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Ficha técnica |
70- Blancos de Rueda: Dumas (9), Robinson (12), Seawright (3), Martín (13), Touré (10) -cinco inicial-, Diego García (6), Uriz (4), Anagonye (2), Zamora (11) y López (-).
89- Gran Canaria 2014: Bellas (10), Haynes (35), Beirán (3), Nelson (12), Savané (6) -cinco inicial-, Palacios (9), Rey (6), Santana (-), Bramos (7), Tucker (-) y Green (1).
Parciales: 14-31, 17-19, 15-15 y 24-25
Árbitro: Hierrezuelo, Guirao y Cardús. Eliminaron por cinco faltas personales a Rey (min.38), del Gran Canaria 2014, y a Touré (min.38), del Blancos de Rueda..
Incidencias: Encuentro correspondiente a la duodécima jornada de Liga Endesa, disputado en el pabellón Pisuerga ante 4.000 espectadores. |
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El cuadro vallisoletano volvió a perder este domingo en Pisuerga acusado por los errores tanto en defensa como en ataque. Su rival, que venció por primera vez a domicilio, llevó la manija del encuentro durante todo el partido y prácticamente lo dejó sentenciado en el primer cuarto.
Los vallisoletanos quería dar un paso adelante frente a los canarios en su lucha por la permanencia, después de quedarse colistas en solitario la pasada jornada, aunque la realidad fue otra. El paso adelante no pudo ser porque enfrente se encontraba un rival muy bien posicionado que mantuvo la solidez defensiva durante todo el partido, con una excepcional actuación de Haynes y, porque los propios jugadores no encontraron su sitio en la cancha, permitiendo errores tanto en ataque y en defensa como cogiendo rebotes.
Si bien es cierto que intentaron maquillar el resultado en el último cuarto, con Zamora como referente, cuando ya no quedaba tiempo para obrar la remontada. Maquillar porque los grancanarios llegaron a abrir una brecha de 30 puntos al comienzo del tercer cuarto.
Empezaron anotando los visitantes, pero enseguida los locales igualaron el resultado, única vez que se vio esto en todo el partido. A los largo del primer cuarto los morados vieron como rápidamente los de Pedro Martínez se iban en el marcador (2-11) y dejaban constancia de lo que finalmente sería el resultado.
El parcial de 6-20 obligó a Casimiro, para insuflar confianza a sus jugadores, a pedir el primer tiempo muerto que, a la postre, no serviría para dar con la mejora del conjunto vallisoletano. Con un recital amarillo legó el final de este primer cuarto (14-31) que dejaba muy tocados a los locales.
Quedaba casi todo el partido por delante y la necesidad de remontar el resultado se antojaba imperiosa para los vallisoletanos, sin embargo, el segundo cuarto comenzó igual que terminó el primero. Fallos de cara al aro y apenas ningún rebote, lo que propició al el conjunto canario seguir arrasando en el marcador.
Aumentó, así, las distancias en el electrónico el cuadro visitante llegando a una ventaja de veinte puntos (22-42). Haynes, que estaba siendo el mejor jugador del Gran Canaria, anotó durante esta primera parte 25 puntos. Antes del descanso esta diferencia se vio reducida a los 18 para terminar el primer periodo (31-49).
En la reanudación, el minuto 25 fue crucial para los locales ya que vieron como los canarios abrían una brecha de 30 puntos (33-63). El Blancos de Rueda, totalmente anulado, carecía de capacidad de reacción, aunque la salida de Jhornan Zamora, un habitual en el banquillo morado, proporcionó revulsión al ataque vallisoletano.
El ‘Granca’ se relajó durante los minutos finales de esta parte al ver que ya tenía amarrado el partido, lo que llevó al Blancos a maquillar el resultado con un aumento de la intensidad en ataque terminando el tercer cuarto con 46-64 en el marcador.
Durante el último cuarto los pucelanos no cejaron en el empeño de remontar, aunque con un rival bien posicionado, poco podían hacer. Sí consiguieron recortar las distancias estableciendo una diferencia de dieciséis puntos (54-70). Un espejismo, ya que finalmente concluiría el encuentro 70-89 con pitada general de la afición vallisoletana, que ve como su equipo toca fondo y está ada vez más cerca del descenso.
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