El Valencia comenzó la era Marcelino este viernes con una victoria por la mínima (1-0) ante la UD Las Palmas en Mestalla en la primera jornada de LaLiga Santander, en la cual el CD Leganés venció con el mismo resultado en Butarque al Deportivo Alavés gracias a un gol de Gabriel Pires que decantó un duelo muy igualado.
El cuadro 'che' disfrutó de un plácido debut del curso ante un conjunto canario sin pegada y condicionado por la rigurosa expulsión a la media hora de Alen Halilovic. El joven croata era el motor del equipo de un Manuel Márquez también de estreno en el banquillo y que ya marchaba con el marcador adverso desde el minuto 20 por el tanto sin oposición desde la frontal de Zaza.
El Valencia se replegó y buscó la salida en velocidad ante un equipo amarillo que no logró conectar con Viera o su flamante aunque temporal refuerzo Vitolo. Mismo guion que en una segunda parte en la que Zaza, Rodrigo y Cancelo perdonaron la sentencia. La presión local o los errores de Las Palmas permitieron las llegadas a la meta de un Chichizola que, bajo palos, fue lo mejor de su equipo.
Perdonó la sentencia pero no sufrió el Valencia ante los canarios, sin gasolina en el tramo final después de una hora con uno menos. El pitido final dejó las lágrimas de Cancelo despidiéndose de la afición de un Valencia con muchas caras nuevas en la recámara aún por descubrir, y dos incorporaciones este mismo viernes como Gabriel Paulista y Jeison Murillo.
BUTARQUE SUMA LOS TRES PRIMEROS PUNTOS En el duelo que abrió LaLiga, el Leganés consiguió los tres primeros puntos de la temporada ante el Alavés. Un choque entre dos viejos conocidos y aspirantes a mantener la categoría resuelto con un gol de Gabriel Pires en la primera mitad, tras el cual el dominio ejercido por el conjunto vitoriano en el tramo final estuvo muy cerca de poner las tablas.
Y eso que comenzó mandando el Alavés, que con varias caras nuevas y un nuevo inquilino en su banquillo, Luis Zubeldía, puso en aprietos al 'Lega' durante el arranque. Tanto es así, que el cuadro vasco contó incluso con la tempranera ocasión de abrir la lata gracias a un penalti cometido sobre Burgui, pero que erró Manu García lanzándolo a las manos de Cuéllar. Perdonó el regalo el 'Glorioso' y lo pagó minutos después.
Si ya había avisado Gabriel Pires con un remate que se fue cerca del palo, el brasileño -pieza clave en el esquema de Asier Garitano- no perdonaba a la segunda y aprovechaba un mal rechace del meta alavesista Pacheco tras una falta, previo desvío de la barrera, para estrenar el marcador en el minuto 24. Así, el primer gol de la LigaSantander 2017/2018 llevó la firma pepinera.
Tras la reanudación, Guerrero pudo aumentar la ventaja para los madrileños. Sin embargo, fue el Alavés quien llevó al partido hacia su terreno cumplida la hora de juego. En un ida y vuelta constante, los subcampeones de Copa buscaron con ahínco el empate, que tuvieron cerca con un disparo de Burgui al larguero, pero acabaron sucumbiendo ante un firme Leganés.
La gabarra "Athletic" está feliz, puesto que por fin verá finalizada su inactividad de tanto tiempo. Todo ello porque los bilbaínos pusieron fin a su maldición de cuarenta años sin ser campeones de la Copa del Rey, con seis finales perdidas, cinco en los últimos 15 años. El equipo de Valverde debió esperar a la tanda de penaltis para vencer a un combativo Mallorca y alcanzar la gloria, pero esta Copa, "su" Copa más deseada, por fin podrá lucirla ante su gente por la ría de Bilbao.
Una Copa para el Madrid, la 20ª de su historia; una Copa para Rodrygo Goes, MVP y autor de los dos goles que vuelven a dar el título copero a los blancos, nueve años después de aquel recordado triunfo en Mestalla frente al Barça. Y, a la vez, un subcampeonato, el segundo de su historia, con honores de campeón para Osasuna.
El Real Betis Balompié es el campeón de la Copa del Rey. El equipo verdiblanco, en su ciudad, delante de su gente que lo sigue sin rechistar, ha salido victorioso por tercera vez después de una nueva final épica, como todas las que disputa, y en la que un rival tan sumamente digno como el Valencia y que ha merecido la Copa tanto como él solo ha claudicado en la cruel tanda de penaltis.