El Consejo General de Enfermería califica de “totalmente excepcional” el caso de los bebés cambiados del hospital de Logroño

MADRID, 08 (SERVIMEDIA)

El Consejo General de Enfermería (CGE) calificó este miércoles de "totalmente excepcional” el caso de los bebés cambiados en el hospital de Logroño, del que informó ayer ‘El País', un hecho que ocurrió en el año 2002 .

Así, Guadalupe Fontán, enfermera del Instituto de Investigación del CGE destacó en declaraciones a los medios que “la identificación inequívoca del recién nacido es una de las prioridades de los sistemas de calidad que tiene todo el Sistema Sanitario” e insistió en que este sistema está “recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS)” y forma parte de la ‘Estrategia de Calidad’".

También explicó que “cada comunidad autónoma tiene sus propias normativas para hacer que los centros cumplan y den garantías de seguridad en este sentido”.

Las dos mujeres implicadas nacieron el mismo día en el hospital logroñés de San Millán, y ambas lo hicieron con apenas cinco horas de diferencia y con poco peso, de ahí que fuesen destinadas al área de incubadoras para permitir su desarrollo completo. Fue entonces, cuando se produjo el supuesto fallo de identificación que provocó que las pequeñas acabaran en brazos de una familia que no era la suya.

Fontán, insistió en que la primera medida para “evitar que estos casos” ocurran es el fomento de la “no separación” de la madre y el bebé desde el mismo momento del nacimiento. Por lo tanto, si el parto se produce en el paritorio o en un quirófano, los profesionales “realizan esa identificación”, antes de que se haya producido el aislamiento de ambos.

Esta “identificación” se realiza con brazaletes, tanto para la madre como para el hijo, con unos números exclusivos para cada recién nacido. Según insistió la enfermera, “esos códigos van tanto en la pinza del cordón umbilical como en el brazalete de la madre y del niño”. Así como, hay algunas instituciones que “suman muestras sanguíneas” para la identificación de ADN.

En este sentido, las sociedades científicas recomiendan la combinación de estos métodos de identificación “inequívoca” y de “garantía”, puesto que se ha demostrado que sólo el uso de la huella plantar “no es lo suficientemente seguro”.

Ahora una de las mujeres afectadas que se ha criado con una familia que no era la suya exige una indemnización al hospital por el fallo cometido.