No por menos, el análisis de los datos vienen a arrojar una realidad clara en 1980 el PIB China era del 2,3 del PIB mundial , en 2019 su PIB ascendía al 17,4% y tras la pandemia las tendencias apuntan a que será superior al 20%, el primero en el mundo en poder adquisitivo. Datos tremendamente reveladores si la comparativa se lleva sobre el crecimiento de las economías Europea, China o de EEUU. Un elemento que de nuevo arroja un posicionamiento favorable al expansionismo asiático del gigante chino. Estará por ver sí esta lucha por la hegemonía será de convivencia o confrontación. Máxime cuando Rusia y otros países emergentes aparecen como aliados del jugador asiático en el tablero de la geopolítico.