| ||||||||||||||||||||||
Sergio Heredia finaliza con estas palabras su escrito ¡Qué vergüenza!, en que describe los alborotos que se produjeron durante el partido de futbol que jugaron el Aleró y el Collrenc, de la Federación Mallorquina, entre los padres de los jugadores. Espectáculo desagradable que reactivó las alarmas en el fútbol.
|