
UniCredit ha asegurado este martes que, tras recibir la autorización con condiciones por parte del Gobierno de Italia en relación con la oferta sobre su rival doméstico Banco BPM, no le es posible tomar una decisión concluyente sobre el camino a seguir hasta que el Ejecutivo no aclare a la entidad sus cuestiones respecto de las pescripciones planteadas por Roma para autorizar la transacción.
La semana pasada, el Consejo de Ministros del Gobierno liderado por Giorgia Meloni decidió ejercer, "con el fin de proteger intereses estratégicos de seguridad nacional", poderes especiales en forma de la imposición de requisitos específicos, en relación con la oferta pública de canje voluntaria sobre todas las acciones ordinarias de Banco BPM por UniCredit.
La entidad dirigida por Andrea Orcel sostiene que el decreto que recoge dichas prescripciones del Gobierno italiano se traduce en restricciones (a la forma en que la entidad combinada gestionará sus futuras actividades crediticias y liquidez, así como al derecho a enajenar participaciones y gestionar adecuadamente los activos bajo gestión de Anima, y en relación con las actividades de UniCredit en Rusia.
En este sentido, UniCredit ha afirmado este martes que tiene la clara intención de mantener o aumentar la exposición de la entidad combinada a las pymes y seguir brindándoles apoyo, además de continuar gestionando los activos bajo gestión de sus clientes estrictamente en su mejor interés, mientras que se compromete a seguir reduciendo su presencia en Rusia, que ya se ha reducido en torno al 90% en los últimos tres años, en consonancia con la decisión del BCE.
"El uso de poderes especiales en una operación nacional entre dos bancos italianos es inusual, y no está claro por qué se invocó en relación con esta transacción, pero no en transacciones similares actualmente en curso en el mercado italiano", afirma UniCredit, añadiendo que las condiciones planteadas están sujetas a diferentes interpretaciones y podrían parecer "no estar plenamente alineadas con la legislación italiana y de la UE, ni con las decisiones de las autoridades reguladoras".
De hecho, la entidad advierte de que las prescripciones impuestas a UniCredit "podrían mermar su plena libertad y capacidad para tomar decisiones acertadas y prudentes en el futuro, e incluso dar lugar a resultados imprevistos".
De este modo, más allá de la facultad general de solicitar a la autoridad la reconsideración de una decisión emitida, dado que el decreto contempla expresamente la posibilidad de que UniCredit informe inmediatamente a la autoridad si no es posible implementar, total o parcialmente, las prescripciones, el banco "ha respondido con prontitud a las autoridades con su opinión sobre el decreto y espera su respuesta".
Hasta entonces, UniCredit ha advertido de que "no está en condiciones de tomar una decisión concluyente sobre el camino a seguir en lo que respecta a su oferta en Banco BPM".
UniCredit tenía previsto dar comienzo el próximo 28 de abril al periodo de aceptación de su oferta pública sobre Banco BPM, después de que la Consob, el regulador del mercado italiano, aprobase la transacción a principios de abril.
De tal manera, el período de licitación, acordado con Borsa Italiana, comenzaría a las 8.30 horas del 28 de abril de 2025 y concluiría a las 17.30 horas del 23 de junio de 2025, ambos incluidos.
Según la propuesta, UniCredit ofrecerá 0,175 acciones ordinarias propias de nueva emisión como contraprestación por cada acción de Banco BPM, lo que valora en unos 13.700 millones a Banco BPM.
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