MADRID, 08 (SERVIMEDIA)

El Ejército del Aire mantiene desplegados cuatro ‘corsarios’, sus aeronaves apagafuegos del 43 Grupo de Fuerzas Aéreas, para las tareas de extinción de varios de los incendios declarados en Galicia.

En concreto, el operativo empleados son cuatro aviones Bombardier CL-215 (denominados oficialmente UD-13) destacados en el Aeródromo Militar de Lavacolla, en Santiago de Compostela y en la Base Aérea de Matacán, en Salamanca, según informó este miércoles el Ejército del Aire.

Durante el pasado domingo comenzaron a declararse una serie de incendios por toda la comunidad gallega, ya en alerta por riesgo extremo de fuegos en varias zonas. A consecuencia de ello, a primera hora de la tarde dos aviones del 43 Grupo destacados en el Aeródromo Militar de Lavacolla fueron requeridos para actuar en el incendio declarado en Lousame, en A Coruña. Colaboraron en el control del fuego y, finalizada la misión con éxito, llevaron a cabo el repliegue a la base.

Sin embargo, al poco tiempo fueron nuevamente activados, y se incorporó un tercer avión destacado en la misma base para intervenir en esta ocasión en un incendio declarado en Pantón, Lugo. La jornada concluyó con la toma de los aviones en su base, tras un total de 10 horas y 15 minutos de vuelo y 25 descargas de agua sobre el fuego.

El lunes, los tres aviones fueron activados a primera hora de la mañana para actuar, esta vez, en la localidad lucenses de Ribas de Sil, en plena Ribeira Sacra. Las condiciones de temperatura y el fuerte viento en la zona dispararon la preocupación ante una evolución desfavorable del incendio, que llegó a nivel 2 de riesgo, ante la cercanía a las poblaciones.

Los tres aviones operaron durante todo el día, dividiendo sus actuaciones en dos períodos de más de 4 horas cada uno. Además, por la tarde se les unió un cuarto avión, procedente esta vez de la Base Aérea de Matacán, en Salamanca, que estuvo trabajando toda la tarde para concluir su período a las 21 horas, con toma en su base de origen. Con todo ello, el día concluyó con 29 horas y 55 minutos de vuelo y 56 descargas entre las cuatro aeronaves.