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100 Burbujas, 100 historias, un centenario | |||
| Retratadas por Iciar Bollain en el spot de Freixenet | |||
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Según Pedro Bonet, jefe de comunicación de Freixenet y miembro de esta familia que celebrará el próximo año su primer centenario, las auténticas protagonistas de su célebre spot de Navidad son y han sido siempre las burbujas, esas chicas que, con desparpajo, dan alegría, humor, amor y mucho aire fresco a este brindis anual. Son burbujas astutas, serias, enamoradizas y con un punto de pícaras que llevan conviviendo la Navidad con los españoles desde hace 40 años. Su nacimiento no fue por generación espontánea. Nacieron porque era preciso, porque a Freixenet le era necesario en aquellos momentos tener algo especial, fuera de serie y poco común que ofrecer en las festividades al españolito medio para que éste tuviera con qué brindar en las grandes festividades y cuando tuviera cualquier cosa que celebrar de manera especial. Leopoldo, Néstor, Luis Leopoldo Pomés, gran artista de la creación fotográfica, y que durante años ha sido el responsable del spot de las burbujas, tenía reuniones de trabajo, siempre en un restaurante como corresponde a este tipo de reuniones, con responsables de Freixenet a las que también acudían Néstor Luján Luis Betónica gurús de la gastronomía de aquella y de todas las épocas, y alrededor de una mesa bien servida cataban diversos caldos y platos de la cocina catalana, y entre los efluvios de platos exquisitos y bebidas que ensalzaban la alegría de vivir llegaron a la decisión de crear una figura que fuera icono y representante de los caldos que Freixenet iba elaborando: fue el nacimiento de la doraba burbuja que todavía perdura y nos saluda e invita cada Navidad. Necesitaban encontrar ese “allure”, ese qué sé yo que siempre tiene “algo” y un día, en medio de una de aquellas reuniones gastronómicas, alguno de ellos, se ignora cual, empezó a gritar: “La burbuja, la burbuja”. Ya tenían lo que querían, “una burbuja”. Aquel descubrimiento, genial e imperecedero descubrimiento, llevó a Pomés a realizar un primer spot en el que aparecieron las burbujas, y luego muchos más con estas chicas que bailaban y se movían por el escenario embutidas en un vestido o mono dorado, a veces una segunda piel de tan apretado como era, con el pelo ensortijado y dorado, o con casquetes, también de color oro, y un maquillaje con el denominador común de esa purpurina en la que al soplar sobre ella inunda las estancias. Todos los años menos en 2007 Durante todos estos años las doradas burbujas han hecho mucho ruido. Siempre han estado ahí, menos en el año 2007, cuando el gran director de cine Martín Scorsesse tomó las riendas del spot para crear una pieza sublime, única, con un fondo de misterio, ¡pero sin las burbujas!, ”La Clave Reserva”, craso error, al año siguiente volvieron y ahí continúan. Este año, apertura de los actos del centenario, la casa pidió a Àlex Martínez de JWT que el spot debería ser muy especial: “Queremos que lo protagonicen todas las burbujas”, ¡todas!. Se presentaron más de 100, el casting inicial lo pasaron 66 y para llegar al centenar se les unieron algunas del pasado año. Lo que ha hecho que la actriz Aida Flix, que ya protagonizó el del 2012, en éste también tenga un papel importante. Iciar Bollain trabajó con facilidad Iciar Bollain aseguró que trabajar con todas ellas, en el Gran Teatre del Liceu, fue fácil: “Venían con mucha ilusión, les gustaba que hubiesen pensado en ellas y en cada una de las burbujas había una historia interesante que contar, lástima que en un spot el tiempo sea tan corto”. La directora de cine que mejor sabe expresar especialmente sentimientos los sentimientos del mundo femenino, ha creado un spot humano, nada nostálgico, tierno y divertido. Ha sabido explicar la historia de este torbellino de mujeres especiales con una gran sensibilidad y expresividad, sin llegar a la tontería. Nada fácil conseguirlo. Por mucho que Iciar haya declarado que “fue fácil” creemos que detrás del spot hay un gran trabajo. Conseguir aunar los esfuerzos de 100 mujeres con sus historias pero para al final hacer ver al público tan sólo una en común es tarea harto difícil de enhebrar. Lo ha conseguido. Para cerrar la noche de la presentación hubo cena, y no fue una cena cualquiera, Freixenet siempre cuida el detalle y el trato humano. Es una empresa, ¡si¡, pero muy por encima del negocio están sus formas, siempre exquisitas. Tres magos de la cocina Nando Jubany, Carles Gaig y Christian Escribà se encargaron de darle sabor Michelín a sus viandas, los caldos de la casa maridaron excepcionalmente con las burbujas que nunca se cansaron de posar en el photo call levantando la copa y celebrando el reencuentro y con las excelentes viandas que los estrellados chefs nos ofrecieron, los aperitivos, la mariscada con un suave escabeche de cava, la pularda asada en el momento y la excelente tarta de En las mesas había muchas vidas que se contaban a sorbo de cava, a ver cómo los de Freixenet superan esto. Detrás de cada una de las “burbujas” de estas históricas burbujas, hay una vibrante historia, un libro pendiente que a nosotros nos gustaría poder escribir algún día después de haber compartido con muchas de ellas el bus que nos llevó y nos trajo de Barcelona a Sant Sadurní. |
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