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El 63% de la comunidad latina viviendo en ese país representa a los mexicanos, muchos de ellos descendientes de padres inmigrantes que llegaron al país en las primeras oleadas migratorias. Mudarse a Los Estados Unidos implica una decisión delicada, por un lado está el sueño americano y por el otro se encuentran los sacrificios y el esfuerzo que envuelve su búsqueda. En las décadas pasadas el procentaje de mexicanos que entraban a la primera potencia económica del mundo eran en su mayoría ciudadanos sin una amplia formación educativa que solo deseaba llegar a trabajar para darle un mejor futuro a sus hijos, por estas primeras oleadas migratorias comenzaron a surgir estereotipos sobre los mexicanos. Incluso actualmente mucha gente asocia a los inmigrantes como personas que llegan a Los Estados Unidos a trabajar como limpia pisos.
La realidad actual da un vuelco enorme a la antigua percepción de la contribución económica de los mexicanos en Los Estados unidos. La generación nueva, hijos o nietos de los primeros inmigrantes que llegaron al país para dejarlo todo por el futuro lo lograron. La mayoría de los descendientes mexicanos están casi igualados al nivel de formación de educación superior que los estadounidenses, además se ha notado un alto interés por los negocios, la bolsa de valores y el emprendimiento. Pero ¿cómo lo han logrado? La perseverancia y la entrega son dos virtudes del mexicano promedio que da todo de sí para sacar adelante a su familia. La fuerza laboral de los latinos mexicanos en edades comprendidas entre los 16 y 18 años de edad es inmensa, admirable y llena de fortaleza. Siguen afrontando la vida al igual que sus padres y abuelos pero con mucho más nivel educativo y aspiracional.
Esta nueva generación es el fruto del trabajo de los primeros, se percibe claramente como los pueblos son capaces de evolucionar y enfrentar los diversos problemas que durante las últimas décadas han afectado a los mexicanos por llegar a Los Estados Unidos con una maleta llena de sueños. Es impresionante lo que la comunidad mexicana e hispana en general está aportándole a la potencia norteamericana donde el 30% del sector agrícola está compuesto por mexicanos y el 20% de presencia en el sector industrial. Muchos mexicanos antes cumplían el papel secundario en una sociedad que no siempre era tan abierta, ahora muchísimos de ellos y sus descendientes han tomado el papel protagónico en diversos sectores. Los mexicanos ya son parte de la cultura estadounidense, ahora tienen su propio espacio donde pueden interactuar llenos de orgullo por emprender en nuevos modelos de negocio, por ocupar altos cargos en diversas empresas influyentes y por ser grandes líderes en su participación en el sistema de educación superior estadounidense.
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