| ||||||||||||||||||||||
Córdoba y Sevilla, un paseo por la España antigua | |||
Si aún no sabes por qué destino decantarte, visita estas dos ciudades de Andalucía y trasládate a otro tiempo durante tus vacaciones | |||
| |||
A la hora de planificar un viaje es importante tener claro qué ciudades, monumentos y lugares se quieren visitar, para no quedarnos sin visitar alguno de estos sitios. Existen multitud de páginas web y blogs sobre viajes que aconsejan sobre estos aspectos. Una de estas páginas es AnsiaViajera, donde ofrecen publicaciones interesantes sobre varios destinos de España y África. Veamos a continuación sus recomendaciones sobre dos de las grandes ciudades de Andalucía: Córdoba y Sevilla. Córdoba, la capital del Califato Omeya Tanto Córdoba como Sevilla fueron dos ciudades de gran importancia durante la estancia de los musulmanes en la Península desde el año 711 hasta el 1492. Con la instauración del Califato Independiente, que se separaba del Califato de Damasco, en el año 929, Córdoba se convertía en la capital del Imperio Islámico de la Península Ibérica. Muestra de ello es su conservada arquitectura y las calles de la ciudad, en la que a día de hoy, aún se respiran los aires antiguos de aquella civilización. Sin embargo, en nuestra visita a esta ciudad podemos remontarnos a siglos antes. Cerca de la plaza de Gonzalo Fernández de Córdoba, situada en el centro del casco antiguo, se encuentran al aire libre las once columnas de un templo romano del siglo I d. C. Si sientes una gran pasión por esta civilización, tampoco puedes dejar de visitar el Puente Romano, que conecta con la Torre de la Calahorra y el Anfiteatro. La principal atracción turística de Córdoba es, sin duda alguna, la Mezquita-Catedral. Comenzada a construir en el año 784 y convertida en catedral en 1238, su interior es una mezcla de las dos religiones de la península del momento. Nada más entrar al recinto encontrarás el famoso Patio de los Naranjos, llamado así por los árboles que adornan este espacio. En su interior podrás contemplar la evolución de la arquitectura islámica y su grandeza, ya que en su tiempo, fue la segunda mezquita más grande del mundo después de La Meca. En el centro de la Mezquita-Catedral se sitúa el altar y el coro, una construcción de madera y otros ricos materiales, junto al retablo y el órgano del Evangelio, elementos cuya disposición central y tamaño sorprenden a todos los visitantes. En este edificio sagrado reposan los restos de personajes ilustres de la ciudad, entre los que destaca el poeta barroco Luis de Góngora, homenajeado por toda la ciudad, con una estatua en la Plaza de la Trinidad y una placa con su soneto dedicado al Guadalquivir a orillas de este río, junto a la Puerta del Puente. No podemos perdernos el Museo Arqueológico, donde se conservan restos de excavaciones que datan desde la Prehistoria hasta la Edad Media; pasear por la judería y visitar la Sinagoga; pasear en torno a su muralla y visitar sus patios; y acceder al Alcázar de los Reyes Cristianos y su jardín, que ofrece un paseo con espectáculo nocturno de sus fuentes. Sevilla, las taifas y el Cristianismo Cuando se fragmentó el Califato, los dominios musulmanes se dividieron en 39 taifas. Entre ellas, destacó Sevilla, ciudad que logró un gran desarrollo con la llegada de los Reinos Cristianos. Sin duda alguna, no se puede dejar de visitar la gran Catedral de Sevilla, una construcción donde se mezclan los estilos almohade, gótico tardío, renacentista y barroco. En su interior se encuentran los restos mortales de Cristóbal Colón y los reyes de Castilla Pedro I, Fernando III y Alfonso. Para tener una visión panorámica de Sevilla, se recomienda subir a su torre, la famosa Giralda. El Real Alcázar es otro destino que no puedes perderte, con estancias y salones suntuosos, con ricos alfarjes y sus jardines. Otro gran monumento es la Plaza de España, edificación que conmemora la historia del país en torno a una edición en una plaza circular. Si aún no sabes por qué destino decantarte, visita estas dos ciudades de Andalucía y trasládate a otro tiempo durante tus vacaciones. |
Estambul, puente entre Oriente y Occidente y Europa y Asia, ha sido desde su fundación capital de tres imperios —el romano, el bizantino y el otomano— con tres diferentes denominaciones: Constantinopla, Bizancio y Estambul, lo que significa que ha protagonizado trascendentes episodios históricos y ha sido amalgama de diferentes culturas.
Trece semanas puede ser mucho o poco tiempo, de acuerdo a una gran cantidad de variables. Frente a las catástrofes naturales quisiéramos que todo avanzara más rápido, que se restableciera el orden de las cosas, encontráramos el sentido a la nueva vida prontamente; pero la reconstrucción es un terreno movedizo, aún lleno de lodo, con flashes de las imágenes más cruentas que se repiten en la memoria y el peligro de la burocracia.
Han pasado tres meses desde la terrible noticia de las inundaciones de la DANA en la Comunidad Valenciana. Sin olvidar que otras comunidades autónomas también sufrieron daños y pérdidas. Hemos vivido este tiempo - algunos desde lejos y otros más cerca - observando fotos, leyendo historias de pérdidas humanas y materiales, sorteando pronósticos de la reconstrucción del tejido social... La historia sobre esta terrible catástrofe se sigue escribiendo.
|