encargaron de enardecer para mal a San Pablo merced a un arbitraje tendenciosamente favorable al poderoso, con dudosas faltas personales y una técnica al cuadro bético. Todo un concierto de pito en dirección a la capital, que el Madrid lo aprovechó para enlazar un parcial de 0-11 con el que se ponía diez arriba (29-39, min 15). No obstante, pese a que los titulares blancos regresaron, el Betis reaccionó con el buen hacer de Lockett y Mahalbasic sobre todo, y con las acciones de un Niko Radicevic que contestó a cinco puntos de Llull con otros tantos dentro del último minuto, en especial un triple a tablero sobre la bocina con el que los locales se marchaban al descanso con vida (41-46). No obstante, la gesta aún estaba lejos de hacerse realidad. Durante el tercer cuarto el Real Madrid controló el partido hasta cierto punto, con la ayudita arbitral que hasta ahora estaban teniendo (lo mismo pitaban una falta en ataque con 56-57 que unos pasos, que alguna que otra falta dudosa, siempre a favor de los visitantes), y también, todo hay que decirlo, con la extraordinaria calidad de sus jugadores. Como Rudy Fernández, que tuvo su momento con un 2+1, un triple y una canasta tras puerta atrás para dejar el marcador en 60-69, a falta de diez minutos. A base de fe y casta Un último cuarto heroico -con San Pablo animando sobre todo con el clásico grito de “¡Caja, Caja!” y entonando bien alto el “sí, se puede”- en el que Radicevic se hizo el amo y señor desde el puesto de base, y en el que Lockett y Mahalbasic por dentro marcaron diferencias. El americano firmó un 77% de porcentaje en el tiro, sumó 6 rebotes y fue el jugador más valorado del partido; y el pívot internacional austríaco dio todo un clínic de cómo moverse en la zona contraria primero ante Hunter, y luego ante Ayón. La fe verdiblanca llevó a Lockett a empatar el encuentro a 78 a falta de tres minutos, aunque inmediatamente Carroll, con el segundo de sus triples en este cuarto –ambos desde la esquina-, devolvió la delantera a su equipo en el marcador. Pero el Betis EPlus no quería dejar escapar su oportunidad, quién sabe, de enganchar a la gente definitivamente para la causa. Radicevic, con un canastón, ponía por delante a los locales (85-84) a falta de menos de un minuto. El Madrid no anotó en la siguiente acción, pero Felipe Reyes cogió un rebote y forzó una más que dudosa personal que supuso la eliminación de Mahalbasic. Triguero: villano y héroe El Betis EPlus se quedaba sin su mejor intimidador, algo que se notó en la siguiente acción –aún no había “bonus”-, en la que a la tercera, o la cuarta, y frente a un apático Triguero, Felipe Reyes palmeó y le dio un punto de ventaja al Madrid (85-86) con 17 segundos por delante. Pero el pívot de Gandía, muy discutido por su flojísimo rendimiento tras su regreso a Sevilla, tuvo la ocasión de redimirse –al menos hoy-, y la aprovechó. El Madrid le hizo personal nada más sacarse de banda, y Triguero tuvo la sangre fría en la que pocos confiaban para anotar los dos pertinentes tiros libres. Faltaban quince segundos, y Pablo Laso preparó una última jugada para Sergio Llull. El tantas veces salvador, que tan sólo anotó una canasta en toda la segunda mitad, optó en su penetración por doblar el pase ante la imposibilidad de tirar y, ahora sí, todo el Betis empezando por Triguero saltó como una manada de lobos para evitar la canasta de Felipe Reyes, haciéndose el valenciano con el rebote y certificando el gran bombazo de la jornada en la Liga Endesa. Un resultado que al Madrid no debería afectarle sobremanera en su moral, pero que para el Betis EPlus es poco menos que la misma vida. De un lado pone algo de distancia con los dos últimos; y de otro ha mandado un mensaje a la junta directiva del Real Betis Balompié de que, haciendo las cosas medianamente bien, el proyecto bético como continuador del Baloncesto Sevilla es más que viable. Claro que, como hemos comentado al principio de la crónica, también hay quien reflexiona sobre dónde podría estar ahora este equipo de haber sido más consistente otros días. Pero eso ahora mismo poco importa: si bien los profesionales deben seguir concentrados porque el viernes les espera el Bilbao Basket en su cancha, los aficionados “cajibéticos” se han ganado todo el derecho a disfrutar a tope de esta pedazo de victoria.
86 - REAL BETIS ENERGÍA PLUS: Radicevic (17), Lockett (16), Stojanovski (10), Milosevic (5), Mahalbasic (16) -cinco inicial-, -Chery (2), Alfonso Sánchez (7), Nachbar (11), Triguero (4), Cate (-) y Marc García (-). 85 - REAL MADRID: Llull (20), Doncic (6), Maciulis (2), Felipe Reyes (12), Ayón (12) -cinco inicial-, Draper (-), Rudy (10), Randolph (10), Carroll (11) y Hunter (2). ÁRBITROS: Pérez Pérez, Bultó y Mas. Eliminaron por personales a los locales Milosevic y Mahalbasic. PARCIALES: 23-28, 18-18, 19-23, 26-16 INCIDENCIAS: Decimocuarta jornada de la Liga Endesa 2016-2017. Pabellón San Pablo (Sevilla), 7.112 espectadores, algunos de ellos aficionados del Real Madrid.
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