El socialista José Antonio Griñán comunicará este martes al Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía su renuncia como presidente del Ejecutivo, una decisión que, según anunció a finales de julio, tomó desde la "responsabilidad" y con "transparencia". A partir de la renuncia de Griñán, el Gobierno andaluz entrará en funciones.
Este martes se celebrará el primer Consejo de Gobierno del nuevo curso político, tras el paréntesis de las vacaciones estivales. El pasado jueves, Griñán se incorporaba a su despacho en el Palacio de San Telmo, donde ha mantenido diversas reuniones, según han informado a Europa Press fuentes del Ejecutivo, que han apuntado que está previsto que sea él quien comparezca ante los medios de comunicación tras la reunión del Consejo de Gobierno.
En cuanto Griñán anuncie su renuncia al Consejo de Gobierno, será trasladada a la Presidencia del Parlamento andaluz para que se inicie el proceso de elección de la nueva persona que estará al frente de la Junta. La Comisión Ejecutiva Regional del PSOE-A acordará este martes proponer a la actual consejera de Presidencia e Igualdad, Susana Díaz, como candidata a la Presidencia de la Junta. La decisión será ratificada el jueves por el Comité Director del PSOE-A, máximo órgano entre congresos.
Una vez que deje la Presidencia de la Junta, Griñán seguirá ostentando el cargo de secretario general del PSOE-A y de presidente federal del partido, según anunció él mismo el pasado 24 de julio.
El vicesecretario general del PSOE-A, Mario Jiménez, ha confirmado además este lunes en rueda de prensa que Griñán será propuesto como senador en representación de la comunidad autónoma, como corresponde a alguien que es presidente del Partido Socialista. Se ha mostrado convencido de que ello es lo razonable y es "bueno" para el proyecto socialista, dado el enorme prestigio y la experiencia política e institucional que atesora.
Tres años y medio de presidente
Griñán asumió la Presidencia de la Junta el 23 de abril de 2009, en sustitución de Manuel Chaves, que dejó el cargo para incorporarse al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. José Antonio Griñán era en aquel momento vicepresidente segundo y consejero de Economía de la Junta.
Tras las pasadas elecciones autonómicas de marzo de 2012, Griñán fue reelegido como presidente de la Junta, en virtud de un pacto entre PSOE-A e IULV-CA. En dichos comicios, el Partido Socialista, por primera vez en su historia, dejaba de ser la fuerza más votada, desbancado por el PP-A, que, no obstante, no logró la mayoría absoluta que auguraban numerosas encuestas.
Un año y tres meses después de esas elecciones, Griñán aprovechaba su intervención inicial en el pasado debate sobre el Estado de la Comunidad, celebrado en junio en el Parlamento, para anunciar que no optaría a la reelección como presidente de la Junta en los próximos comicios autonómicos, que 'tocan' en 2016. A partir de ese día se sucedieron los acontecimientos, con primarias del PSOE-A, de por medio, para elegir a un candidato, hasta que el pasado 24 de julio Griñán anunció que dejaría la Presidencia de la Junta a principios de septiembre.
Explicó que las razones que le habían llevado a tomar esa decisión eran "varias y de distinta naturaleza", aunque las más "determinantes" fueron las personales y familiares. En su último pronunciamiento público en una entrevista publicada el domingo por los periódicos del Grupo Vocento, Griñán señalaba que renuncia porque no quiere que "ningún escándalo salpique a Andalucía ni a la Junta".
Ante el Comité Director del PSOE-A, en su calidad de secretario general, explicaba que había tomado una decisión "de futuro, desde la responsabilidad y ejecutada con transparencia". "Es la mejor decisión para agotar la legislatura y para fortalecer la estabilidad del Gobierno de Andalucía", dijo Griñán, descartando la convocatoria de elecciones anticipadas.
|