El Gobierno de Colombia ha instado este lunes "al pueblo venezolano, a sus líderes políticos y a sus autoridades" a "rechazar la violencia, preservar la paz" y "priorizar el diálogo transparente y garantista de todos los sectores" de cara a hacer frente a la tensa situación que se vive en el país tras la reelección de Nicolás Maduro.

El objetivo de este diálogo es "la búsqueda de acuerdos institucionales y democráticos frente a la situación electoral en el país", según ha indicado el Ministerio de Exteriores colombiano a través de un comunicado publicado en su perfil de la red social X.

"Colombia, como parte de la comunidad internacional, estará presta a apoyar los esfuerzos necesarios para garantizar la paz, la estabilidad y la profundización democrática en la región", ha agregado la cartera diplomática.

Horas después, ha informado de que el congresista José Jaime Uscátegui, del partido Centro Democrático, y su equipo han sido liberados y han vuelto a territorio colombiano después de que la Embajada de Colombia y el consulado en Táchira, que han verificado que sus derechos eran respetados, abordaran el asunto por canales diplomáticos.

Uscátegui fue retenido en la frontera entre Colombia y Venezuela por miembros de la Guardia Nacional Bolivariana. Su formación política exigió la "liberación inmediata" e hizo responsable a las autoridades venezolanas de "su vida y su seguridad". "Siguen las arbitrariedades y abusos del régimen de Maduro", añadió.

El país ha registrado una serie de protestas que han dejado un muerto, medio centenar de detenidos y una veintena de militares heridos después de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) otorgara la victoria a Maduro con un 51 por ciento de los votos frente a un 44 por ciento del opositor Edmundo González.

La oposición ha rechazado estos resultados y ha asegurado que tiene pruebas de que González es el presidente electo del país, mientras que gran parte de la comunidad internacional ha pedido "total transparencia" y la publicación de resultados detallados. El rechazo de la victoria de Maduro por parte de Gobiernos de países de la región ha provocado crisis diplomáticas con varios países, entre ellos Argentina y Perú.