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Ocho países del norte de Europa y del Báltico han hecho este domingo un llamamiento a la celebración de nuevas elecciones en Georgia ante y han condenado la "violencia e intimidaciones" contra "manifestantes pacíficos, políticos y periodistas" que denuncian irregularidades en los recientes comicios. "Instamos a las autoridades georgianas a tomar de inmediato medidas (...) para aplicar las recomendaciones electorales de la OSCE (Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa) y considerar la posibilidad de que haya nuevas elecciones basándose en estas recomendaciones", indica la declaración conjunta. El texto, suscrito por Dinamarca, Estonia, Finlandia, Islandia, Letonia, Lituania, Noruega y Suecia, señala que "Georgia necesita urgentemente una vía para salir de la crisis y restablecer la confianza de la población en sus instituciones democráticas". Además, los ocho países muestran su "alarma" por la "deriva hacia la polarización y la crisis" y reiteran su defensa de la necesidad de una "investigación imparcial sobre las irregularidades de las que se ha informado antes y druante las elecciones parlamentarias del 26 de octubre" "Hemos condenado la violencia y la intimidación contra manifestantes pacíficos, políticos y representantes de medios de comunicación y lamentamos las amenazas contra la presidenta Salome Zurabishvili", han recalcado.
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