MADRID, 6 (EUROPA PRESS) River Plate es el nuevo campeón de la Copa Libertadores después de asestar un contundente 3-0 al Tigres UANL, de modo que los 'millonarios' se hicieron con su tercer título continental 19 años después del último, evitando que viajase por primera vez a México gracias a los goles de Lucas Alario, Carlos Sánchez y Funes Mori en el Estadio Monumental, de nuevo talismán para los argentinos.
Sin Marcelo Gallardo en el banquillo, expulsado en la ida (0-0), el espíritu del técnico, presente como jugador en 1996 como futbolista también en el Monumental junto a los Enzo Francescoli (ahora director deportivo), Hernán Crespo, Ariel 'Burrito' Ortega o Germán 'Mono' Burgos, se hizo notar en el césped del coliseo franjirrojo, donde los suyos no dieron opciones.
Al igual que en el encuentro de ida en el Estadio Universitario, donde los bonaerenses se salieron con la suya al firmar unas tablas sin goles pese a la superioridad azteca, el plan del 'Muñeco' de nuevo salió a la perfección para certificar el dominio continental de los suyos, los primeros de América que alzan en una misma temporada los tres grandes trofeos: Libertadores y Copa y Recopa Sudamericana.
Si hace una semana la maraña defensiva que maniató al arsenal ofensivo de los mexicanos, que con André-Pierre Gignac, Rafael Sobís, Javier Aquino o Jürgen Damm no han sido capaces de batir a Marcelo Barovero en 180 minutos, en esta ocasión se sumó un gol en el minuto 44 de la primera mitad que noqueó a Tigres bajo una noche lluviosa.
Los de Nuevo León fueron de nuevo dominadores del balón, pero al contrario que los argentinos no fueron nada certeros. En la primera gran ocasión de los locales, Lucas Alario cabeceó a la red un balón servido tras una sorprendente subida de Leo Vanigioni desde la izquierda, en lo que fue todo un mazazo psicológico para los aztecas.
Sin embargo, el cambio en el electrónico no cambió lo visto sobre el tapete, con Tigres apretando para conseguir el empate, pero River aguantó bien las embestidas visitantes de Aquino y Gignac de cabeza, así como una nueva ocasión de un Damm que desplegó un gran juego, pero al que se le volvió a hacer la portería pequeña.
El desacierto mexicano se cobró además un duro final, pues una acción aparentemente inofensiva en su costado izquierdo acabó en penalti de Aquino sobre Carlos Sánchez, que fusiló a Nahuel Guzmán desde los once metros haciendo que el rival izase la bandera blanca en el minuto 74.
Con el adversario rendido, Funes Mori desató el diluvio cuatro minutos después en un saque de esquina, decidiendo la gloria para un River Plate al que rescató en primera fase el propio Tigres con una victoria a Juan Aurich.
Los de Gallardo tratarán de completar la gesta en la Copa Mundial de Clubes de la FIFA, para la que ya estaba clasificado (los equipos mexicanos optan al torneo por la CONCACAF), y donde el FC Barcelona será el mayor rival de los herederos de 'La Banda' del 96, con los nombres de Cavenaghi, Barovero, Bertolo, Kranevitter, Alario, Maidana, 'Lucho' González, Ponzio o Saviola ya escritos con letras de oro en la historia.
|