MADRID, 12 (SERVIMEDIA)
La diputada de Unidas Podemos (UP) de la Asamblea de Madrid Paloma García defenderá en el próximo Pleno parlamentario una proposición no de ley en la que se insta al Gobierno regional a “elaborar y aprobar una estrategia de agresiones cero al colectivo Lgtbi, que estructure las actuaciones de las policías locales en la región con el objetivo de reducir las agresiones a este colectivo”.
UP propone “impulsar con apoyo presupuestario específico la creación y refuerzo de las Unidades de Diversidad en las policías municipales, integrando dicho apoyo como parte de la Estrategia de Seguridad Integral en la Comunidad de Madrid 2021-2024<i>”</i>.
Asimismo, pide promover la educación en diversidad sexual y contra el odio a la diversidad sexual, con asignaturas específicas en los centros educativos.
También plantea aumentar la colaboración institucional y el apoyo económico para el Observatorio madrileño contra la LGTBIfobia .
UP considera necesario destinar recursos, a través de la estrategia ESICAM179, en el Plan Anual de Formación y Capacitación para Policías Locales que ejecuta el Instituto de Formación Integral en Seguridad y Emergencias (IFISE), para impartir formación obligatoria en materia de diversidad sexual y delitos de odio destinada a las policías municipales de la Comunidad.
Otras de sus medidas son promover la creación de un centro de memoria y cultura Lgtbi, en colaboración con sus organizaciones, como mecanismo de preservación y recuerdo de las vidas y violencias que han sufrido y sufren las personas de este colectivo en la Comunidad, incluidos los delitos de odio.
INCIDENTES DE ODIO
UP expone en la citada proposición que los incidentes de odio y, especialmente, las agresiones de odio contra el colectivo Lgbti, son “una de las peores lacras que viven las personas lesbianas, gays, trans, bisexuales o cualquier otra forma de la diversidad sexual”. “Estas agresiones, dirigidas de manera específica y deliberada contra miembros de un grupo vulnerable, tienen como objetivo la intimidación, el miedo y, en último término, la invisibilización y la vuelta al armario del conjunto de la población Lgtbi”, se expone en la citada proposición.
UP considera que estos “incidentes y agresiones son particularmente graves en la Comunidad de Madrid, dado su carácter de lugar abierto, de libertad para la diversidad sexual, referente en todo el Estado”.
A su juicio, Madrid es una comunidad autónoma que es, “para muchas personas Lgtbi de toda España, un horizonte de esperanza, de protección, de igualdad y de libertad, ejemplificado en el barrio de Chueca, gracias al trabajo incesante del activismo Lgtbi, que ha logrado que Madrid sea un referente no solo nacional sino internacional”.
El número de incidentes registrados por el Observatorio Madrileño contra la LGTBIfobia ha pasado de 240 en 2016 a los 321 en 2019, un aumento del 33% desde 2019, fecha con los últimos datos comparables, antes de la pandemia.
A su vez, a nivel estatal y según los datos del Ministerio del Interior, los delitos de odio por orientación sexual e identidad de género han pasado de 230 en 2016 a 283 en 2019, un aumento del 23% de estos delitos por odio a la diversidad sexual.
UP considera “necesario que la Comunidad de Madrid actúe de manera decidida, en el ejercicio de sus competencias, para impulsar una estrategia que tenga como objetivo reducir a cero las agresiones al colectivo Lgtbi”.
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