El tenista serbio Novak Djokovic resultó ganador del atractivo duelo de la primera ronda del Mutua Madrid Open, cuarto Masters 1.000 de la temporada, que le midió este lunes al japonés Kei Nishikori y que se resolvió en dos sets por 7-5, 6-4 y casi dos hora de partido donde ambos mostraron estar lejos de su mejor nivel, mientras que el francés Gaël Monfils será el rival de Rafa Nadal en su estreno después de batir al georgiano Nikoloz Basilashvili (6-2, 3-6, 6-3).
Tanto el de Belgrado como el de Shimane están intentando recuperar el tenis que llevó al primero a dominar el ranking y al segundo a codearse con los mejores del mundo. 'Nole' había advertido que necesitaba confianza para volver a ser el de antaño, versión de la que se ha alejado por sus lesiones en el codo, mientras que el asiático, también por culpa de los problemas físicos, al menos había alcanzando la final en Montecarlo ante Rafa Nadal.
Esto le daba al nipón cierto favoritismo sobre el exnúmero uno del mundo que sólo acumulaba reveses y disgustos en esta campaña, pero que supo ser más sólido en la pista Manolo Santana, donde los errores brillaron por encima de los grandes golpes, que también los hubo.
Un total de 59 errores no forzados adornaron la estadística del choque entre ambos, 26 para Nishikori y 33 para un Djokovic, que lo supo compensar con un mayor número de ganadores (26 por 21) y mejor gestión de los momentos decisivos de cada una de las dos mangas.
El partido, de todos modos, fue igualado. El japonés fue el primero que gozó de ventaja con un 'break' en el quinto juego, pero el serbio devolvió al instante un equilibrio que parecía que provocaría que todo se definiese en la 'muerte súbita'. El balcánico, que ya había desperdiciado dos pelotas de set con 5-4, lo evitó antes con una nueva rotura en el duodécimo juego.
El segundo set trajo una subida de nivel de ambos y una igualdad máxima donde los servicios se imponían. Pero Djokovic supo sacar partido a ir por delante para presionar en el momento adecuado a su rival. Este, con 5-4 abajo, tenía el empate en el marcador bien encarrilado con un 40-15, pero no acertó a cerrar el juego y el exnúmero uno del mundo no lo desaprovechó para sentenciar su pase a la segunda ronda.
MONFILS, RIVAL DE NADAL
Por su parte, el francés Gaël Monfils derrotó al georgiano Nikoloz Basilashvili en tres sets (6-2, 3-6, 6-3) para citarse con el número uno del mundo, Rafa Nadal, por decimosexta vez en el circuito.
El galo, número 41 del mundo, enlazó cinco juegos consecutivos ganados, gracias a dos roturas, para adelantarse 5-1, una renta que le permitió poco después adjudicarse la manga en sólo 23 minutos. La dinámica positiva de Monfils vaticinaba un duelo tranquilo, pero el georgiano ofreció resistencia.
Así, Basilashvili resurgió en el segundo parcial para lograr, en su primera bola de 'break' del encuentro, en el segundo juego, romper a su rival, un hecho que le bastó para empatar la contienda. Sin embargo, el francés revivió en un tercer set enlazando un 3-0; aunque su contrincante le devolvió el quiebre en el quinto juego, respondió con un 'contrabreak' que a la postre le dio la victoria.
De esta manera, Monfils se volverá a ver las caras con Nadal, que cuenta con un balance positivo de 13-2 ante el galo. De hecho, este no vence al de Manacor desde las semifinales de Doha de 2012, y desde entonces el balear ganó los cinco duelos posteriores.
WOZNIACKI SUFRE ANTE BARTY
Por otro lado, en el cuadro femenino del evento de categoría Premier Mandatory, la danesa Caroline Wozniacki se llevó un buen susto ante la australiana Asleigh Barty, a la que terminó derrotando en tres sets por 6-2, 4-6, 6-4 tras más de dos horas de partido en la Arantxa Sánchez-Vicario.
La número dos del mundo demostró que ni en la tierra batida ni en la Caja Mágica madrileña acaba de encontrarse del todo cómoda y sufrió ante una rival, 18 del mundo, que desperdició un 'break' de ventaja en el tercer y definitivo parcial.
La de Odense comenzó arrolladora y se puso rápidamente con un 4-0 en una primera manga donde no dejó demasiadas opciones a Barty. Esta reaccionó en la segunda para plantar más cara, pero Wozniacki rompió en el séptimo juego para ponerse 4-3 arriba y acariciar un pase por la vía rápida.
Sin embargo, la australiana supo recuperar la rotura y cogió fuerza para encadenar cuatro juegos seguidos que le llevaron a un tercer y definitivo set donde intercambiaron los papeles. Fue Barty la que se puso 4-2 y la número dos del mundo la que replicó para remontar y llevarse el pase a tercera ronda, donde se medirá con la belga Kiki Bertens.
|