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Opinión
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COB: 70 años

La Central Obrera de Bolivia es la más influyente y poderosa de las Américas
Isaac Bigio
sábado, 16 de abril de 2022, 12:22 h (CET)

El 17 de abril de 1952 nació la Central Obrera Boliviana (COB). Esta se fundó a pocos días de la victoria de los fabriles y mineros armados en la insurrección popular urbana del 9-11 de abril. Ninguna otra confederación laboral en la historia de las Américas ha adquirido tanta convocatoria e influencia en la vida de su propia nación como la COB. Estudiar su historia ha de ayudar a educar a muchos en posibles ejemplos a adoptar.


Bolivia antes de 1952


Hace 70 años Bolivia apenas tenía 3 millones de habitantes, la inmensa mayoría de los cuales no eran asalariados ni vivían en sus poco pobladas ciudades. Entonces, el eje de su economía lo constituían las minas (especialmente de estaño y plata), las cuales estaban concentradas en 3 grandes grupos (Patino, Aramayo y Hotchild, el cual hoy tiene también minas en Perú).


La COB nació teniendo como su columna vertebral a la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB), la cual se había conformado el 11 de junio de 1944, a pocos meses del golpe nacionalista del joven mayor Gualberto Villarroel (quien tomó el poder el 20 de diciembre de 1943 a la edad de 35 años). Retomando la línea nacionalista de los anteriores gobiernos "socialistas" militares de 1936-39, Villarroel quiso implementar reformas laborales y agrarias, pero era petardeado por la "rosca" (oligarquía minera) con sus medios. Buscando generar una contrapeso contra esta, Villarroel alentó a los mineros a sindicalizarse, los mismos que rápidamente tomarían un camino independiente.


El 21 de julio de 1946, una alianza entre los partidarios de Washington y de Moscú movilizó a multitudes en La Paz hasta lograr linchar a Villarroel de un farol en la plaza de armas. Como Truman y Stalin habían vencido juntos en la II Guerra Mundial, ambos instruyeron a sus allegados a derrocar a los nacionalistas acusados de haber coqueteado con Hitler, cosa que lograron en Bolivia, pero no en la Argentina de Perón.


Tras ello se instauró un sexenio de derecha en el cual se sucedieron varios gobiernos al servicio de la "rosca". Al inicio con ellos estuvieron Gustavo Navarro (alias "Tristán Marof" en honor a los peruanos Flora Tristán y José Carlos Mariátegui), quien había sido el fundador del partido más antiguo de Bolivia (el trotskista Partido Obrero Revolucionario, POR) y el poderoso y stalinista Partido de Izquierda Revolucionaria (PIR). Estas fuerzas se quemaron en dicho periodo. Así permitieron que el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), el cual gobernó con Villarroel y tuvo orígenes filo-nazis, se masificase capitalizando el desprestigio del "sexenio rosquero".


A unas 15 semanas del derrocamiento de Villarroel, el congreso minero en Pulacayo aprobó las tesis de la FSTMB, muy inspiradas en el Programa de Transición de la IV Internacional fundada por León Trotzky, 8 años atrás. En estas se proponía la expropiación de tierras, industrias y minas para ponerlas en manos de sus trabajadores y que el "Estado burgués" con sus FFAA fuese derrocado por milicias obreras y campesinas y por una revolución y dictadura proletarias. Los medios de la "rosca" inmediatamente lo publicaron para denunciar al "extremismo" de los mineros, con lo cual crearon un efecto contrapuesto: la popularización de sus propuestas.


El autor intelectual de dicha tesis fue el joven Guillermo Lora y el nuevo Secretario Ejecutivo de la FSTMB Juan Lechín, ambos militantes del POR, aunque Lechín (quien encabezaría a dicha federación y a la COB hasta 1987) se incorporó luego al MNR y fundó nuevos movimientos.


Mientras la izquierda urbana se movió en dirección a cogobernar con la "rosca" democratizante, los mineros giraron en la dirección opuesta y generaron un "bloque parlamentario".


El 6 de mayo de 1951 se dieron las elecciones generales donde, pese a que solamente sufragaron 126 mil electores letrados (la mayoría analfabeta carecía de derechos electorales), el MNR con el exministro de Villarroel, Víctor Paz Estenssoro, se impuso con el 42.92% de los votos. La derecha no quiso aceptar su derrota y Mamerto Urriolagoitia hizo un autogolpe anulando esos comicios. Once meses después, el 9 de abril, se produjo un golpe para querer llevar al poder a Paz. Y, cuando este estaba fracasando, los fabriles, mineros y policías tomaron la Paz y Oruro, desarmando a las FFAA y llevando a Paz a palacio.


Revolución


Al calor de los combates callejeros se desarrollaron las milicias obreras y campesinas que habían sido planteadas en las tesis de la FSTMB. Esta última se tornó muy poderosa, y en torno a ella y a numerosos gremios de otros sectores se creó la COB.


Se suponía que la COB era oficialmente un sindicato, pero en los hechos fue una suerte de poder dual o un "parlamento de los trabajadores". Esta logró que el nuevo Gobierno nacionalice a las 3 grandes familias mineras y decrete una forma de "control obrero" sobre estas. La insurrección urbana abrió las puertas para una serie de levantamientos campesinos, los mismos que impusieron la expropiación de latifundistas y gamonales, así como una distribución de tierras y reforma agraria más radicales que la de la China de Mao. Además, se le dio el voto a la mayoría iletrada del país, algo que el vecino Perú solo lo daría 28 años después (en 1980).


Dentro de sus funciones, la COB impulsaba comités para distribuir alimentos o patrullas para impedir saqueos y poner orden. Entonces era usual ver grandes marchas de trabajadores con sus fusiles al hombro. Hasta hoy en cada movilización minera se hacen detonar pequeños cartuchos de dinamita para hacer bulla y mostrar que sus acciones son pacíficas, pero que ellos están dispuestos a todo para defenderse.


Al inicio de la revolución de 1952 se dio un debate en la COB al respecto de cuál debiera ser su rol. La mayoría optó por la tesis de cogobernar con el MNR, buscando imponerle ministros más izquierdistas. Quedaron aislados quienes sostuvieron que se debería haber adoptado la táctica de Lenin ante los consejos obreros rusos de 1917 (soviets) planteando no apoyar al gobierno provisional y pidiendo todo el poder a estos organismos.


EEUU hábilmente, en vez de querer derrocar a Paz, logró cooptarlo y encaminar a la revolución para encuadrarse dentro del "campo libre" que apoyó a Washington contra Moscú. Un tercio de siglo después de que Paz se montó sobre la revolución más radical de la historia sudamericana, él organizó el más radical shock privatizador y thatcherista que habían conocido las Américas después del de Augusto Pinochet en Chile.


El inicial cogobierno MNR-COB dio paso a todo el poder al MNR. Una sociedad no puede tener dos cabezas y una de ellas a la postre debe imponerse. Hernán Siles pasó de ser el vicepresidente de Bolivia a ser su nuevo Presidente en 1956-60 y en su mandato la COB fue perdiendo poderes.

En 1960-64 Paz vuelve a la Presidencia teniendo como su vicepresidente a Lechín, el jefe de la COB. Para las elecciones generales de 1964, Lechín reclamó que le tocaba el turno para ser el candidato oficial del MNR, pero este acordó hacer reelegir a Paz, pero con un nuevo compañero de plancha, el general René Barrientos, el mismo que lo derrocó a menos de 2 meses de haberse posesionado el 6 de agosto 1964.


Desde el 5 de noviembre de 1964 al 27 de abril de 1969 Barrientos estableció una dictadura castrense. Esta persiguió a la COB y a la izquierda, y mató al Che Guevara aplastando su guerrilla. Barrientos se autoproclamó como el "general del pueblo" y logró contar con el apoyo de los nuevos micro-propietarios campesinos a quienes utilizó contra los obreros.


Asamblea Popular


Tras el misterioso accidente del helicóptero presidencial en el que falleció Barrientos, el poder pasa a su vicepresidente Adolfo Siles, el cual termina derrocado por el general Alfredo Ovando, quien gobernó a Bolivia del 26 de septiembre de 1969 al 7 de octubre de 1970. Ovando quiso tomar un curso similar al de su homólogo peruano Juan Velasco y por ello nacionalizó el petróleo. Tras un golpe fallido contra Ovando, en el cual la COB dirigió la resistencia, llega a la Presidencia el general Juan José Torres el 7 de octubre de 1970.


Entonces, la iniciativa la tenían las organizaciones sindicales, campesinas y estudiantiles, para lo cual Torres propuso un cogobierno a la COB, el cual no prosperó. En vez de ello, la COB pasó a crear el primero de junio de 1971 la "Asamblea del Pueblo" que funcionaba en el Congreso y cuyo programa fueron las tesis de Pulacayo que postulaba la instauración de un "gobierno obrero y campesino".

La Asamblea Popular se convirtió en un verdadero parlamento de las organizaciones laborales y sociales, el mismo que se perfilaba como poder alterno. Bajo su presión, el Gobierno nacionalizó otras minas, incrementó el presupuesto universitario, expulsó a los "cuerpos de paz" de EEUU, originó el Banco del Estado e impulsó junto con el Perú el movimiento no alineado.


EEUU decidió boicotear a ese Gobierno y preparar su derrocamiento. A 2 meses y 21 días de que se fundó la Asamblea Popular, el General Hugo Bánzer impone un golpe sangriento en alianza con el MNR de Paz y la Falange. La nueva dictadura militar en sus 7 años de duración persiguió brutalmente a la COB y a la izquierda. En 1976 Torres fue asesinado en su exilio en Argentina.


La democratización


Una huelga de hambre de mujeres impulsó un ascenso de huelgas que acabó obligando a Bánzer a convocar elecciones. En 1978, 79 y 80 se dieron comicios generales, los cuales no conducían a ningún Gobierno estable, pues el Congreso era quien terminaba seleccionando al Presidente (en vista de que ningún candidato lograba una fuerte votación), el mismo que acababa siendo depuesto por otro cuartelazo.


Del 1 al 16 de noviembre 1979 el coronel Alfredo Natush se convirtió en dictador militar derrocando al Gobierno civil de Walter Guevara (quien solo había estado 85 días en Palacio), pero su golpe condujo a una fuerte resistencia de la COB, la cual a través de una huelga general logró su caída. Tras dejar muchos muertos en los enfrentamientos callejeros, Natush dejó la Presidencia a Lidia Gueiler, la primera Presidenta de Bolivia, la cual provenía del partido de Lechín y tenía un largo historial en la COB.


Durante el bienio de 1978-80 se habían dado 3 elecciones presidenciales, en todas las cuales había obtenido el primer puesto Hernán Siles del MNR de Izquierda, quien había creado la Unidad Democrática y Popular (UDP) con el Movimiento de Izquierda Revolucionario (MIR) y el Partido Comunista de Bolivia (PCB), mientras que en el segundo lugar quedó Paz del MNR histórico. En cada elección la brecha entre Siles y Paz se ampliaba hasta que en la del 29 de junio de 1980 el primero obtuvo 38.74% y el segundo 20.15%.


Ante la eventualidad de que el Gobierno pasase de la izquierdista Gueiler a la UDP, el General Luis García Meza dio otro cuartelazo sanguinario el 17 de julio de 1980. Desde esa fecha al 10 de octubre se dio un bienio militar donde hubo 4 distintos Gobiernos castrenses. Como la situación se tornaba explosiva con tantas marchas y huelgas, los militares decidieron entregarle el poder a la UDP.

Desde el 10 de octubre de 1982 al 6 de agosto de 1985, Siles hizo un gobierno con ministros que se reclamaban de distintas alas de la izquierda y hasta comunistas. Su administración no podía contentar ni a la derecha ni a los sindicatos. La primera estaba furiosa por las constantes concesiones hechas a la COB y la hiperinflación, mientras que dentro de los obreros fue ganando la posición de romper con el Gobierno porque este no otorgaba un salario mínimo vital que se reajustara de acuerdo a la inflación (la cual llegó a ser de 4 dígitos).


El 4 de marzo de 1985, más de 10 mil mineros bajaron a La Paz, a la cual virtualmente tomaron. Todos los días marchaban en sus calles. Incluso, llegaron a impedir al Presidente poder desplazarse desde su casa a palacio. Su consigna central era "obreros al poder".


Esto último no pasó. Más bien, la izquierda se desacreditó al haber estado en un gobierno donde había tanta inestabilidad de precios. Siles tuvo que recortar su mandato por un año y adelantar las elecciones, en las cuales fue la derecha quien sacó provecho del desgaste de la izquierda.


Neoliberalismo


El 6 de agosto de 1985 Paz vuelve a la Presidencia. Pese a que había quedado segundo en las urnas, el Congreso decidió votar por él para impedir que el exdictador Bánzer, quien le había ganado por poco, llegue a palacio.


Sin embargo, Paz impuso un shock monetarista en el que cuál se congelaron salarios y se elevaron en horas los precios hasta 30 veces. Un quinquenio después pasaría algo similar en Perú, donde Alberto Fujimori, el candidato que supuestamente era hostil a la derecha, hizo un ajuste peor que el que su rival Mario Vargas llosa había inicialmente propuesto.


Ante tal ataque, la COB organizó una huelga general, la cual, si bien fue acatada por mineros y fabriles, no contó con la simpatía de los pequeños comerciantes y productores, quienes creían que el paquetazo había estabilizado los precios. Tras la derrota de septiembre 1985 se vino la "marcha por la vida" que recorrió más de 200 kilómetros a 4 kilómetros de altura sobre el nivel del mar partiendo de Oruro hacia La Paz. Pese al frío invernal y la sequía, al menos 10 mil mineros y otros sectores realizaron esta caminata que fue detenida poco antes de llegar a la sede del Gobierno.


Los dirigentes de la COB decidieron levantar la medida aduciendo que se debía evitar una nueva masacre. A partir de entonces se consolida el cierre de minas, el despido masivo de trabajadores y la terciarización de muchas empresas.


Dentro de la COB se daba un constante debate. El ala de Lechín siempre fue pragmática y trataba de conciliar entre todos los polos. El sector del PCB siempre se mostraba "realista" y dispuesto a cogobernar o pactar con distintos presidentes. El ala radical liderada por el principal sindicato minero (Siglo XX) cuestionaba a Lechín y al otro campo de ser una burocracia aburguesada más interesada en sus propios privilegios que en las necesidades de las bases.


La derrota de la COB en 1986 debilitó a esta profundamente. De allí en adelante otros sectores no obreros tomarían la iniciativa, especialmente los campesinos y los barrios populares. Muchos mineros, al perder sus empleos, se fueron al agro o a ser pequeños propietarios en barriadas donde empezaron a organizar sindicatos o juntas vecinales.


Evo Morales surge de las luchas de los campesinos productores de coca que defienden esta. En la lucha contra la erradicación de esta hoja, contra la privatización del agua y contra la entrega del gas a empresarios chilenos es que se dan una serie de movimientos de masas en los que convergen huelgas y bloqueos en las ciudades y carreteras. La efectividad de estos últimos se había demostrado en 1980, cuando irrumpió el nuevo sindicalismo campesino que reivindicaba a Túpac Katari y empezaba a emplear la wiphala (la bandera de los 7 colores que hoy simboliza a la resistencia amerindia).


Desde 1985 al 2005 hay 2 décadas dominadas por Presidentes neoliberales, ninguno de los cuales había tenido una fuerte votación. En 1989-93 Víctor Paz Zamora del MIR llega a palacio, pese a haber quedado en las urnas con menos del 20% de los votos, gracias al apoyo de Bánzer, quien le impone su programa y con quien juntos decretan un estado de sitio contra huelgas de la COB. En 1993-97 se forma el primer Gobierno de Gonzalo Sánchez de Losada del MNR, un multimillonario con muchas minas y acento gringo quien había sido el ministro de economía del shock de 1985. En 1997 Bánzer llega en su sexto intento electoral a la presidencia, pero muere en 2001, siendo remplazado por Tuto Quiroga. En 2002 Sánchez vuelve a palacio, aunque dura poco debido a un alzamiento de la COB y pobladores de El Alto. Su vicepresidente Carlos Mesa le remplaza, pero tampoco acaba su mandato y al final el Presidente de la Corte Suprema asume el poder para convocar elecciones.


Esta extrema inestabilidad fue causada por las luchas sociales en torno al agua y el gas para la población. El MNR y el MIR, al igual que el APRA peruana, habían pasado de ser partidos que se reclamaban marxistas, antiimperialista o revolucionarios, a ser una de las tantas cúpulas de la derecha empresarial.


El vacío dejado por ellos fue llenado por el grupo de dirigentes campesinos y sindicales de Evo Morales, quien capturó la sigla del Movimiento Al Socialismo Unzaguista (una escisión de la Falange) para quitarle su referencia final a Unzaga de la Vega, el líder histórico del fascismo altoperuano. El MAS devino en un partido de masas.


COB y MAS


Desde el 2005 hasta hoy, el MAS ha gobernado Bolivia (salvo un año de interrupción dictatorial en 2019-20). Morales se convirtió en el primer presidente boliviano en ser reelecto para 4 mandatos consecutivos. Su última reelección generó protestas en un pueblo que no es partidario de tantas de estas, las mismas que fueron capitalizadas por la derecha clerical que impuso la primera dictadura femenina de las Américas, la de Jeanine Añez (2019-20).


El MAS cambió el modelo neoliberal, por lo que este llama un "capitalismo andino amazónico", en el cual se privilegiaba un Estado fuerte e interventor en la economía, el mismo que debiera regular el mercado y atraer capitales. El gas y otras industrias claves fueron nacionalizados, mientras que la DEA y la embajada de EEUU fueron expulsadas del país. A fin de consolidar su modelo, el MAS convocó a una constituyente, la cual refundó a Bolivia como un "Estado plurinacional" que reconoce más de 30 idiomas indígenas como oficiales.


A fin de derrocar al MAS se dieron numerosos intentos de la derecha, sobre todo aquella que sigue azuzando el regionalismo (y hasta el separatismo) de las tierras bajas del oriente.


En este proceso se dio un debate en la COB. Un sector ha propuesto integrarse al oficialismo aduciendo que hay que estar con el "proceso de cambios". Otro plantea mantener cierta independencia. El POR, muy fuerte en los maestros, caracteriza al MAS como la "nueva derecha burguesa", por lo que justifica haber hecho "cabildos" junto a todos los derechistas que quisieron sacar y quieren seguir echando del poder al evismo. Hay otras corrientes de izquierda que creen que hay que criticar al MAS, pero defenderlo frente a la derecha, al mismo tiempo que llaman que esta se convierta en una alternativa de poder. Finalmente, hay militantes de las fuerzas conservadoras.


Esta variedad de corrientes podrá sorprender en países donde hay muchas centrales sindicales, las cuales se dividen de acuerdo a sus afiliaciones partidarias. Algo que siempre ha distinguido a la COB es que esta ha logrado mantenerse siempre como la única confederación sindical, para lo cual se permiten congresos, plenarios y asambleas pluralistas.


Desde su formación hasta hoy siempre ha habido una serie de confrontaciones internas. Desde su fundación a mediados de los cuarentas hasta finales de los ochentas la FSTMB tuvo como su caudillo casi vitalicio a Lechín, quien dominó al poderoso movimiento obrero boliviano durante casi medio siglo. Sus simpatizantes se jactaban de sus grandes cualidades para poder amalgamar a tantas corrientes internas y negociar pliegos de reclamos. Empero, sus críticos cuestionaban sus trajes y formas de vida lujosas, el que haya creado una "burocracia sindical" y el que se halla "aburguesado".


Otro debate importante ha sido en torno al rol que la COB debiera jugar. Durante la mayor parte de su historia esta fue regida por direcciones que apuntaban a que esta funcione como un ente sindical que apoye o integre gobiernos nacionalistas, mientras que en sus tesis programáticas aún se plantea que luche por un "gobierno obrero campesino". Esto último ha hecho que en momentos en los que la COB ha logrado con sus marchas y huelgas generales poder paralizar al país y tumbarse golpes y gobiernos, diversos sectores pidan que esta tome el poder o desarrollen cabildos o asambleas populares para lograr ello.


Con todas sus limitaciones, la COB se ha convertido en el principal propulsor de marchas, huelgas y bloqueos con los cuales se han logrado echar a varios gobiernos y juntas militares, así como mejorar condiciones sociales y nacionalizar recursos. Tras los cierres y despidos masivos post-1985 han surgido nuevos sectores, particularmente en el agro y en las barriadas urbanas. Si bien la base asalariada ha perdido cierto peso, la COB sigue siendo la central sindical nacional más influyente del hemisferio occidental.

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