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Otra remontada in extremis (2-1) | ||||||||||
| Dos goles en los últimos minutos de cada parte, dan el triunfo a los de Preciado. | ||||||||||
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Comenzaba
el encuentro con dos equipos tímidos, con más miedo a fallar y
regalar puntos al rival, que otra cosa. Un par de ocasiones para cada
bando, sina penas peligro ponían algo de ánimo, a un encuentro que
parecía que iba a ser un verdadero aburrimiento. Pero de repente, apareció Miku, inventándose una genialidad que terminó por enviar al fondo de la meta de Juan Pablo. Mucho premio para lo visitantes, que no tiraron entre los tres palos hasta esa primer media hora de encuentro. Pero el fútbol es de listos, y el delantero venezolano del Getafe, aprovechó la caraja de la zaga defensiva local. El
Sporting comenzó a reaccionar, pero no llegaba ni a asustar a la
meta defendida por Moyá. A los de Preciado les costaba encadenar los
pases y mucha culpa de ello, la tuvieron la constantes interrupciones
de juego -que hicieron que cada parte tuviera cinco minutos más de
añadido- y así era muy difícil intentar organizar al equipo. Al final de la primera parte, sucedió la jugada del empate del Sporting, en una de las jugadas polémicas de la tarde. El colegiado del encuentro, decide dar córner a un balón que sale rechazado tras dar en el Cata Díaz. Esta jugada fue bastante protestada, por considerar que le dio en la mano. Del saque de este córner, llegaría el empate de los rojiblancos. Moyá no consigue blocar el balón y su despeje lo empalma Trejo al fondo de las mallas. Primer gol del argentino con el Sporting, que consiguió alegrar a la afición local, que comenzó a temer un batacazo de su equipo. Con el empate a un gol, se llegó al descanso. Tras la reanudación, iba a comenzar el baile de tarjetas que Turienzo le iba a dedicar a los de Luis García. La primera sería la segunda de Abdel, por simular penalti. Aunque el forcejeo entre el jugador y el defensa Damián fuera del área, es claro, la infracción resulta un tanto dudosa, en el momento en él que entran dentro del área. Pese a la superioridad numérica, los de Preciado no eran capaces de llevar peligro a la meta rival. Aguantaron estoicamente, las duras entradas de los madrileños, pero no podían zafarse de un Getafe que con sólo encerrarse atrás, consiguió hacer más jugadas de peligro, que en toda la primera parte. El Sporting comenzó a presionar y creerse que podía dar la vuelta al marcador. Los cambios incomprensibles de Preciado, iban a dar resultado. Lo que no se consiguió en media hora de superioridad númerica, se iba a conseguir en el último minuto. Damián rompe a la defensa, con un pase milimétrico que llega a los pies de Barral que sólo tiene que chutar a portería. Moyá despeja el balón y Nacho Novo que estaba atento con la caña de pescar, remata de cabeza ese rechace, materializando él que sería el tanto de la victoria del equipo local. A los asturianos sólo les quedó sufrir otros cinco minutos de descuento más, para obtener un triunfo que le svino como caído del cielo. Y es que, ni Sporting ni Getafe merecieron mucho maś que un empate. Apenas se vio juego, sólo intenciones y jugadas individuales -de Trejo en los locales y Miku en los visitantes- muy poca intensidad, para un encuentro que necesitaba más pasión y ganas.
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2- Sporting Gijón: Juan Pablo (1); Damián (1), Botía (1), Iván Hernández (1), Canella (1); Rivera (2), Nacho Cases (1); Trejo (2), André Castro (2), De Las Cuevas (1) y Barral (1) 
1- Getafe.: Moyá (2); M. Torres (1), Cata Díaz (2), Rafa (1), Mané (1); Míchel (1), Lacen (1); Valera (1), Abdel (1), Diego Castro (1) y Miku (2)
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