El Consejo de Administración del Málaga CF ha nombrado como nuevo director deportivo a Mario Armando Husillos, que sustituye en el cargo a Francesc Arnau, según ha anunciado el club este lunes.
El argentino acumula una amplia experiencia en el seno de la entidad malaguista, donde ha militado durante cinco temporadas como jugador blanquiazul y una como técnico en Segunda B en la campaña 2006-07.
Así, regresa al club andaluz como director deportivo tras ejercer como máximo responsable de la parcela deportiva entre 2012 y 2015. En la campaña 2012-13, Husillos fue el director deportivo de un equipo que, con Manuel Pellegrini a la cabeza, alcanzó los cuartos de final de la Liga de Campeones y quedó en la sexta plaza en la competición liguera. Además, hizo llegar a Málaga jugadores como Roque Santa Cruz o Javier Saviola.
Husillos ejercía, hasta ahora, como director deportivo del vigente campeón de la Superliga de Grecia, el Olympiakos. Tras llegar a un acuerdo para desvincularse del club heleno, se incorpora al frente de la parcela deportiva del Málaga para asumir un nuevo proyecto en su carrera.
Por otra parte, el club quiso agradecer su trabajo a Arnau, que ha jugado diez temporadas en el primer equipo y que los dos últimos años ha ejercido de director deportivo. "El Málaga CF quiere agradecer a Francesc Arnau su labor realizada todos estos años en la Entidad, deseándole mucha suerte en su futuro profesional", concluye.
La gabarra "Athletic" está feliz, puesto que por fin verá finalizada su inactividad de tanto tiempo. Todo ello porque los bilbaínos pusieron fin a su maldición de cuarenta años sin ser campeones de la Copa del Rey, con seis finales perdidas, cinco en los últimos 15 años. El equipo de Valverde debió esperar a la tanda de penaltis para vencer a un combativo Mallorca y alcanzar la gloria, pero esta Copa, "su" Copa más deseada, por fin podrá lucirla ante su gente por la ría de Bilbao.
Una Copa para el Madrid, la 20ª de su historia; una Copa para Rodrygo Goes, MVP y autor de los dos goles que vuelven a dar el título copero a los blancos, nueve años después de aquel recordado triunfo en Mestalla frente al Barça. Y, a la vez, un subcampeonato, el segundo de su historia, con honores de campeón para Osasuna.
El Real Betis Balompié es el campeón de la Copa del Rey. El equipo verdiblanco, en su ciudad, delante de su gente que lo sigue sin rechistar, ha salido victorioso por tercera vez después de una nueva final épica, como todas las que disputa, y en la que un rival tan sumamente digno como el Valencia y que ha merecido la Copa tanto como él solo ha claudicado en la cruel tanda de penaltis.
