Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Salud
Etiquetas | Enfermedad | Hígado | Afectados | Prevención

La enfermedad del hígado graso afecta al 25% de los españoles

Se trata de una enfermedad crónica y silenciosa
Francisco Acedo
sábado, 29 de enero de 2022, 11:44 h (CET)

El estilo de vida actual y la dieta poco saludable están conduciendo al aumento de enfermedades no transmisibles como el hígado graso no asociado al consumo de alcohol (NAFLD, por sus siglas en inglés). La enfermedad del hígado graso afecta al 25% de los españoles y se prevé un incremento de su incidencia en los próximos años asociado al también aumento de la obesidad y el síndrome metabólico.


En concreto, se trata de una enfermedad crónica y silenciosa en la que la grasa se acumula progresivamente en el interior del hígado a lo largo de los años en cantidades anormalmente altas. Si bien este depósito de grasa no provoca ningún síntoma, puede conducir a enfermedades inflamatorias más graves como hepatitis, fibrosis hepática, cirrosis o cáncer de hígado.


“Esta enfermedad es la principal causa de trasplante hepático en Estados Unidos, mientras que en España es la segunda causa y subiendo”, asegura Rocío Aller de la Fuente, directora científica del Instituto de Endocrinología y Nutrición de Valladolid (IENVA) y miembro de la Asociación Española para el Estudio del Hígado (AEEH). “Además, es una de las causas más frecuentes de cáncer de hígado, incluso en pacientes que no tienen cirrosis”, añade.


Cabe recordar que la cirrosis hepática es el principal factor de riesgo para desarrollar carcinoma hepatocelular (el tipo de cáncer de hígado más frecuente).


Alimentación, sedentarismo y edad


Los factores asociados al NAFLD están relacionados con el consumo de alcohol y factores genéticos y ambientales como la edad, sexo, hábitos dietéticos y estado nutricional. “La NAFLD es más frecuente en personas con obesidad, diabetes tipo 2 (DM2), síndrome metabólico, hipertensión, dislipemia y obesidad central...”, enumera Aller. Pero, fundamentalmente, está determinada por el estilo de vida actual, caracterizado por dieta poco saludable, falta de ejercicio físico y hábitos muy sedentarios.


La prevalencia de la enfermedad está aumentando de forma global en las últimas décadas en paralelo al incremento progresivo de la obesidad y la diabetes en la población general. El perfil de estos pacientes son personas de mediana edad, “dado que la edad es un factor de riesgo al tener más tiempo para progresar la enfermedad”, continúa la especialista.


Sin embargo, apunta la experta, también hay pacientes que pueden desarrollar la enfermedad sin tener sobrepeso. En este caso, debido a factores genéticos o una dieta poco saludable. “A largo plazo, produce una inflamación crónica en el cuerpo y, al final, una inflamación en el hígado”, concluye Aller.


Prevención


La intervención dietética basada en la dieta mediterránea y el cambio del estilo de vida constituyen el pilar del tratamiento de la NAFLD, ya que no existe ningún fármaco específico. Únicamente existen tratamientos para sus factores de riesgo: diabetes, síndrome metabólico, y colesterol alto. Sin embargo, la manera de prevenir la NAFLD está clara y es un aspecto clave. En concreto, “cambiar el tipo de dieta, utilizando una con patrón mediterráneo (rica en frutas, verduras, pescado azul, aceite de oliva, cereales enteros, etc.); evitar azúcares simples, bebidas azucaradas, la fructosa o grasas saturadas, hacer ejercicio físico —tanto aeróbico como anaeróbico— y evitar el sedentarismo”, puntualiza.


A falta de tratamiento, la dieta es muy eficaz. “Se ha demostrado que un 10 por ciento de pérdida de peso reduce de forma importante la fibrosis del hígado, que es la fase más avanzada de la enfermedad”, señala la especialista. Asimismo, es importante prevenir el sobrepeso y la obesidad desde la edad infantil porque “un 30 por ciento de los niños padecen obesidad”, añade.


Y es que se trata de una enfermedad relativamente reciente debida a los patrones alimenticios actuales. “Ahora nuestra alimentación está llena de alimentos procesados y ultraprocesados, que pueden producir cambios en el genoma y desembocar no solo enesta enfermedad, sino en varios tipos de cáncer”, advierte.

Noticias relacionadas

La cuestión de una nutrición adecuada adquiere especial relevancia en el mundo moderno, donde el estrés constante, los refrigerios rápidos y la falta de tiempo a menudo tienen un impacto negativo en nuestro bienestar. En este artículo, veremos cinco reglas simples que le ayudarán a crear una dieta saludable y equilibrada que promueve la longevidad.

Las oficinas modernas están diseñadas para ser funcionales, pero esto no siempre beneficia la salud de quienes trabajan en ellas. Es común el sedentarismo y la falta de actividad física, lo que puede generar dolor muscular, fatiga visual y estrés emocional. Es importante ser conscientes de los riesgos asociados a las largas jornadas de trabajo en esas condiciones y cómo, a través de pequeños cambios en nuestra vida, podemos mejorar la salud y bienestar general.

El cáncer de ovario es una de las enfermedades ginecológicas más complejas de detectar. La Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) estima que este año se diagnosticarán aproximadamente 3.716 nuevos casos de cáncer de ovario en España. La ausencia de síntomas claros en las primeras fases provoca que aproximadamente el 70% de las pacientes son diagnosticadas cuando la enfermedad ya se encuentra en fases avanzadas, lo que complica su tratamiento.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto