Mueren cuatro personas, incluidos tres niños, en un bombardeo contra un campamento de refugiados en la Franja

Heridos tres trabajadores médicos en un nuevo ataque contra un hospital en el norte de Gaza

Al menos cuatro personas, entre ellos tres niños, han muerto este lunes en un nuevo bombardeo ejecutado por el Ejército de Israel contra el campamento de refugiados de Nuseirat, situado en el centro de la Franja de Gaza.

Las víctimas han sido identificadas como un padre y sus tres hijos, residentes en un apartamento en la torre Baraka del campamento, según ha recogido el diario palestino 'Filastin', vinculado al Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).

Asimismo, al menos tres trabajadores médicos han resultado heridos en un ataque perpetrado por un dron israelí contra la recepción y el departamento de emergencias del Hospital Kamal Aduan, ubicado en el norte del enclave palestino.

El centro médico ha sido atacado y asaltado en varias ocasiones por las tropas israelíes durante las últimas semanas, lo que llevó al Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) a denunciar la semana pasada que el hospital se ha convertido en "una zona de guerra".

Las autoridades de Gaza, controladas por Hamás, ya denunciaron hace varias semanas que el Ejército de Israel había llevado a cabo un asalto en las instalaciones sanitarias y detenido a la mayor parte del personal, entre ellos un miembro de la organización no gubernamental Médicos Sin Fronteras (MSF), tras causar importantes daños materiales en el hospital.

Por otra parte, el Ejército israelí ha anunciado este mismo lunes una "expansión" de la "zona humanitaria" en el oeste del enclave y ha afirmado que incluye "hospitales de campo, tiendas de campaña, equipamiento para refugios y suministros de comida, agua y medicinas".

"Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) seguirán trabajando para materializar los objetivos de la guerra, incluida la eliminación de Hamás y el regreso de todos los secuestrados", ha afirmado a través de su cuenta en la red social X.

El anuncio llega ante las denuncias internacionales por su última ofensiva terrestre en el norte de Gaza, que deja miles de muertos, heridos y desaparecidos y que ha llevado a un aumento de las críticas por la casi total falta de ayuda humanitaria a la población.