Tres meses después, Vallecas revivirá un partido que difícilmente se borrará de las retinas de los cerca de quince mil espectadores que presenciaron el último encuentro de la temporada pasada. Aquel día, un gol de Tamudo en el descuento y en posición antirreglamentaria, dio a los de Vallecas el pase a continuar otro año más en Primera División.

Mes de mayo, mes de finales. Y Vallecas no será menos. El partido que enfrentará a rayistas y granadinos promete ser el centro de atención de todos los focos en la última jornada de una liga que toca a su fin y en la que la pelea por escapar de los puestos de descenso se antoja de lo más emocionante. 

El choque entre franjirrojos y blaugranas llega justo después de conocerse la no continuidad del técnico catalán, Pep Guardiola, en el banquillo del Camp Nou.

Al parte de lesiones del conjunto rayista se le une, ante el partido que les enfrentará al Atlético de Madrid, la imposibilidad de disponer de los jugadores cedidos por el club vecino. Joel, Pulido y Diego Costa se unen a los lesionados Labaka, Javi Fuego, Míchel y Armenteros.

El cuadro rayista se mostró superior durante todo el partido a los rojillos, que en el descanso ya perdían por cuatro goles. La victoria permite a los de Sandoval tocar con los dedos el objetivo de la temporada a falta de siete jornadas para el final. El Osasuna podría caer de puestos europeos.

Los problemas se acumulan en la entidad rayista después de que a los malos resultados de las últimas jornadas, se hayan unido, a última hora, los problemas entre la directiva y el cuerpo técnico. El Osasuna quiere sacar tajada de la situación convulsa de su rival para afianzarse en puestos europeos.