| Ficha técnica | 1 - Rayo Vallecano: Cobeño (0); Tito (2), Gálvez (1), Amat (1), Casado (1) (Vázquez m.79), Javi Fuego (1); Lass (2), Léo (2); Chori (2) (Adrián m.73), Piti (2); José Carlos (1) (Delibasic m.80).
3 – Málaga CF: Caballero (2); Gámez (0), Demichelis (2), Weligton (3), Antunes (1); Joaquín (1) (Lucas Piazón, m.77), Toulalan (2), Iturra (2), Isco (0) (Portillo, m. 72), Pedro Morales (3); Baptista (2) (Santa Cruz, m.67). Goles: 0-1 min.14 Welligton; 1-1 min.30 Piti (p); 1-2 min.55 Baptista; 1-3 min.85 Morales
Árbitro: Iglesias Villanueva (comité gallego) (1)
Incidencias: 8.300 espectadores en el Estadio de Vallecas. Terreno de juego en buenas condiciones.
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Tanteo inicial El Málaga se impuso a un Rayo dominador al que le costó imponer su ley sobre el terreno de juego con la esencia del fútbol, los goles. Los de Paco Jémez sólo pudieron batir a Caballero desde el punto de penalti, mientras que el Málaga sacó provecho de cada na de sus llegadas al área de un desgastado Cobeño. Sin hacer mucho ruido y dejando la posesión al conjunto local, de esa manera se presentó el Málaga en la sobremesa de Vallecas. Pedro Morales entendió el partido a la perfección y de sus botas saldrían los goles. el primero de ellos llegaría tras botar una falta perfecta que remató libre de marca en el segundo palo Welligton. El Rayo no se amilanó y siguió llevando la iniciativa en campo blanquiazul. la recompensa para los franjirrojos llegaría en forma de penalti cuando el meta, Willy Caballero no pudo contener la inercia y arrolló a Tito. Piti engañó al argentino para equilibrar un partido que llegaría con las tablas al descanso. Efectividad blanquiazul Tras la reanudación, se entró en una fase de lucha en el mediocampo que benefició al conjunto malagueño. De nuevo Morales se sacaría un buen centro para que Baptista volviese a saber lo que es hacer un gol. Paco Jémez mandó a sus hombres al ataque dejando la línea defensiva a cargo de Gálvez, pero las ocasiones se resistían en llegar. Le costaba un mundo al Rayo inquietar a un Málaga que, sin embargo, creaba peligro con facilidad. La entrada de Roque Santa Cruz permitió a los de Pellegrini fijar a Gálvez, lo que permitió dotar de más libertad en la medular a los cerebros blanquiazules. Cómo no podía ser de otra manera, volvió a aparecer Pedro Morales desde el costado zurdo de la línea de tres cuartos para enganchar un balón que salió directamente teledirigido al palo largo de Cobeño. Golazo y sentencia de un Málaga que comenzaba a pensar en su histórica cita del martes ante el Borussia Dortmund en los cuartos de Champions League. En el otro lado, el Rayo seguía diluyéndose con el paso de los minutos como queriendo pasar página lo más pronto posible. Al final, los tres puntos se marchan en dirección al sur de la Península devolviendo la confianza en liga y en vísperas de una semana especial en la costa andaluza.
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