Agentes de la Policía Nacional han recuperado este miércoles dos obras de Picasso y una de Joan Miró que fueron robadas en 2010 de una sala de exposiciones de Málaga. Se trata de los grabados "El búho" y 'Portrait de Famille', de Pablo Ruiz Picasso, y una xilografía en papel, de Joan Miró, pertenecientes a un coleccionista particular que las cedió para su exhibición.
Tras más de tres años de investigaciones, que han llevado a los agentes a efectuar gestiones también en la República Checa, la Policía Nacional detuvo el pasado 18 de abril a uno de los presuntos autores del robo, de origen español. El subdelegado del Gobierno en Málaga, Jorge Hernández Mollar, ha calificado la operación policial de "brillante".
Esta detención condujo a los investigadores hasta los tres grabados que han sido recuperados esta misma mañana en la ciudad de Málaga, según ha indicado Hernández Mollar en rueda de prensa, quien ha felicitado a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado "por que, una vez más, están demostrando que con su profesionalidad, su trabajo y su eficacia se consiguen éxitos como este".
Los agentes han efectuado además dos registros, en la capital malagueña y en Madrid. La operación continúa abierta hasta el total esclarecimiento de los hechos y no desde la Policía Nacional no descartan que se produzcan nuevos arrestos.
El comisario provincial de Málaga, Pedro Garijo Torres, ha destacado por su parte "la constancia y la tenacidad que ha habido en esta investigación por parte del grupo de robos y particularmente por la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV)".
Los primeros indicios apuntaban a que los ladrones de las obras podrían estar relacionados con personas cercanas a la galería en la que desaparecieron, pero la Policía Nacional ha confirmado que el detenido no guarda ninguna relación con el entorno de la galería Apressarte, lugar donde desapareció el cuadro.
Los agentes han indicado además que "la gente que lo hizo sabía lo que estaba haciendo, precisamente por que descolgaron dos obras de Picasso de mucho impacto".
El robo se produjo el 18 de abril de 2010 en la galería anteriormente citada solo diez horas después de que fueran colgadas y cedidas por un coleccionista. Los delincuentes destrozaron dos de los accesos y fueron directamente a la sala donde estaban situadas las obras.
Además, según han indicado los agentes, el ladrón estaba intentado vender las obras a personas con mucho poder adquisitivo aunque debido a dos motivos, la dificultad de desprenderse de ellas en estos momentos por la situación económica actual --ya que son obras muy caras pero que ahora son difíciles de vender--, y la negativa de las personas a las que fueron ofrecidas las piezas a comprarla, le fue imposible desprenderse de ellas.