El responsable de la división de Datos Telefónica de España, Chema Alonso, ha explicado que los equipos informáticos infectados de esta compañía durante el ciberataque registrado este viernes, que ha afectado a unos 70 países, "están controlados y están siendo restaurados".
Así lo asegura en un artículo publicado este sábado en su blog 'Un informático en el lado del mal', en el que explica cómo el equipo de Telefónica ha gestionado el virus que ha afectado a un segmento de equipos, y del que destaca que ha tenido más impacto "mediático" en las redes sociales que en la "realidad interna" de su empresa.
Alonso subraya que, a pesar de este "ruido", el virus del subtipo 'ransomware' "no ha conseguido mucho impacto real" porque, según explica, los promotores del ataque solo han conseguido ocho pagos --unos 6.000 dólares-- en todo el mundo, en la moneda digital 'bitcoin', como pago para recuperar los equipos infectados.
"A nosotros (Telefónica) nos afectó esta pieza de 'ransomware' en un determinado segmento, como a muchas otras empresas por desgracia, y debido a que la gestión de los riesgos es una prioridad, el equipo encargado de ocuparse de la seguridad interna de la red optó por primar la protección de los servicios de los clientes y cortar la posible expansión por la LAN interna", argumenta.
Alonso, que estaba de vacaciones cuando se produjo el ataque, señala que tuvo que interrumpirlas y sumarse al comité de crisis que está lidiando con esta situación, que, según insiste, está "controlada". No obstante, indica que alcanzar el 100% de seguridad "es un hito solo al alcance la imaginación de los que no saben de seguridad", pero que él y su equipo seguirán trabajando para "minimizar el riesgo".
El último ciberataque sufrido por el CSIC ha vuelto a reflejar la falta de ciberseguridad que hay en España. No solo entre las empresas, también en unas administraciones públicas que recaban miles de datos de gran valor y que en un contexto geopolítico como el actual son un claro objetivo de este tipo de agresiones.
El sector educativo se encuentra bajo una amenaza constante de ciberataques, con costes económicos y reputacionales alarmantes. Según un estudio, los centros educativos afectados por ciberataques enfrentan un impacto económico que oscila entre 4 y 6 millones de euros. Entre las amenazas más devastadoras está el ransomware, que bloquea sistemas y exige rescates exorbitantes.
La última actualización de la Guía de Cookies de la Agencia Española de Protección de datos (AEPD) refuerza los derechos de los usuarios, otorgándoles mayor control sobre sus datos personales. El cambio más destacado de esta nueva política de cookies radica en la obligatoriedad de obtener consentimiento explícito de los usuarios antes de recopilar o utilizar datos personales.