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Ficha técnica
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86- Baloncesto Sevilla: Woodside (5), Penney (17), Berni Rodríguez (2), Porzingis (7), Balvin (2) -cinco inicial--; Urtasun (8), Byars (13), Radicevic (7), Oriola (10), Hernangómez (15) y Gallardo.
60- Río Natura Monbús Obradoiro: Luz (10), Pumprla (3), Corbacho (8), Kleber (9), Triguero (2) --cinco inicial--; Miller (4), Waczynski (10), Cárdenas (-), Giannopoulos (-), Pozas (4) y Nankivil (10).
Parciales: 15-12, 23-21, 17-12 y 31-15
Árbitros: Conde, Manuel y Cardús. Eliminaron por personales al visitante Nankivil.
Incidencias: 27ª jornada de la Liga Endesa 14-15. 6.152 espectadores en el Palacio de los Deportes San Pablo (Sevilla). Antes de comenzar, se guardó un minuto de silencio en memoria del ex jugador del MyWigo Valladolid "Lalo" García. |
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El Baloncesto Sevilla, finalizada la Semana Santa, ha puesto su firma en su definitiva resurrección para luchar por la permanencia, al ganar al Río Natura Monbús Obradoiro por 86-60, en uno de los partidos más firmes de toda la temporada, y el más cómodo a tenor del resultado, con unos arrolladores once minutos finales.
Así, los de la capital de Andalucía, con su octava victoria de la presente Liga Endesa, meten presión al Bruixa D'Or Manresa, antes de su encuentro de mañana en Badalona. El Obradoiro, por su parte, pierde una buena ocasión, tras la derrota del CAI ante el Madrid, de acercarse más a la zona de play-offs.
Gran inicio de los locales
Sabedor de la superior magnitud de lo que se jugaba respecto a su adversario, el equipo verdirrojo comenzó el choque muy concentrado, intenso en defensa y con gran efectividad en el tiro exterior.
Dos triples de Penney -hoy el mejor en anotación, con 17 puntos- y otro más de Porzingis, más otra canasta del ala-pívot letón, dieron a los locales un 11-0 de salida, sin que Obradoiro se enterase aún de qué iba el tema.
Los gallegos vivieron en el primer cuarto básicamente de 5 puntos de un hoy muy gris Corbacho -tres de ellos desde el tiro libre- y otros tantos de Kleber; aunque su activación en defensa tras el tiempo muerto pedido por Moncho Fernández les permitió terminar el primer cuarto bastante cerca (15-12).
Lesión de Giannopoulos
El Baloncesto Sevilla se había llevado varios minutos sin anotar, siendo una canasta bajo aro de Balvin la última producción ofensiva hasta entonces. Pero en los inicios del segundo cuarto, un 2+1 de Hernangómez y un triple de Urtasun les colocaron de nuevo seis arriba (25-19, min 15) antes de que Giannopoulos debiera abandonar el partido.
El alero griego del Obradoiro se lesionó en el tobillo después de una caída bastante fea, y dejó un tanto lastrado a su equipo, en el que Nankivil tomó la responsabilidad ofensiva de los gallegos.
Ocho puntos del alero norteamericano hicieron que los de Santiago de Compostela alcanzaran en el marcador al Baloncesto Sevilla (27-27) en medio del concierto de pito que estaba brindando una muy rigurosa Anna Cardús, que enardeció al cada vez más caliente público de San Pablo con sus más que rigurosas decisiones.
La recta final de la primera mitad fue más favorable para los sevillanos, gracias a su defensa y a la casta de Oriola. Sus seis puntos, los dos últimos con una canasta bajo aro casi sobre la bocina, colocaron el 38-33, cinco puntos de renta con los que se fueron al descanso los sevillanos.
El equilibrio, aunque siempre con ventaja para los locales, se mantuvo hasta la recta final del tercer cuarto, en el que Moncho Fernández optó por dar unos minutos a su tercer base, el onubense canterano del Baloncesto Sevilla Fran Cárdenas, al que había venido a ver un buen número de animosos paisanos.
Fiesta sevillana
Un triple de Byars y una canasta de Radicevic con la que acabó el tercer período (55-45) dieron comienzo a la fiesta definitiva de los locales, que arrasaron en el cuarto final a un adversario que se quedó sin ideas ante la comunión entre jugadores y público local.
El cuarto y último triple de Penney (62-47, min 32) fue la confirmación definitiva de que el partido se había roto, y desde ese instante la ventaja local no dejó de subir hasta llegar a los 26 con los que sonó la última bocina, gracias a un triple de Hernangómez que fue la muestra más clara de cómo se estaba gustando el Baloncesto Sevilla en los minutos postreros.
Así pues, todo alegría al final de la primera semana grande de una ciudad que ya espera la Feria de Abril, y en la que se ha completado en el presente fin de semana un triplete deportivo muy poco habitual por estos lares en el presente curso: Betis, Sevilla y, esta misma tarde, el equipo de baloncesto que, esperando ya al Baskonia el próximo sábado, prestará antes atención a lo que haga mañana La Bruixa D'Or en el Olímpico de Badalona. Y el Obradoiro, a hacer borrón y a esperar otra ocasión para ver si puede tener esperanzas de jugar la fase por el título.
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