| Ficha técnica | 5- Real Madrid: Casillas, Arbeloa, Ramos, Carvaho (Varane, min. 46), Marcelo, Khedira, Xabi Alonso, Kaká, Ozil (Callejón, m.68), Higuaín (Morata, min.80) y Cristiano Ronaldo.
0– RCD Espanyol : Casilla, J.López, Moreno, Raúl Rodríguez (Amat, m. 60), Didac, Forlín, Romaric, Verdú, Weiss, Coutinho (Raúl Baena, m.46) y Álvaro (Sergio García, m.46).
Goles: 1-0, m.23: Cristiano. 2-0, m.37: Khedira. 3-0, m. 47: Higuaín. 4-0, m. 66: Kaká. 5-0, m. 77: Higuaín.
Árbitro: Teixeira Vitienes (colegio cántabro). Amonestó por el Madrid a Carvalho (min. 30) y por el Espanyol a Romaric (min. 54), Forlín (min. 55) y Baena (min. 82) .
Incidencias: Partido disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante 75.000 espectadores. Terreno de juego en buenas condiciones. |
| El líder borró de un plumazo las esperanzas del Barça de reducir algún punto en esta jornada. Con una presión asfixiante y una eficacia demoledora reventó las costuras de la débil defensa plantada por Pochettino y las redes de la portería catalana. En un abrir y cerrar de ojos el Madrid se adueñó de la pelota, nubló la visión de Verdú y ejerció una presión asfixiante sobre el Espanyol que tenía el encuentro perdido en el descanso. Después llegó la exhibición merengue con un Kaká colosal, un Higuaín famélico de gol y un Cristiano, una vez más, demoledor.
Fue una actuación estelar del conjunto de Concha Espina donde Mourinho sorprendió dejando a Granero y Callejón en el banquillo. Todo indicaba que el canterano podría jugar su quinto partido consecutivo como titular en el Bernabéu, al igual que el ex periquito, tras las dolencias de Kaká durante la semana. No fue así y el técnico portugués acertó porque Khedira se comió el mediocampo contrarrestando la fuerza de Forlín y Romaric, liberó a Xabi Alonso y marcó el segundo de la noche. Tampoco fue menos el brasileño, sus diagonales y movilidad zarandearon la defensa perica hasta que sucumbió a la pegada blanca.
El Espanyol, degradado
Tras los titubeos iniciales, el Espanyol dejó de ver la luz y el Madrid inclinó el campo para maniatar a su rival. Una actuación estelar donde los catalanes fueron meros figurantes a partir del ecuador del primer acto. Antes, un valiente Pochettino jugó con fuego. No cambió su estilo para jugar en el Bernabéu. Defensa adelantada, algo de presión y una intentona por jugar la pelota que no prosperó en ningún momneto.
La defensa foránea era tan agresiva como débil, especialmente con Cristiano, a pesar de ello las diagonales de Kaká y Ozil se abrieron hueco creando peligro a partir del cuarto de hora. El Madrid ya había decidido quitar la pelota y el oxígeno a su rival. El pelotazo se convirtió en el único recurso de unos pericos sin huecos para conectar con Verdú o con Coutinho, desaparecidos, un equipo que se gusta con el balón que sufre si no controla el juego.
Los 30 goles de Cristiano
Así llegó el primer latigazo del líder. Raúl Rodríguez no quiso rifar el esférico cuando era la única opción ante la presión blanca, regaló un balón horizontal cerca de la medialuna del área que recuperó Ozil, pasó a Higuaín quien colocó en boca de gol el primero de la noche. Cristiano batió a Casilla por el palo corto. 30 goles en Liga para el portugués.
El Madrid ya había entrado en trance, moviendo el balón con rapidez y a todo gas, con una defensa rival muy adelantada que se vio superada una y otra vez por la movilidad blanca. Pase al hueco para que Higuaín, Kaká y Cristiano cercasen la portería perica. Ya no había marcha atrás, y salvo un tímido tiro de Coutinho, los hombres de Mourinho habían decidido ‘matar’ el partido antes del descanso. Esta vez fue con una triangulación en el corazón de la retaguardia de Pochettino. Tres toques entre Khedira, Cristiano y Ozil, dejaron solo ante la portería al primero. Con la tranquilidad del mejor delantero puso la pelota lejos de Casilla y en el fondo de la red. La operación había finalizado.
Un Higuaín hambriento
El líder estuvo a punto de hurgar mucho más en la herida de los catalanes pero Higuaín perdonó antes del descanso tras una espectacular galopada de Cristiano. El ‘Pipa’ aclaró ideas en los vestuarios y a la vuelta encontró el ansiado premio tras un bonito pase de Kaká. El Madrid había cerrado todo atisbo de remontada rival. Es más, siguió generando peligro, ya con Varane sobre el césped. Mourinho no quería riesgos tras la tarjeta amarilla recibida por Carvalho en la primera mitad.
El Espanyol, irreconocible en el Bernabéu, era un muñeco de trapo ante la mejor versión de Kaká y la potencia de Cristiano. El brasileño puso el cuarto tras una gran jugada colectiva en la que un cambio de ritmo y un toque sutil fueron suficientes para llevar el balón a la red. Los blancos se gustaban, la afición se divertía e Higuaín quería más. No cesó de tirar desmarques hasta conseguir otro tanto más. Esta vez ejecutó a Casilla con el exterior tras una nueva asistencia de Kaká. Incluso el canterano Morata tuvo minutos para marcar en uno de los mejores partidos de un líder intratable.
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