El Leganés logró este lunes una victoria vital en su objetivo de lograr la permanencia tras imponerse con oficio al Real Betis (4-0) en el encuentro que cerró la jornada 36 de LaLiga Santander, un triunfo que deja al conjunto 'pepinero' a tan solo un punto de la salvación a falta de dos jornadas y reduce las opciones del Real Sporting de Gijón, que tendrá ahora que esperar los tropiezos del RC Deportivo.
Los de Asier Garitano se bastaron de un inicio arrollador con dos goles en el primer cuarto de hora para no pasar apuros durante el resto del choque y certificar una victoria que sabe prácticamente a salvación. Ante un inoperante cuadro verdiblanco que sumó su tercera derrota consecutiva, los del sur de Madrid terminaron goleando a su rival e incluso se permitieron dos obras de arte finales a cargo de Gabriel Pires y Szymanowski.
Apenas pudo plantar cara en Butarque el conjunto de Víctor Sánchez del Amo, sin objetivo alguno más allá que el de enmendar su pobre imagen en el tramo final de temporada, y eso que sería Álex Alegría el primero en llevar peligro al área local. Nada más lejos de la realidad, pues una mano dentro del área de su tocayo, Martínez, permitía a Szymanowski abrir el marcador desde el punto de penalti en el minuto 7.
Volvió a encontrar petróleo el 'Lega' poco después gracias al franco-marroquí El Zhar, que aprovechó una serie de rebotes de la zaga bética para batir en el mano a mano a un vencido Adán. Pagaba cara así su falta de contundencia defensiva el Betis, que solo mostró reacción en los últimos minutos de la primera mitad, siendo Martin el único que pudo inquietar con un disparo 'mordido' la meta de un muy bien plantado cuadro local.
Sin excesiva producción ofensiva, pero con mucha efectividad arriba, el Leganés mantuvo el mismo guión que en la primera parte, frenando firmemente las escasas acometidas que llegaban a la portería de Herrerín y saliendo raudo al contraataque. Así, sería Gabriel Pires, pasada ya la hora de juego, quien robase el esférico en el centro del campo y sorprendiese a un adelantado Adán con una vaselina perfecta para establecer el 3-0.
Totalmente hundido y tocado en su orgullo, el Betis buscó el tanto de la honra que recortase distancias con un potente cabezazo de Alegría que salvó Herrerín con una gran parada. No acertó en su intento, y sí lo hizo en el otro lado Szymanovski con una diagonal culminada con un precioso toque elevado ante Adán, poniendo de esta forma la guinda a una noche 'pepinera' perfecta.
La gabarra "Athletic" está feliz, puesto que por fin verá finalizada su inactividad de tanto tiempo. Todo ello porque los bilbaínos pusieron fin a su maldición de cuarenta años sin ser campeones de la Copa del Rey, con seis finales perdidas, cinco en los últimos 15 años. El equipo de Valverde debió esperar a la tanda de penaltis para vencer a un combativo Mallorca y alcanzar la gloria, pero esta Copa, "su" Copa más deseada, por fin podrá lucirla ante su gente por la ría de Bilbao.
Una Copa para el Madrid, la 20ª de su historia; una Copa para Rodrygo Goes, MVP y autor de los dos goles que vuelven a dar el título copero a los blancos, nueve años después de aquel recordado triunfo en Mestalla frente al Barça. Y, a la vez, un subcampeonato, el segundo de su historia, con honores de campeón para Osasuna.
El Real Betis Balompié es el campeón de la Copa del Rey. El equipo verdiblanco, en su ciudad, delante de su gente que lo sigue sin rechistar, ha salido victorioso por tercera vez después de una nueva final épica, como todas las que disputa, y en la que un rival tan sumamente digno como el Valencia y que ha merecido la Copa tanto como él solo ha claudicado en la cruel tanda de penaltis.