Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Internacional
Etiquetas | Tailandia | Nacismo

McHitler: ¿moda nazi en Tailandia?

Cruces gamadas salpican los mercados en Asia
Jaime Moreno Tejada
viernes, 30 de marzo de 2012, 07:31 h (CET)

McHitler, moda, nazi, Tailandia


No es raro pasear por los inmensos mercados de Bangkok o Chiang Mai y darse de bruces con el llamado Ronald McHitler, un popular híbrido del líder nazi y el payaso de McDonalds, estampado en miles de camisetas y en otros objetos decorativos.

La parafernalia nazi emerge por entre el ejército de souvenirs que se ofrece al público interesado en algunos puestos callejeros. No sólo eso: también hay tiendas de moda, donde compran los veinteañeros más “modernos”, que venden prendas inspiradas en los símbolos del Tercer Reich.

Los extranjeros (sobre todo europeos y estadounidenses) no pueden esconder el horror o la sorpresa que produce tal descubrimiento. La prensa occidental también se lleva las manos a la cabeza de cuando en cuando.

Hace un año circularon por Internet las fotos de un desfile juvenil en el que, sobre un fondo de esvásticas, en plena calle, todo el mundo iba vestido de “stormtrooper” o con el uniforme negro de las SS. Las instantáneas dieron la vuelta al mundo y dejaron al ciberespacio estupefacto.


McHitler, moda, nazi, Tailandia
Imagen de Tibor Krausz/CNNGO


El último escándalo lo causó hace algunas semanas una serie de fotos con el citado Ronald McHitler como protagonista.

La pregunta es por qué. Se dice con frecuencia que los horrores del nacional socialismo alemán son relativos, y que Hitler no dejó una cicatriz psicológica en Asia comparable a la que recorre Europa de punta a punta.

También se ha dicho que no es un fenómeno exclusivamente asiático: en Europa la imagen de Hitler ―antes que en ningún otro lugar del mundo― se ha usado en camisetas y cazadoras con el solo propósito de causar consternación entre la ciudadanía respetable. La prueba más evidente es el movimiento punk.

Además de esto, quienes tratan de explicar la cuestión afirman que Occidente inventó la cultura pop, y que la moda nazi no es más que una expresión asiática de la misma: otra broma en un mundo cuyo eje cultural es la ironía.
 
En Europa, cada verano, se venden miles de camisetas con la hoz y el martillo sobre un fondo rojo, o con el sonriente rostro de Joseph Stalin. Mao Tse Tung es también un motivo de alegría pop entre la inconsciente juventud occidental.

Stalin y Mao ―al contrario que Hitler― son sinónimos del mal absoluto, y por lo tanto tabúes, en muchos países extraeuropeos.

Por otro lado, los observadores con inclinaciones antropológicas recalcan la antigüedad de la cruz gamada, un símbolo religioso extendido en el continente asiático desde hace milenios.

Pero esta es una explicación que sólo añade relativismo a una cuestión que ya de por sí es relativa. La juventud tailandesa (y de otros países como Japón, donde el nazismo también es “chic”) desconoce a Hitler, o no piensa en él más que como reliquia estética del pasado.

En Europa es difícil olvidar a Hitler, pero no porque la gente recuerde los horrores de la guerra, sino porque el tema siempre es un “best seller”, y seguramente no hay nada sobre lo que se haya escrito más en la historia.

Está claro que los fines de la moda nazi en Tailandia son puramente ornamentales y que están vacíos de contenido ideológico. La cruz gamada, para muchos jóvenes, es un símbolo de estilo como otro cualquiera.

Finalmente, la prensa suele omitir un dato al escandalizarse: a pesar de que se vendan en los mercados tailandeses a plena luz del día, no es fácil ver a gente vistiendo camisetas del fürher. Sencillamente es una moda marginal. Tanto es así que sería difícil llamarlo “moda”.

Noticias relacionadas

World Vision instó este viernes a "la protección inmediata de la infancia" en el noroeste de Siria, donde dijo que más de 550.000 niños están en riesgo de sufrir problemas de salud mental y unos 24.300 han sido desplazados, debido a la reciente escalada de las hostilidades.

Al menos 1360 niños y niñas nunca se han reunido con sus madres y padres seis años después de que el Gobierno de Estados Unidos los separó de manera forzosa en la frontera de Estados Unidos, según se denuncia en un informe divulgado por la organización humanitaria Human Rights Watch (HRW).

La Corte Internacional de Justicia (CIJ) concluyó dos semanas de audiencias sobre las obligaciones jurídicas de los Estados ante la crisis del clima y los daños causados por los mayores contaminantes, sobre lo cual emitirá opinión como un nuevo paso hacia una justicia climática. El máximo tribunal de las Naciones Unidas anunció que, después de escuchar los argumentos de más de 100 países y organizaciones internacionales, “comenzará ahora su deliberación".

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto