La selección eslovena de baloncesto se coronó este domingo por primera en su historia como campeona del Campeonato de Europa, después de derrotar en Estambul a Serbia por 93-85, en un partido muy igualado en el que el base de los Heat de Miami Goran Dragic ofreció una exhibición anotadora, con 35 puntos. Los 35 puntos del base fueron capitales para la victoria de su conjunto, que también tuvo que apoyarse en un Klemen Prepelic que tomó el testigo con 21 tantos tras el bajón físico de su compañero y la lesión de Luka Doncic. Los de Sasha Djordjevic no perdieron la cara al choque y compitieron hasta el último momento, quedando a las puertas de un primer éxito continental que se les sigue resistiendo.
Los serbios trataron de aprovechar su poderío interior en el arranque del choque. El nuevo jugador del Real Madrid Ognjen Kuzmic jugó sus mejores minutos en el inicio, mientras que Doncic tomaba el mando de la nave eslovena para equilibrar la balanza.
La aparición de Dragic y Prepelic rompió el equilibrio. El base forzaba faltas con penetraciones, mientras que el alero amenazaba desde el perímetro. Dragic tomó las riendas del choque e impuso un ritmo anotador frenético, con 20 puntos en el segundo cuarto, que los de Sasha Djordjevic no pudieron aguantar.
Un parcial de 16-4 otorgó a los eslovenos una ventaja alrededor de los diez puntos. Mientras tanto, Serbia no perdía la cara al partido y continuaba concentrada en su labor a la espera del bajón rival, que llegó tras el descanso.
Eslovenia sufrió en el tercer cuarto para anotar, más aún después de la lesión de Luka Doncic, que tuvo que abandonar el partido por una torcedura de tobillo. Además, la exhibición física le empezó a pasar factura a un Dragic cansado que vio como los serbios se volvían a poner por delante a falta de cinco minutos, gracias a los buenos minutos de Milan Macvan (18 puntos) y Bogdan Bogdanovic (22 puntos).
Con todo en contra y las estrellas fuera de juego, los de Igor Kokoskov fueron más equipo que nunca y emergieron Prepelic desde el perímetros y Gasper Vidmar y Anthony Randolph, en el juego interior, para dar el primer triunfo continental a Eslovenia, dejando a los de Sasha Djordjevic con la miel en los labios.
FICHA TÉCNICA. --RESULTADO: ESLOVENIA, 93 - SERBIA, 85 (56-47 al descanso). --EQUIPOS. ESLOVENIA: Dragic (35), Doncic (8), Blazic (7), Muric (5) y Vidmar (2) --cinco inicial--; Prepelic (21), Nikolic (4), Cancar (-), Zagorac (-), Dimec (-) y Randolph (11).
SERBIA: Jovic (2), Bogdanovic (22), Lucic (9), Macvan (18) y Kuzmic (6)--cinco inicial--; Bircevic (8), Marjanovic (6), Milosavljevic (2), Micic (4), Guduric (6) y Stimac (2).
--PARCIALES: 20-22, 36-25, 15-20 y 22-18. --ÁRBITROS: Maranho (BRA), Conde (ESP) y Sahin (ITA). Eliminado Lucic por faltas personales en Serbia.
--PABELLÓN: Sinan Erdem Arena de Estambul. 12.095 espectadores.
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